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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 15/01/2025 16:40
Festejo de gol del punta, con la casaca de Austin (Brace Hemmelgarn-USA TODAY Sports) River Plate volvió a hacer ruido en el presente mercado de pases, en el que está realizando una verdadera revolución. El mismo día en el que Gonzalo Montiel desembarcó en el país para volver a calzarse la banda roja, el club terminó de cerrar el regreso de otro hijo pródigo: Sebastián Driussi. El delantero, de 28 años, deja Austin para firmar un contrato de cuatro temporadas con la institución que lo vio nacer. El futbolista, hincha del Millonario, hizo fuerza para que su regreso se concretara. De hecho, se plantó y no inició la pretemporada como medida para presionar en pos de que la operación se concretara. Hace 25 horas, Jorge Brito, presidente de River, había sido optimista. “Esperamos tener novedades por Driussi, el jugador y River están dando todo. Luego queda en manos de Austin”, había señalado. Si bien no hay cifras oficiales, el club habría invertido entre 8 y 10 millones de dólares para asegurarse la ficha del atacante, de destacada primera etapa bajo la tutela de Marcelo Gallardo. En el medio se había metido Estudiantes, que con la asesoría del empresario Foster Gillett, había ofrecido una cifra similar. Sin embargo, Driussi agradeció el interés y subrayó: “En Argentina sólo juego en River”. Con la casaca del Millonario, el punta debutó en la 2013/2014. Gallardo lo llevó de a poco y terminó acumulando 105 partidos como titular y 28 goles. Pero fue en su última temporada cuando terminó de explotar: 23 conquistas en 44 encuentros. Ganó ocho títulos antes de emigrar al Zenit de San Petersburgo, que pagó 20 millones de dólares para asegurarse sus servicios. También se destacó con las selecciones juveniles de Argentina: pasó por el Sub 15, Sub 17 y Sub 20 (Télam) En Rusia se siguió destacando, dio otras seis vueltas olímpicas antes de mudarse a Estados Unidos en 2021. Allí se transformó en ícono de la franquicia, con la que superó los 50 tantos, con un promedio de gol de casi 0,5 por cotejo. En más de un mercado de pases sonó para volver. Esta vez, con Gallardo en el banco, no dudó. Y River hizo el esfuerzo económico. Con los certámenes locales, la Copa Libertadores y el Súper Mundial de Clubes por delante, el club está redondeando una potente ventana de transferencias, con los arribos de Lucas Martínez Quarta, la vuelta de Enzo Pérez y los fichajes de Matías Rojas, Gonzalo Tapia y Giuliano Galoppo, más allá de los casos mencionados de Driussi y Montiel. “Afortunadamente estamos en un momento en que el club tiene recursos para repatriar jugadores de alto nivel, de selección argentina. Mariano Barnao, que es parte de su equipo, trabajó codo a codo con nosotros en las negociaciones. Acá hay 3 patas. La primera es la decisión de los jugadores de querer volver a River, en edades hipercompetitivas, algo a lo que no estamos acostumbrados en Argentina. Vuelven en plenitud. Luego, Gallardo y su cuerpo técnico, fundamentales para convencerlos. Y, no menor, tener la capacidad económica. Después es fútbol, hay que entrenar y jugar. Nada garantiza nada”, había brindado detalles Brito sobre cómo trabajó la institución para reforzar al plantel. Pero los movimientos aún no terminaron. Uno de los puestos que el club busca reforzar es el del lateral izquierdo, para sumar una alternativa a Marcos Acuña (y eventualmente, Milton Casco). El elegido es Lucas Esquivel, de Atlético Paranaense, por el que River hizo una oferta por el 50% del pase, pero se estirará para comprar el 80 y quedarse con otro de los deseos de Gallardo.
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