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Concordia » El Heraldo
Fecha: 13/01/2025 08:36
El sector privado objeta que se trate de porcentajes que graven la facturación y no un costo en función del servicio prestado. En las últimas tres décadas, los municipios han jugado un papel central en el aumento de la presión fiscal a través de tasas específicas que se aplican a comercios, industrias y contribuciones inmobiliarias. Estas cargas, que en muchos casos se integran de forma casi invisible al precio final, han impactado directamente en toda la cadena productiva, especialmente en el eslabón de comercialización. El ministro de Economía, Luis Caputo, cuestionó en octubre pasado el cobro de tasas sobre servicios públicos y, recientemente, instó a los gobernadores a intervenir. Su propuesta incluye suspender la coparticipación a los municipios que apliquen tasas abusivas. “Si Argentina quiere ser competitiva sin recurrir a devaluaciones, es esencial reducir los costos tributarios”, afirmó el economista Gastón Utrera, señalando que estas tasas son un obstáculo para la competitividad global. Casos emblemáticos y reclamos judiciales Un ejemplo destacado es la disputa entre el Banco Nación y municipios como Córdoba y La Pampa. La entidad recurrió a la Justicia Federal, que falló a su favor, suspendiendo por seis meses una tasa del 7,75% aplicada en Córdoba. Esta alícuota, que incluye fondos adicionales como el “Fondo Solidario de Inclusión Social”, supera incluso los costos laborales de las sucursales del banco, generando tensiones en el sector. Estas tasas suelen ser arbitrarias y desproporcionadas respecto a los servicios prestados. Además, las nuevas plataformas digitales, que no cuentan con presencia física, compiten directamente con negocios tradicionales sin estar sujetas a estas contribuciones. Una presión fiscal compleja y desbordada El sistema tributario municipal se caracteriza por una complejidad creciente. En lugar de aplicar cargos fijos proporcionales a los servicios, se agregan alícuotas que aumentan con la facturación. Esto ha llevado a niveles de presión fiscal insostenibles, con tasas que, según Utrera, funcionan más como impuestos encubiertos. ¿Hacia un cambio en el modelo fiscal? El llamado del Gobierno Nacional a revisar las tasas municipales apunta a un cambio estructural que podría aliviar la carga sobre las empresas y fomentar un entorno más competitivo. Sin embargo, será necesario conciliar intereses entre los niveles de gobierno y encontrar soluciones que no comprometan la prestación de servicios esenciales.
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