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» Facundoquirogafm
Fecha: 12/01/2025 11:15
El descanso es esencial para el bienestar mental y físico, y los expertos coinciden en que las vacaciones son una de las mejores maneras de darle al cerebro la oportunidad de desconectar. Sin embargo, ¿cuánto tiempo se necesita para que el cerebro logre un descanso profundo? El Dr. Claudio G. Waisburg, neurocientífico y director del Instituto SOMA, explicó que el estrés crónico afecta la concentración y la capacidad de tomar decisiones, lo que hace que el cerebro requiera descansos periódicos para recuperar su capacidad. "Las vacaciones permiten desconectar, lo que ayuda a reducir los niveles de cortisol, la hormona del estrés, y favorece la neuroplasticidad, la capacidad del cerebro para reorganizarse y adaptarse", destacó. Pero, ¿cuál es la cantidad ideal de días para lograr este descanso profundo? Según estudios recientes, aunque descansos breves pueden tener beneficios inmediatos, se ha comprobado que períodos de dos a tres semanas son los más efectivos para una desconexión significativa. Un estudio de 2016 demostró que después de dos o tres semanas de vacaciones, los trabajadores mostraron mayor flexibilidad cognitiva, lo que les permitió pensar de manera más creativa y adaptarse mejor a nuevas situaciones. Por otro lado, investigaciones de la Universidad Tampere de Finlandia indican que, para obtener un descanso real y beneficioso, es necesario estar de vacaciones al menos 8 días. Es en este tiempo cuando el cerebro empieza a olvidarse de las obligaciones laborales y comienza a disfrutar de un bienestar total. En cuanto a las vacaciones cortas (de 4 a 5 días), un estudio reveló que los beneficios duran poco, siendo una "cura" temporal pero eficaz para reducir el estrés. Además de la duración, el tipo de actividades durante las vacaciones también influye en los resultados. El ejercicio regular, como marcha nórdica o ciclismo, mejora la calidad del sueño y la salud mental. También se ha demostrado que asistir a spas o realizar tratamientos de bienestar durante vacaciones de una semana tiene efectos positivos, que se mantienen por varias semanas después del descanso. El Dr. Waisburg también destacó la importancia de actividades que fomenten la relajación y estimulen positivamente la cognición, como viajar a nuevos destinos, meditar o estar en contacto con la naturaleza. Estas prácticas permiten una desconexión más profunda, facilitando la restauración mental y cognitiva. "Las vacaciones, al permitir que el cerebro descanse y procese información de manera más eficiente, fortalecen las conexiones neuronales y facilitan la consolidación de la memoria", expresó.
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