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  • Feijóo prepara todos los escenarios electorales tras un año de desencuentros con Abascal

    » Diario Cordoba

    Fecha: 30/12/2024 01:08

    Si hubieran dado los números, PP y Vox habrían gobernado juntos. Faltaron cuatro votos. Un acuerdo sin consumar que, sin embargo, ha hecho incompatible al PP con el resto de grupos en el Congreso. Al menos, hasta ahora. La relación de la derecha, condenada a entenderse si Alberto Núñez Feijóo quiere llegar a la Moncloa, no está solo deteriorada. Hay distancia y falta de sintonía. Aunque sigue prevaleciendo un objetivo compartido -el fin del Gobierno de Pedro Sánchez- los populares insisten en abarcar el máximo espacio posible. Y Santiago Abascal también tiene sus propios planes, que pasan por crecer a costa del PP. Por eso no dará su brazo a torcer en asuntos clave como la inmigración. Y por eso de los cinco gobiernos autonómicos que pactaron, no queda ni uno. Feijóo quiso enviar un mensaje muy claro en su balance de fin de año el pasado viernes: "Vox tiene que tomar la decisión de si quiere hacer oposición al PP o a Sánchez. A veces sus comportamientos son contradictorios y confusos”. El PP de Feijóo cabalga, además, en un escenario cada vez más complicado en el continente europeo. Junto con Alemania -si se cumplen los pronósticos de las elecciones de febrero- seguirá siendo uno de los pocos partidos de la derecha convencional que se mantiene como primera fuerza y a mucha distancia de su rival más extremo. Italia, Francia, Hungría, Austria… Los partidos homologables a Vox han ido arrasando a las formaciones de centro derecha uno a uno. España se ha mantenido como un cierto oasis en ese sentido. Ocurrió en las generales del año pasado (137 escaños frente a los 32 de Vox) y, de nuevo, en las elecciones europeas del mes de junio. Pero también el PP europeo se ha ido acercando a los postulados que venían defendiendo solo los partidos de ultraderecha. La inmigración es quizá el caso más claro, pero no el único. Y mientras Feijóo intenta marcar distancias con Abascal, hay dirigentes que asumen que se necesita un mínimo entendimiento. De ahí la voluntad de reconstruir relaciones en el nuevo año, conscientes de que la inestabilidad política puede conllevar cualquier giro de guion inesperado. Feijóo no tiene ninguna confianza en que haya elecciones anticipadas. Al contrario. La tesis que impera en Génova es la de que Sánchez tratará de aguantar lo máximo posible a pesar de sus dificultades para gobernar y todos los frentes, también judiciales, que tiene abiertos. La siguiente parada serán los Presupuestos Generales. Pero incluso si el presidente no logra sacarlos adelante, dicen en el PP, podría seguir gobernando. "Preparados y tensionados" Los populares han hecho muchos esfuerzos por contener la ansiedad de sus cuadros, que cada semana reclaman más dureza contra el Gobierno en vista de los escándalos que salpican a piezas clave del PSOE, como José Luis Ábalos y toda la trama de Koldo García que está relatando el supuesto cabecilla, Víctor de Aldama, en los juzgados. A eso se suma la situación de su esposa, Begoña Gómez, y otro caso, el del fiscal general del Estado. Feijóo reclama calma a los suyos. Pero eso sí, ya ha dicho en varias ocasiones recientes que “hay que estar preparados para todo”. 2025 no tiene ninguna fecha electoral marcada en el calendario. La primera, si se cumple el guion, sería ya en 2026 en Castilla y León. Sin embargo, los populares son partidarios de tener tensionado al partido “por lo que pueda ocurrir”. Y, sobre todo, la impresión que tienen muchos cargos es la de que Feijóo “poco a poco” va preparando el terreno con los distintos escenarios. Si hay suma posible con Vox (en este momento todas las encuestas así lo dibujan) el entendimiento -compartan o no un gobierno- será necesario. En la cúpula popular lo saben perfectamente, a pesar de que la estrategia sigue siendo dejar el espacio más extremo a Abascal y centrarse en comerle terreno al PSOE por el centro. En paralelo a esta realidad se están produciendo otros movimientos que no pasan desapercibidos en el Congreso. En las últimas semanas el PP ha conseguido armar una mayoría alternativa en política fiscal, que ha llegado a tumbar en impuesto a las energéticas del Gobierno, evidenciando la incompatibilidad que tienen los socios de Sánchez en asuntos nucleares. PNV y Junts se han sumado a iniciativas clave de Feijóo. Aunque los dos grupos políticos sostienen que se trata de algo circunstancial que no va más allá. También en Génova sostienen la misma idea, reconociendo que no hay una alianza concreta. "Hemos coincidido", dijo Feijóo en su comparecencia del viernes, defendiendo todos los acuerdos -también con Junts- si sirven para frenar las políticas de Sánchez. Aunque no hay una interlocución fuera del marco parlamentario, como reconocen en privado algunos dirigentes, “el camino se hace andando”. Y en el PP ponen en valor que el cordón sanitario a Vox que mantenían tanto nacionalistas vascos como los independentistas catalanes se haya flexibilizado últimamente, votando juntos en distintas ocasiones. “Ocurren cosas que hace unos meses parecían imposible”, afirman. Y, por otro lado, también el PP ha conseguido salir del aislamiento en el que se encontraba. Los números de unas futuras elecciones están por escribir, pero los conservadores trabajan por abrirse vías de interlocución con otros grupos y generar una impresión de que también pueden sumar con otros actores políticos. Hasta hace no mucho eso no parecía posible. El “estar preparados” para lo que venga no es un mensaje nuevo para las filas populares. Ya ocurrió en el descanso de verano y se ha repetido ahora, con las Navidades. Lo que Feijóo se empeña en trasladar a los suyos es que la situación política es tan delicada y existen tantos elementos que pueden desestabilizar al Gobierno, que “todo puede estallar” de un día para otro. Y si eso ocurre, ha repetido el líder conservador en varios momentos a los suyos, “tenemos que tener la alternativa lista”. En esa alternativa están también las distintas alianzas. Y Feijóo parece dispuesto a explorar todos los caminos que existen.

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