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  • Nicolás Pascual de la Parte, eurodiputado: “Hay que movilizar el dinero del Banco Europeo de Inversión para proyectos de Defensa”

    » Diario Cordoba

    Fecha: 22/12/2024 12:39

    Los países de la Unión Europea han entrado en una carrera para aumentar su gasto militar y mejorar su industria de Defensa. Corren nuevos tiempos de alto riesgo geopolítico y se busca la autonomía estratégica respecto a Estados Unidos. Bruselas ha nombrado por primera vez un comisario de Defensa, el ex primer ministro de Lituania Andrius Kubilius, y ha lanzado un Programa Europeo de la Industria de la Defensa (EDIP por sus siglas en inglés). El Parlamento Europeo debe redactar ahora un Libro Blanco que desarrolle dichos planes. En todo ello participará el eurodiputado del PP Nicolás Pascual de la Parte (Murcia, 1959), un diplomático de carrera que fue embajador de España ante la OTAN y es ahora miembro de la comisión de Defensa del Europarlamento. Pascual de la Parte recibe a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA en su despacho de Estrasburgo este pasado miércoles. ¿Qué tarea tiene el nuevo comisario de Defensa de la UE? Mi amigo Kubilius va a tener que luchar para crear las bases de una industria europea de armamento y de tecnología. Debería también llevar la política de Defensa, pero eso es más difícil. En la UE, al contrario que en la OTAN, los ministros de Defensa no tienen reuniones periódicas. ¿Hay realmente un ímpetu en la Unión Europea para desarrollar una industria de defensa conjunta? Sí. La voluntad política parece que está ahí, lo que no hay es dinero. Estamos en la mitad del Marco Financiero Plurianual [el presupuesto de la UE], que termina en 2028. Se podría crear un instrumento financiero específico, pero de momento no lo hay. Tenemos el Fondo Europeo de Defensa, pero es muy poco dinero: 1.500 millones de euros. La necesidad identificada por el nuevo comisario de Defensa para los próximos 10 años es de 500.000 millones de euros en los países de la UE. 50.000 millones más cada año de gasto en Defensa… El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, ha dicho que hay que pasar del 2% al 3% del PIB como objetivo de inversión en Defensa. ¿Habrá un Ejército europeo? Europa nunca va a tener un Ejército como tal. Se trata más bien de que los países miembros tengan capacidades disponibles para activarlas cuando sea necesario. Deberíamos disponer de una cadena de mando y control y unos procesos de toma de decisiones, como en la OTAN. Lo que se llama un Cuartel General, que sea capaz de dirigir operaciones militares con 20.000 o 40.000 soldados, algo que actualmente no puede hacer. ¿Eso está en la Brújula Estratégica, el plan de acción de la UE en materia de seguridad y defensa? Ahí está la idea de convertir la instalación de gestión militar existente en un Cuartel General, pero el Reino Unido se oponía. ¿Por qué? Porque querían que la seguridad de Europa dependiera de la OTAN. Ahora ya están fuera. ¿Washington está de acuerdo con la idea de que la UE tenga un Cuartel General? Sí. Lo que no quiere son duplicidades ni en la planificación ni en las capacidades. Que si la Alianza planifica el despliegue de, digamos, 18 brigadas en determinados teatros de operaciones, la UE no compita con ellos en esos lugares. Nuestra planificación tiene que avanzar mano a mano con la OTAN, no puede ser alternativa. ¿Habla de misiones de formación y entrenamiento? En el futuro podrían ser también de combate, aunque nunca se ha hecho: que la UE llegue primero con una “cabeza de playa”, una fuerza de despliegue rápido, y luego venga la OTAN. Pero es difícil, porque son dos organizaciones con dos cadenas de mando y dos estructuras diferentes. Y habría que pedir permiso al Consejo de Seguridad de la ONU… Sí, la UE nunca interviene sin permiso del país afectado o de la ONU. ¿Podríamos intervenir, por ejemplo, en el Sahel? ¿Debaten de ello en la comisión de Defensa? De momento no. El foco está en Ucrania, que es la prioridad absoluta. Lo que pase en Ucrania nos va a afectar a todos, también a los españoles. En el impulso a la industria militar europea, ¿qué papel cumple España? España no cuenta con grandes campeones militares globales, pero tenemos una industria militar mediana muy buena. En el sector de radares y sensores, por ejemplo, Indra es de lo mejor del mundo. ¿También radares y sensores militares? Sí. Y tenemos a Navantia también que hace submarinos y fragatas de mucha calidad. A Pizarro, el vehículo acorazado de combate de tierra que hace Santa Bárbara, adquirida por General Dynamics de Estados Unidos. Hemos vendido toda nuestra industria de munición a la alemana Rheinmetall: la empresa española Expal, Explosivos Alaveses, que estaba dentro de Maxam, la antigua Unión de Explosivos Riotinto. Se les vendió a los alemanes con la autorización requerida del Ministerio de Defensa por ser estratégica. ¿Cree que fue una buena decisión? Yo no la habría autorizado, nos hemos quedado sin la joya de la corona. Ni los americanos, ni los franceses ni los alemanes la habrían vendido. Especialmente ahora que hay una demanda brutal de munición. Con ello, Rheinmetall se ha convertido en la primera empresa de munición del mundo, especialmente de la de 155 mm, que es la que se utiliza. España tenía 13 fábricas produciendo munición de primera categoría: en Murcia, Asturias, Palencia, Burgos, Sevilla, Madrid… Los franceses denunciaron la venta porque atentaba contra la seguridad colectiva, decían. En realidad es que ellos también querían estas empresas españolas. Dice que España no tiene un gran campeón nacional… A lo mejor no hace falta tenerlo. La clave es tener empresas del sector pequeñas y más flexibles, que se inserten en las cadenas de valor. Lo importante es que las empresas españolas tengan tecnología punta. Pero no tienes por qué tener un mastodonte como la estadounidense Lockheed Martin. Ese es un caso interesante. Con Bill Clinton se inició un proceso de consolidación de las empresas de la industria militar hasta las cinco grandes actuales. Pero resulta que ninguna producía munición porque no era económicamente rentable. Y por ello, Rusia puede ganar ahora la guerra, por incomparecencia occidental: porque no tenemos munición. Balas no quiere hacer nadie, porque tienen poco valor añadido y no sabes si se van a necesitar… ¿En qué consiste la iniciativa de la UE para fomentar una industria militar europea? Está la Estrategia Europea de Industria de Defensa, aprobada en marzo de este año. Y ahora el Parlamento tiene que redactar en base a ella el Plan Europeo de la Industria de Defensa, el instrumento legal que posibilite la creación de esa base industrial y tecnológica de la Unión Europea. ¿Cuándo estará listo? En 18 meses o un año. ¿Y qué supondrá? Europa tiene que dotarse de capacidades militares propias. Actualmente el 80% del armamento que hay en Europa no es europeo. De eso, el 70% es americano. Nuestro objetivo es llegar a un 65% de producto europeo en todos los proyectos de desarrollo pagados con fondos europeos, por ejemplo el desarrollo de un dron. ¿Para cuándo ese objetivo del 65% de participación europea? Para ya. Solo se pueden beneficiar de dinero europeo los proyectos que incluyan el 65% de participación europea. Buy european… Make Europe Great Again. Pero eso implica darle la vuelta a la situación actual, ¿nos va a dejar Estados Unidos? Lo hicimos con Airbus, que ahora hace mejores aviones que Boeing. Y eso enfadó a Donald Trump y nos impuso aranceles. Hay quien dice que una de las contrapartidas para que no ponga aranceles a Europa ahora es prometerle comprar armamento estadounidense… Hay cosas que se pueden hacer en el corto plazo y otras que son de largo plazo. Con la guerra en Ucrania, la gente que se quiere rearmar, como los polacos, tiene que comprar F-35 estadounidenses, porque no hay un avión equivalente de quinta generación europeo. Se está desarrollando el FCAS, pero no llegará hasta 2040. Es decir, no estamos compitiendo en los grandes sistemas de defensa… Exacto. No hay ninguna empresa en el mundo que te haga un sistema de defensa ella sola. El submarino S-80 español, por ejemplo, si lo desmontas son piezas americanas, alemanas, francesas. Hoy en día nadie hace un submarino entero. ¿Y eso es una oportunidad para la industria europea? Eso es, pero el problema es que no hay pedidos. Los Gobiernos se tienen que comprometer, porque sin pedido no hay oferta. Para que Navantia o la británica BAE o la francesa Dassault inviertan masivamente en cadenas de producción tienen que tener pedidos sobre la mesa. ¿Qué se debe hacer? Hay varias posibilidades, Seguir quitándole el IVA a los proyectos transnacionales de armamento de los proyectos de la Agencia Europea de Defensa (EDA). Tenemos que movilizar el dinero del Banco Europeo de Inversión (BEI), que hasta ahora no se empleaba en armamento ni en Defensa. Tendría un papel tractor de la empresa privada, que hasta ahora se consideraba un dinero sucio. Si el BEI mete dinero, arrastra a la empresa privada, sobre todo para el I+D de tecnologías duales. El 80% se venden en el mercado civil, y el resto en el militar. Nadie hace una tecnología meramente militar, porque no se vende. ¿Por ejemplo? La Inteligencia Artificial es dual, como lo es el Internet de las Cosas, la telefonía móvil… Para esto hay que hacer un cambio de mentalidad. Si subimos el 1% del PIB en gasto militar, hay que quitarlo de otro lado… Pero es que España está en el 1,3%, hay margen hasta el 3%. Pero, ¿de dónde se quita? Mientras se habla en la calle, por ejemplo, sobre la infra financiación de las universidades públicas, ¿cómo se convence a la población de gastar más en una guerra a miles de kilómetros? Ese no es el planteamiento, sino que se debe invertir en Defensa para crear trabajo cualificado. Cada puesto en el sector crea 10 empleos de suministradores porque es material muy sofisticado. Si en Cartagena hacen un submarino, hay docenas de empresas en el Campo de Cartagena que suministran piezas para hacer el submarino. Es lo que se llama allí el cluster Caetra. Es una inversión que produce empleos y PIB. Lo que hace el Tesoro de Estados Unidos financiando la guerra en Ucrania es también financiar a su industria, que genera más de un millón de puestos de trabajo. Con la historia de guerras que tenemos en Europa, ¿usted duda en algún momento de esta carrera armamentística en la que estamos metidos? ¿Tiene miedo de que vayamos muy rápido? Mientras Vladímir Putin tenga el planteamiento que tiene y Rusia le dedique 120.000 millones a Defensa en 2025, y el 9% de su PIB en defensa y tenga la economía militarizada, es muy difícil mirar para otro lado. ¿Acaso es Putin una amenaza directa para España? Para España no, pero sí para todos sus vecinos: los Bálticos, Polonia, República Checa, Hungría, Rumanía… ¿Estamos haciendo seguidismo sin pensar en los intereses nacionales de España? La invasión de Ucrania por Rusia disparó el precio del grano. Eso nos afectó directamente. Los refugiados nos afectan. Vendrían siete u ocho millones más a España si hay una paz injusta allí. Eso es más caro que invertir en Defensa. Reconstruir el país, acoger refugiados. Al mismo tiempo, no debemos descuidar el flanco sur, vulnerable y con tráficos ilícitos en el Mediterráneo de todo tipo.

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