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» Elterritorio
Fecha: 04/12/2024 14:24
Se trata de Héctor Fernando Seles, oriundo de Bernardo de Irigoyen, quien argumentó su pedido en el cuidado de su hijo, aunque el tribunal entrerriano consideró que el menor no se encuentra desamparado y está siendo atendido por la madre. miércoles 04 de diciembre de 2024 | 13:51hs. La droga fue detectada en pleno transporte hacia Buenos Aires. //Foto: captura de pantalla. Héctor Fernando Seles, condenado hace algunos meses como cabecilla de una banda que traficaba sustancias sintéticas, pidió el beneficio de la prisión domiciliaria para cuidar a su hijo ante la angustiosa situación económica que, según dijo, atraviesa su familia en Misiones. El hombre fue condenado en junio pasado por la Justicia Federal en Paraná (Entre Ríos) a la pena de siete años y dos meses de cárcel, tras hallarlo responsable de comprar en Brasil 8.913 pastillas y polvo de MDMA y organizar el traslado a Buenos Aires donde estaban los compradores. El valor del cargamento se estimó en 250.000 dólares. La camarista federal Noemi Berros rechazó el planteo por considerar que la pareja del condenado, conforme lo señala el Ministerio Público Fiscal, no se encuentra sola en situación de desamparo, ya que conviven junto a los padres del condenado en el mismo domicilio familiar ubicado en la localidad de Bernardo de Irigoyen, de acuerdo a lo que refleja el sitio Ahora.com de la capital entrerriana Junto a Seles, de 23 años, fueron sentenciados Alexis Da Silva (27), a una pena de seis años y dos meses de prisión, y Lucas Claudio Da Silva (22) a una condena de cuatro años y dos meses de cárcel. El trío se encuentra alojado en una prisión federal de la citada provincia. El hecho ocurrió el 27 de diciembre de 2022, cuando personal de la Policía de Entre Ríos realizó un control vehicular en el kilómetro 341 de la Autovía General Artigas, en Federación. Allí detuvieron la marcha de un VW Saveiro, que era conducido por Da Silva, quien estaba acompañado por su hermano Lucas. Ambos oriundos de Bernardo de Irigoyen. Un can entrenado para buscar drogas marcó el paragolpes trasero de la camioneta. Así descubrieron 7,343 kilogramos de éxtasis (pastillas) y polvo de MDMA. Posteriormente, las pericias sobre el celular de Da Silva posibilitaron identificar a Seles, también de Bernardo de Irigoyen, inicialmente acusado de actuar como "puntero" o "campana". En su alegado, el fiscal Juan José Candioti acusó a los misioneros de transporte organizado de estupefacientes e hizo hincapié en el daño que genera el éxtasis como sustancia letal. Para la fiscalía, Seles fue el ideólogo del tráfico de sustancias sintéticas y por ello recibió la mayor pena. La defensa a cargo del abogado obereño David Rodrigo Mousquere solicitó la prisión domiciliaria de Seles al considerar encontrarse reunidas las condiciones para hacer lugar por ser padre de un niño menor de 5 años. Además, Seles solicitó el traslado definitivo a la Colonia Penal de Candelaria, con motivo de estar más cerca de su grupo "familiar de origen", mencionando a su padre y hermanos, quienes residen en la fronteriza Irigoyen, unos 200 kilómetros de dicho establecimiento carcelario.
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