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» Diario Cordoba
Fecha: 28/11/2024 16:03
Nestlé es una empresa centenaria que ha marcado a generaciones en España. La compañía refuerza ahora su compromiso con la sostenibilidad implicando a las granjas que le proveen de leche. El plan, en marcha desde 2021, ha evitado ya la emisión de 43.600 toneladas de CO 2 equivalente. La clave está en un enfoque integral que involucra a los ganaderos y sus explotaciones y que combina bienestar animal, cultivos avanzados, alimentación inteligente e instalaciones y procesos más limpios. Juan José Fraga, ganadero y propietario de las explotaciones Narxosé y Casa Barbeiro situadas en Galicia - Foto: Nestlé Marcos Baeza 29 noviembre, 2024 ¿Sabías que Nestlé lleva en España más de un siglo? Nada menos que 119 años, porque puso en marcha su primera fábrica en 1905 en Cantabria. Y, desde entonces, ha llovido y tronado y el mundo se ha transformado. Pero la marca se ha mantenido siempre como una de esas firmas conocidas por todos, que ha convencido a varias generaciones y forma ya parte de la memoria colectiva. ¿Quién no conoce, acaso, la Leche Condensada La Lechera? Una de las claves de que Nestlé se haya mantenido como una referencia a lo largo de las décadas está en que ha sabido evolucionar con España, adaptándose junto con la industria y la sociedad a las diferentes épocas y contextos que ha tocado vivir. Y el último ejemplo es su apuesta por la sostenibilidad, que alcanza ahora al origen de su cadena de suministro, las granjas que le proveen de leche. Juan José Fraga, ganadero y propietario de las explotaciones Narxosé y Casa Barbeiro (ambas ubicadas en Galicia), indica que ha “apostado por este tipo de granja sostenible porque aporta beneficios competitivos, económicos y medioambientales. Hemos integrado placas solares, agricultura regenerativa y un aditivo en la alimentación del ganado que reduce las emisiones de metano. Y con los nuevos equipos de refrigeración instalados [para el bienestar de las vacas] ya no notamos la bajada de rendimiento que se producía antes con el calor del verano”. En colaboración con Fundación Global Nature, Nestlé lleva acometiendo desde 2021 un plan de reducción de emisiones que abarca sus fábricas y sus productos, pero, también, a los proveedores de leche y sus instalaciones. Y tras haber invertido 2,5 millones de euros y de trabajar codo con codo con los ganaderos, los resultados son meritorios: se han ahorrado 43.600 toneladas de emisiones de CO 2 equivalente. La compañía colabora con granjas en Asturias, Cantabria y Galicia. El cuidado personalizado del terreno, tanto de pasto como de cultivo, permite mejorar la calidad de la alimentación del ganado, su bienestar y producción - Foto: Nestlé Eduardo Fernández, experto en desarrollo agrícola de Nestlé España, señala que “seguimos dando pasos en nuestro compromiso de avanzar hacia una alimentación sostenible. Gracias a la colaboración desarrollada con Fundación Global Nature y, especialmente, a la implicación y profesionalidad de los ganaderos que nos proveen de leche, Nestlé continúa trabajando en su camino por reducir la huella de carbono generada en la elaboración de nuestros productos”. El plan tiene un enfoque integral, y abarca desde la alimentación y el bienestar de los animales hasta la eficiencia de las instalaciones y la eficacia de los procesos. La mayor sostenibilidad se traduce en mejores rendimientos y producción y, por tanto, en ingresos superiores, y el círculo virtuoso se refuerza con las primas que Nestlé ofrece a los proveedores que acrediten logros, y que se materializan en incentivos económicos al precio de compra de la leche: es decir, los ganaderos ganarán más si producen leche más sostenible. El bienestar de los animales Nestlé también trabaja para potenciar el bienestar de los animales, un concepto que se aborda cuidando el terreno, la alimentación y las condiciones ambientales. El terreno, tanto los campos de pasto como los de cultivo (donde crece su comida), se analiza para valorar su composición y características. De esta forma, se pueden desarrollar planes personalizados de fertilización para cada explotación y abonar con mayor eficiencia, eliminando por ejemplo el uso de productos que ese tipo de suelo en concreto no necesita. La instalación de equipos de climatización en las granjas mejora el confort térmico de los animales, tanto en verano como en invierno, contribuyendo a su bienestar y a la máxima producción. Y la alimentación, por su parte, se cuida desde los cultivos, como se citaba, que se benefician por su parte de la estrategia de fertilización a medida, rindiendo más y proporcionando una comida más saludable a los animales. Cada vaca produce de media unos 200 gramos de metano al día, el equivalente a 5 kilos de dióxido de carbono - Foto: Nestlé Un 40% menos metano Las flatulencias del ganado suponen una de las mayores fuentes de emisiones en una instalación ganadera. Según la FAO, la división de alimentación y agricultura de Naciones Unidas, una vaca produce de media unos 200 gramos de metano al día, el equivalente a 5 kilos de dióxido de carbono. Para mejorar estas cifras, Nestlé está introduciendo un suplemento especial en las raciones de comida de los animales que consigue reducir entre un 30% y un 40% el metano que expulsan las vacas en su proceso de digestión. Y, gracias a esta medida, más de 8.000 reses de unas 92 granjas, que proporcionan un volumen de 91.000 toneladas de leche, ya han empezado a recibir dicho aditivo. Así, desde que se empezara a aplicar esta solución en 2023, estas granjas han conseguido reducir en 10.500 toneladas las emisiones de CO 2 equivalente emitidas por el ganado. Esfuerzo compartido Para agradecer el esfuerzo realizado por los granjeros que colaboran con Nestlé en la implementación de medidas más sostenibles en sus explotaciones, la compañía ya retribuye a más de 80 granjas con una prima económica sobre el precio de la leche: se concedió a 85 de las 177 instalaciones el pasado año 2023. Jordi Domingo, responsable del departamento de Agricultura Sostenible de Fundación Global Nature, opina que “el trabajo realizado con los ganaderos demuestra que nuestro sistema alimentario tiene un margen muy relevante para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero”. Esta prima consiste en comprar a precios superiores cada litro de leche si el proveedor acredita una producción sostenible. “Nestlé apuesta por la sostenibilidad tanto como nosotros, y con este sistema nos incentiva para seguir introduciendo mejoras”, comenta el ganadero Juan José Fraga. Electricidad renovable Para empezar, en un buen número de explotaciones ganaderas se han instalado placas solares y otros sistemas dirigidos a aprovechar la energía renovable, reduciendo así la demanda de electricidad convencional o no verde. Asimismo, y como se citaba con anterioridad, se analiza el suelo y se desarrollan planes específicos para cada granja, otra iniciativa que optimiza los recursos y la producción. Y muchas de las instalaciones han mejorado sus contenedores de purines (un subproducto que se reutiliza para abono y alimentación) para acelerar la descomposición orgánica y sacarle mayor partido. Casi 40 granjas proveedoras han instalado ya equipos de placas fotovoltaicas para obtener electricidad verde - Foto: Nestlé En total, más de 90 granjas han establecido diferentes medidas de reducción de emisiones y mejora del bienestar animal: 38 ya cuentan con placas solares, mientras que 25 han llevado a cabo la remodelación de las fosas donde se almacenan los purines. Además, 55 explotaciones han implementado medidas de bienestar animal centradas en la mejora de la climatización de los establos, instalando ventiladores, techos aislantes y humidificadores. El primer producto que fabricó Nestlé en la fábrica cántabra de La Penilla de Cayón fue la Harina Lacteada Nestlé. Poco después, se empezó a producir la popular Leche Condensada La Lechera, que sigue vendiéndose hoy. En la actualidad, la compañía cuenta con 10 centros de producción distribuidos en 5 Comunidades Autónomas.
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