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    Gualeguay » Debate Pregon

    Fecha: 17/11/2024 19:10

    Telémaco Susini cursó sus estudios de medicina en la Universidad de Buenos Aires. Durante el transcurso de sus estudios sintió una inclinación permanente hacia todo el conocimiento de la anatomía humana, más precisamente de las estructuras de los órganos y sus enfermedades, es decir, la anatomopatología. Así, su tesis doctoral “Contribución al estudio del empacho” fue el comienzo de una reconocida y fructífera carrera académica y docente. Luego de obtener el doctorado en medicina en el año 1879, comenzó a trabajar en el Lazareto San Roque, de la ciudad de Buenos Aires. En 1883, con la transformación del lazareto en hospital, ascendió a la posición de director durante el transcurso de la epidemia de viruela. Durante estos años, también fue director del Consultorio de Enfermedades de la Piel y Venéreas. Su formación en el campo de la bacteriología se dio en el contexto de una beca de estudios que se extendió por tres años (1884- 1886), donde trabajó en prestigiosos institutos de Europa. Estudió con Pasteur en Francia y fue discípulo de Koch en Alemania, ambos considerados padres de la microbiología. En Berlín tomó lecciones de anatomía patológica con Rudolf Virchow, consolidando de esta manera su carrera científica. La capacidad productiva del Dr. Telémaco Susini quedó plasmada en su primera conferencia recién llegado de Europa, en junio de 1886, cuando disertó sobre la figura de Pasteur y sus vacunas antirrábicas y contra el carbunclo. Dr. Telémaco Susini junto a su esposa Enriqueta Laurencena Posteriormente, durante la epidemia de cólera, se utilizaron las vacunas traídas por Susini desde el laboratorio bacteriológico de su mentor, Robert Koch, quien el año anterior había dado cuenta de su experiencia en la epidemia desatada en India, en un curso que duró cuatro meses y que encontró a aquel como uno de sus privilegiados alumnos. Desde su regreso, Susini mostró disposición para liderar las investigaciones microbiológicas en nuestro país, especialmente desde el mes de noviembre de 1886 cuando fue designado director del Laboratorio Bacteriológico de la Asistencia Pública, por ese entonces dirigida por el Dr. José María Ramos Mejía. En 1887 fue reconocido como catedrático al ser nombrado titular de “anatomía patológica”, siendo la cátedra de un muy joven Susini la primera de esta especialidad en la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires, donde también fundó un instituto que hoy lleva su nombre y en el cual se desempeñaron sus discípulos: Carlos Malbrán, Horacio Piñero, Fernando Ruíz, José Arce, Ángel Roffo, Joaquín Llambías, Domingo Cortínez, Dámaso Sánchez Negrete, Gregorio Aráoz Alfaro, Antonio Gandolfo, Julio Méndez, José Badía, Juan Carlos Delfino, Emilio Loudet, Joaquín Zabala (veterinario), entre muchos otros, quienes también tuvieron carreras destacadas, al punto que muchos hospitales llevan sus nombres. Entre los años 1896-1899, el Dr. Telémaco Susini fue designado Director de la Administración Sanitaria y Asistencia Pública (ASyAP), un nuevo organismo que absorbió a la antigua oficina de Asistencia Pública, posición desde la que mostró gran énfasis en la investigación de las enfermedades infecciosas y venéreas, así como en la higiene laboral para evitar el contagio de los trabajadores en los incipientes talleres y plantas industriales. En todo momento se interesó por señalar el valor social de la medicina, tanto fue así que en el primer mes como director de la ASyAP estableció un reglamento llamado servicio médico de emergencias, hoy conocido como SAME. En ese entonces, las “ambulancias” eran carros tirados por caballos. Un fragmento de ese reglamento señalaba: “se hospitalizará con máxima prioridad aquellos que vivan en la indigencia o que requieran de cuidados especiales”. El Profesor Telémaco Susini alentó la participación de los estudiantes en la vida académica y política. En su última clase al frente de la cátedra, en el año 1917, dijo: “Es menester también que el pueblo y especialmente, la juventud, sean dignos de sí mismos y de las circunstancias; que tomen el lugar que les corresponde, inspirándose en un sentimiento argentino, patriótico, justo y democrático. Así es como yo amo a la juventud que se desarrolla sustentada por esos sentimientos que son ideales de humanidad.” Su prestigio académico fue reconocido por el presidente Hipólito Yrigoyen, quien por pedido de los estudiantes que lideraron la Reforma Universitaria en 1918, en agosto de ese año fue designado interventor de la Universidad Nacional de Córdoba, cargo al que debió renunciar por la implacable oposición de los sectores conservadores que al oír en su primer discurso, observaron que el Dr. Susini se había posicionado fuertemente del lado del “manifiesto liminar” presentado por el alumnado reformista. Este suceso fue determinante para la suerte de la histórica reforma, ya que alentó a los estudiantes a endurecer sus posiciones e impedir que se consumara la elección del rector Nores, quien sostendría la situación tal como estaba hasta entonces. Dr. Telémaco Susini y de pie su hijo mayor Enrique Telémaco Gualeguay en su vida El Dr. Télémaco Susini estuvo comprometido con la ciudad de Gualeguay y su hospital. Siendo amigo personal del arquitecto Juan Buschiazzo, con quien había llevado adelante la obra que transformó el viejo Lazareto San Roque en un moderno hospital público (el actual el Hospital Ramos Mejía de la CABA), le pidió que hiciera de forma gratuita el proyecto de obra del Hospital San Antonio. Así lo reflejó la prensa local al cumplirse 120 años de la inauguración de Hospital de Gualeguay. En paralelo a todo lo logrado durante su carrera profesional, estaba su vida personal. Establecido en Gualeguay, el 22 de marzo de 1890 el Dr. Susini se casó con Enriqueta Laurencena, con quien tuvo once hijos; el mayor de ellos, Enrique Telémaco nacido en esta ciudad el 31 de enero de 1891, el cual es el padre de la radiodifusión argentina, integrante de los llamados “Locos de la azotea” (Enrique T. Susini, César Guerrico, Miguel Mujica y Luis Romero Carranza), por haber realizado el 27 de agosto de 1920 la primera transmisión de radio desde los techos del Teatro Coliseo de Buenos Aires. En el año 1902, el Dr. Telémaco Susini adquirió una de las estancias más antiguas de la provincia, ubicada sobre las costas del arroyo Jacinta y el río Gualeguay12, a la que bautizó “La Enriqueta” en honor a su esposa, y, fue este campo también una extensión del laboratorio donde se desarrollaron muchas de sus investigaciones científicas. La estancia “La Enriqueta” se encuentra emplazada equidistante entre las ciudades de Rosario del Tala y Gualeguay, por el antiguo Camino Real. Fue propiedad de Pablo José de Ezeyza y Barragán, uno de los fundadores de la ciudad de Gualeguay en el año 1783. Siendo una verdadera fortificación, ha servido como parque de armas del General Francisco Ramírez y de su hermano José Ricardo López Jordán, desde donde partieron al encuentro con las tropas de José Gervasio de Artigas. ---------------------------------------------------------------------------------------------------- El Debate Pregón agradece al Dr. Fernando Susini y al Ing. Agr. Jorge Susini, bisnieto y nieto respectivamente del Dr. Telémaco Susini, por acercarnos la información y fotos que nos permitieron esta publicación. ---------------------------------------------------------------------------------------------------------

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