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» Corrienteshoy
Fecha: 06/11/2024 00:41
De mal en peor Newell’s no reacciona, si bien esta noche salió con otra actitud, tomando el rol protagónico desde el vamos, volvió a equivocarse en el fondo, repitió los errores defensivos de los últimos partidos y los pagó caro. El elenco de Lunari entró en un tobogán negativo y no puede detener los malos resultados, el horizonte se hace cada vez más sombrío. Los primeros minutos del Rojinegro entusiasmaron, intentó llevarse por delante a Huracán y de hecho, tuvo una jugada de alto peligro, el cabezazo de Schott que dio en el travesaño, parecía que la noche venía a pedir de los rosarinos. Sin embargo, en la primera jugada ofensiva del rival, llegó la sorpresiva apertura del marcador, un centro al corazón del área, no llegaron ni los delanteros ni los defensores y la floja reacción del arquero Macagno, hizo que la pelota fuera al fondo del arco. Ese tanto fue una trompada a la mandíbula anímica de un equipo que se viene desmoronando en cada partido. Rápidamente llegó el segundo, el Globo aprovechó un equipo mal parado por la zona media y con dos pases, Ramírez quedó mano a mano con Macagno y puso el 2-0, que como jugaba de mal la Lepra en el fondo, parecía irremontable. El gol de Juanchón García puso un poco de esperanza, era el 1-2 que le daba algo de esperanza al hincha. Pero nada iba a cambiar, por el contrario, el bloque defensivo iba a seguir cometiendo groseros errores. Así fue como en una ráfaga de goles, Huracán se puso 4-1, un escenario lapidario para el presente futbolístico del Rojinegro. El Colo Ramírez maquilló el marcador con el 2-4 final. El elenco del parque entró en una situación compleja, porque viene jugando mal y se justifican las derrotas, pero en el tramo que jugó bien y pudo ponerse en ventaja, falló y también estuvo en desventaja, no le sale una. Ya el público no aguanta más, los pequeños focos de conflicto que hubo en el estadio, serán un llamado de atención para los dirigentes. Porque ya hace más de una década que Newell’s naufraga en el ostracismo, cambios de entrenadores, de proyectos deportivos en inferiores, las distintas dirigencias no encontraron soluciones, no convencen a su gente, que suma decepciones y frustraciones, por eso es natural que la hinchada esté harta, hay un límite. La Lepra no encuentra la salida, el barco está a la deriva y en el horizonte no se ve la luz al final del camino, un contexto preocupante, que necesita una reacción amplia, de todo el mundo Newell’s.
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