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» Diario Cordoba
Fecha: 04/11/2024 10:10
Las fuerzas de seguridad, en especial la Guardia Civil y Policía Local, han incrementado el servicio de vigilancia en las playas tras la aparición entre las cañas que la crecida de los ríos y barrancos ha depositado en la orilla de los primeros cadáveres. El primero, como adelantó Levante-EMV, en el Mareny Blau de Sueca. Desde el propio puerto de València a la playa de Tavernes, los vuelos tanto de helicópteros como de drones, así como la vigilancia a través de embarcaciones desde el mar, se multiplica en las últimas horas. A estos efectivos también se han sumado en las últimas horas equipos con perros especializados en la localización de personas. A estos trabajos de localización de posibles víctimas se une otro problema añadido como es la gran presencia de animales muertos en las playas afectadas por el depósito de cañas procedentes principalmente de las acequias de l’Horta Sud y del propio Xúquer. Cañas acumuladas en la costa. / Joan Gimeno El avanzado estado de putrefacción de algunos de estos animales que llevan ya más de cinco días muertos obliga a extremar las medidas de precaución entre aquellas personas que deciden acercarse a la playa por la posibilidad de infecciones. Es muy importante ir protegido en caso de tener que acercarse a esta zonas para evitar posibles epidemias ya que a los animales muertos hay que añadir una elevada cantidad de basuras avanzado estado de putrefacción. Las autoridades recomiendan por encima de todo que no se acuda a estas zonas y que se esté constantemente en alerta para evitar esos posibles contagios. También recuerdan que no hay que tocar nada para que los agentes que están realizando la búsqueda, así como los trabajadores municipales, pueden proceder a la retirada de dichos animales. Los vecinos de la zona del Marenyet de Cullera han mostrado su preocupación porque "son muchas las personas que buscan entre las cañas para ver si encuentran algo aprovechable. Eso lo que hace es aumentar la posibilidad de contagio al realizar unos movimientos inadecuados de las cañas, algo que también incrementa el ya de por sí fuerte olor a putrefacción". Todos coinciden que és un trabajo que deberían de realizar exclusivamente personal especializado. Fuentes del Ayuntamiento de Cullera manifiestan ser conscientes de la necesidad de tomar medidas urgentes para evitar tanto los contagios como las molestias que se están ocasionando a los vecinos con los olores procedentes de esta acumulación de cañas y basuras. A pesar de que la situación no es nueva, ya que se repite cuando hay crecidas del río, algunos vecinos de la zona del Marenyet señalan que "a pesar de que la cantidad de agua que ha bajado en esta ocasión por el río, al haber tragado el mar esa cantidad ingente de agua y suciedad, parece que una gran cantidad de cañas y basuras están llegando a otras poblaciones más al sur. A pesar de estas circunstancias la cantidad como se puede comprobar es muy grande". Las autoridades ruegan encarecidamente a la población que, en caso de aparecer algún animal muerto, se pongan rápidamente en contacto con las autoridades municipales para poder proceder a la retirada de los mismos.
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