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» Diario Cordoba
Fecha: 02/11/2024 07:07
Los últimos años han supuesto la conquistas de nuestras mesas, ensaladas y todo tipo de platos por parte del aguacate: una fruta cuya versatilidad y beneficios para la salud lo han convertido en un elemento que no puede faltar en todo tipo de dietas y de recetas. Desde las clásicas tostadas de aguacate hasta cremosos guacamoles y ensaladas frescas, está muy cotizado tanto por su sabor como por su cremosidad. Desde el punto de vista de lo nutricional el aguacate destaca por tener un alto contenido en ácidos grasos saludables como los omega-3, vitaminas esenciales como la vitamina E y minerales como el potasio, que contribuyen a mejorar la salud cardiovascular y tienen efectos antioxidantes y antiinflamatorios. Las vetas marrones en el aguacate Pero, sin embargo, cuando vamos a cortar esta fruta es fácil que nos encontremos con manchas oscuras o vetas marrones y fibrosas: algo que a muchas personas les incomoda y que despierta muchas dudas sobre su consumo. Al contrario de lo que pueda parecer, la apariencia de estas marcas en la pulpa no siempre indica que el aguacate esté en mal estado: para saber esto, si el aguacate es seguro, los expertos recomiendan evaluar su frescura observando su color, textura y aroma. Si el fruto desprende un olor fresco y no presenta signos de descomposición como moho o mal olor, puede consumirse sin problemas. Cuando la pulpa tiene un tono verde vivo y una textura suave, es un buen indicio de que la fruta se encuentra en buen estado. En cambio, si la pulpa está completamente oscura o presenta un aspecto viscoso, se recomienda desecharla. Estas vetas marrones y fibrosas que a veces aparecen cerca del hueso en el aguacate pueden ser sospechosas, pero no necesariamente indican que el fruto esté podrido: de acuerdo con un estudio del Instituto de Investigación en Horticultura y Alimentación de Nueva Zelanda estas hebras marrones son el resultado de un fenómeno conocido como lixiviación vascular que es causado por el frío y afecta las vesículas internas del fruto. Según el mismo estudio el proceso de lixiviación es en realidad una respuesta del aguacate al “estrés ambiental” que enfrenta en su entorno de almacenamiento. Otro informe de Tandfonline confirma a su vez que estas vetas “no son un tipo de podredumbre, sino una respuesta de la fruta al estrés ambiental”, lo cual hace al aguacate “especialmente sensible a la oxidación”. Aunque la presencia de estas fibras puede hacer que el sabor sea más amargo o áspero, se confirma que no comprometen la seguridad del fruto para su consumo si el resto de la pulpa se encuentra en buen estado.
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