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» Diario Cordoba
Fecha: 27/10/2024 04:56
En la jornada sobre la gestión de zonas arboladas urbanas celebrada el 19 de octubre y organizada por la Asociación EnArbolando Córdoba, se concluyó que los árboles previstos por el Ayuntamiento son insuficientes para las necesidades de una ciudad ya señalada por la NASA como inhabitable para el 2050. Se han expuesto diversos temas relacionados con soluciones basadas en la naturaleza que se resumen a continuación. Los estudios científicos señalan que estamos ante un crisis climática provocada por primera vez por el Homo sapiens, caracterizada por la velocidad de su implantación en un contexto de superpoblación. Puede afectar a millones de personas e incrementar la mortalidad. Las zonas verdes se consideran infraestructuras básicas para luchar contra esta crisis. Sus ubicaciones actuales crean zonas más confortables en su entorno y bolsas sin refugios climáticos que afectan a capas más desfavorecidas. En los últimos años se están sobrepasando las mejores expectativas señaladas por los modelos matemáticos. Los árboles urbanos y vegetación es una manera de mitigar la temperatura de las islas de calor, en un proceso de africanización climática, para hacer una vida más agradable. En la ciudad de Córdoba, las zonas verdes con mayor biomasa y riqueza de especies son determinantes para el control de reducción de la temperatura en su entorno. La identidad de especies arbóreas que se plantan juega un papel clave en determinar la capacidad de absorción de carbono de la atmósfera. Existen trade-offs, situación que implica la pérdida de una cosa y la ganancia de otra, entre servicios ecosistémicos de regulación (sumidero de carbono- regulación de temperatura, control de alergias). Los alcorques vivos son un trozo de la naturaleza en el interior de la ciudad. Son posibles múltiples composiciones de semillas de flores silvestres autóctonas, diseñadas para regenerar parterres, alcorques, y pequeños espacios urbanos. Las plantas autóctonas están adaptadas a las condiciones locales, lo que las hace más resistentes a enfermedades y promueven la resiliencia ambiental. Es posible naturalizar mediante la implantación de praderas silvestres que conforman un ecosistema en sí mismo, brindan una estética natural y atractiva, mejoran la calidad visual de los entornos urbanos y crean espacios más agradables para la comunidad. Los alcorques vivos y las praderas naturales son «lenguas de naturaleza» en el medio urbano y ofrecen oportunidades de concienciación y educativas. El Pacto por la reforestación de la ciudad de Córdoba señala una necesidad de plantar diez mil árboles anuales en los próximos dieciséis años, cifra que se considera aún corta si se atienden a distintos estándares europeos. Es necesario actuar con urgencia para pasar del 11% de superficie cubierta de sombra al 30%, como recomiendan diversos estudios. El Plan del Arbolado de Córdoba debe precisar estos aspectos. Este factor, «la gestión de las sombras», tiene que tener un carácter prioritario en el tratamiento del arbolado de la ciudad. Existe una ordenanza para aplicar en las zonas verdes desde el año 1997. Está siendo olvidada desde hace años por los servicios municipales, en el diseño urbano, en las diversas obras que se realizan y en la gestión de las zonas arboladas de la ciudad. Aunque tiene 27 años es perfectamente aplicable y resuelve un importante número de problemas actuales relacionados con las zonas verdes. La publicación Estándar Europeo de Poda de Árboles es un documento técnico de gran valor para aplicar en la gestión de las zonas verdes de la ciudad de Córdoba, en tanto se dota de un documento que regule estas actividades. Se constata que muchas de las acciones que se realizan en la ciudad no siguen este manual, principalmente en la fecha de realización, porcentaje a conservar de área foliar y diámetros de corte. El proyecto 'Un nacimiento, un árbol' fomenta la identidad, vinculación y arraigo de las personas con su territorio, su medio natural y las zonas verdes de ésta. La plantación de árboles provoca beneficios en la ciudad y colabora en la mitigación del cambio climático, la captura de CO2 y la bajada de la temperatura en su entorno próximo. Los árboles son fuentes de inspiración para muchas actividades humanas y en especial las relacionadas con la creación cultural y el arte como así se ha demostrado a lo largo de la historia del Homo sapiens. Existe una obligación moral de no permitir la pérdida de más árboles, sobre todo en el ambiente mediterráneo donde se espera mayor rigor climático en los próximos años. Donde hay árboles hay más posibilidades de que haya vida, y se considera como un elemento de supervivencia de nuestra sociedad. La Asociación EnArbolando Córdoba ha instado al Ayuntamiento de Córdoba al cumplimiento de la Ordenanza Municipal de Protección del Medio Ambiente Urbano en relación a las zonas verdes y al seguimiento del Estándar Europeo de Poda de Árboles con la inclusión de la gestión de las sombras. *Biólogo Suscríbete para seguir leyendo
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