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» Diario Cordoba
Fecha: 07/10/2024 12:09
Al menos cuatro de los seis empresarios condenados en firme por prostitución de menores en Murcia no pisarán la cárcel. Pese a la postura de la Fiscalía, al solicitar que algunos de los penados sí han de entrar a la cárcel, con la ley en la mano se dan las condiciones para que estos hombres, entre ellos el que fue presidente de la patronal de Cartagena, no lleguen a entrar a prisión. Cuatro de ellos pasaron este lunes por la sala 2 del Palacio de Justicia de Murcia y salieron de ahí con las penas privatiavs de libertad suspendidas. Este martes es el turno de los dos restantes. Los abogados defensores de estos individuos consideran que el Ministerio Público ha incumplido el acuerdo al que llegaron por escrito, el cual, afirman, incluía la suspensión de la pena privativa de libertad. Aunque, de momento, todos los hombres que van pasando por la sala 2 del Palacio de Justicia de Murcia salen de ahí con las condenas suspendidas. Juan Castejón y otros tres empresarios condenados no entrarán en prisión. La 'mami' pide perdón La Audiencia Provincial fijaba para estos días 7 y 8 de octubre las vistillas para ver si los condenados en firme entraban o no a la penitenciaría. La primera en entrar a la sala, la 'mami' Ruth Karina, pidió perdón. Comentó que es temporera, que ahora mismo está en paro y que mantiene a su familia en Bolivia. La magistrada Concha Roig le explicó que, de llegar a entrar en el penal, no estará en prisión más de seis años (tiene condenas que suman 16). “Su caso es excepcional y lo tendremos que resolver mañana (por el martes) o pasado (por el miércoles)”, apunta el magistrado presidente, Álvaro Penalva. Acto seguido, un receso de unos minutos. La primera en entrar a la sala, la 'mami' Ruth Karina, pidió perdón. / JUAN CARLOS CAVAL Una vez sabido que la Fiscalía reclama que sí entren a la cárcel (“el sistema no puede volver a fallar a estas chicas”, subrayó el teniente fiscal, José Francisco Sánchez Lucerga), los abogados se sentaban junto a sus clientes en el pasillo del Palacio de Justicia y les sugerían qué decir para que el tribunal sea indulgente con ellos. Por ejemplo, a uno que ha cumplido los 80 ya le aconsejaba que se amparase en su avanzada edad. Cabe recordar que, junto a Juan Castejón Ardid, expresidente y exvicepresidente de la Confederación de Organizaciones Empresariales de Cartagena (COEC), exvicepresidente de la Confederación Empresarial de la Región de Murcia (CROEM) y empresario (el más mediático de los encausados), fueron condenados seis hombres más: José Antonio Arce López (70 años, Beniaján), Juan Peque Álvarez (72 años, León), José Jara Albero (68 años, Alicante), Antonio Giménez Pelegrín (81 años, Lorca), Antonio Morales Nicolás (92 años, Murcia) y Juan Martínez Fernández (73, Murcia). "Yo no estoy aquí como institución para asignar responsabilidades morales: cada uno asume con su conciencia", dice Sánchez Lucerga Las cuatro condenadas que actuaban como captadoras, facilitadoras e instigadoras de esta trama se llaman Yesenia Mercedes Balladares Cusme, Nelly Paola Céspedes Pedriel, Ruth Karina Dorado (la primera en comparecer en la vista de este lunes) Toledo y Manuela Pérez Poveda. Además, a Martín Galo Dorado Toledo (uno de los 'taxistas', al que el fiscal quiere en prisión y ya ha anunciado que recurrirá, porque la Audiencia le ha suspendido la condena) y Walter Giovani Dominguez Melgar se les condenó como cooperadores necesarios. Después de Karina, este lunes Yesenia Mercedes fue llamada en segundo lugar: sin respuesta, no apareció, ni su defensa. Tampoco Walter Giovani (está trabajando fuera, explica su abogado, que sí está presente, se le cita para el lunes 14 de octubre). Desfilan los empresarios Llamaron entonces al primero de los empresarios, José Jara Albero. Tomó la palabra su defensor y se quejó que “los acuerdos con Fiscalía siempre se han cumplido y se ha desdicho, lo acordado no se pretende cumplir”. Aseguró que su cliente, el cual admitió haber pagado por sexo con menores, tiene “totalmente inmaculada su hoja penal”. En este caso, el teniente fiscal Sánchez Lucerga apuntó que José Jara sí puede librarse de la cárcel. La razón: ha sido condenado solo por un delito. “Yo no estoy aquí como institución para asignar responsabilidades morales: cada uno asume con su conciencia”, comentó el teniente fiscal, que se muestra favorable a que Jara no llegue a pisar un penal con la condición de que “sea consciente de lo que hizo hace más de diez años”. José Jara Albero, ante la Audiencia / Redacción “Yo no soy culpable, pero, si dices que no, te van a condenar. Lo juro por Dios y por mis padres. Soy una persona normal, soy jubilado, aquí estaba metido sin comérmelo ni bebérmelo”, manifestó Jara, condenado a seis meses de prisión, la cual se le suspendía este mismo lunes con la condición de que no delinca durante dos años, no se acerque a su víctima y asista a un curso de educación sexual. Lo aceptó y salió por la puerta. “Populismo punitivo” Turno del más mediático, Juan Castejón. Si el mes pasado salía a cara descubierta y casi sonriente, este lunes cubría su rostro con una mascarilla que el juez le pedía que se quitase. Su abogado, Caballero Salinas, solicitó que su cliente no pise la cárcel y aseguró que, en el pacto que firmaron con la Fiscalía, ya constaba que no entrarían en prisión y “ese es el motivo por el que este señor asumió la sentencia, porque se había pactado”. “Y antes del juicio oral, el señor Castejón había ingresado los 10.000 euros de la responsabilidad civil”, resaltó. Personas esperan en la puerta del Palacio de Justicia de Murcia la llegada de los condenados por prostituir a menores. / JUAN CARLOS CAVAL Hay “populismo punitivo”, opinó Caballero Salinas. “Ha sido ese movimiento social posterior el que ha hecho que cambie ese sentir, en principio tan optimista”. Juan Castejón “a los 10 años ha tenido que sumar estos días de calvario de la gente que solicita que se haga Justicia, como si esto fuera una ferretería: esto es un tribunal de Justicia”, significó el abogado. “Ni una multa administrativa” tenía Castejón, ahora septuagenario, recalcó su abogado. “Su comportamiento durante 10 años demostraría que ese fin de reinserción social sería innecesario”, aunque está dispuesto a hacer un curso de educación sexual. “Y la multa está dispuesto a pagarla mañana o pasado, cuando tenga el número de cuenta”, precisó Caballero Salinas. Sánchez Lucerga contestó al penalista que, independientemente del clamor ciudadano, dejar en suspenso la pena privativa de libertad “es una suspensión que es facultad del tribunal, no se puede aplicar automáticamente”. En el caso de Castejón, “me opongo a la suspensión por los múltiples delitos que comete”, sentenció el teniente fiscal. “Y este no es un cambio de criterio: es el criterio de la Fiscalía”. Un ictus y un marcapasos “Confío en mi abogado”, dijo Castejón. “Tiene usted 74 años, necesitamos saber que es una persona integrada en la sociedad”, apuntó la magistrada Roig. “Soy empresario, tengo varias empresas y las presido todavía. Estoy reinsertado”. Además “tuve un ictus y me operaron del corazón, me tuvieron que poner dos válvulas y me hicieron más cosas”. “Llevo un marcapasos, sin él ni podría vivir”, prosiguió. La magistrada Roig comunicó a Castejón que no entraría en prisión con condiciones: por ejemplo, no acercarse a las víctimas durante 4 años. La Fiscalía anuncia un recurso, por lo que no se declara firme el pronunciamiento. Turno de José Antonio Arce. Tampoco entrará en prisión (fue condenado a cinco meses). El tribunal le comunicó que se le perdonaba provisionalmente la pena durante dos años, con la condición de no cometer delito alguno durante este tiempo y no acercarse a su víctima. Antonio Giménez Pelegrín (lorquino de 81 años) tampoco pisará la cárcel. Este martes, los dos que faltan Este martes están citados los dos empresarios que faltan. Juan Peque Álvarez, de 72 años, condenado por dos delitos de prostitución de menores, a 10 meses de prisión, multa de 1.080 euros y el pago de una indemnización de 1.000 euros, además de a un año de libertad vigilada; y Juan Martínez Fernández, de 73 años, condenado por un delito de prostitución de menores a 5 meses de prisión, multa de 600 euros y el pago de una indemnización de 1.000 euros. Antes de que fuesen desfilando por la sala los condenados, el teniente fiscal de la Región aseveró que "el sistema no puede volver a defraudar a esas chicas que eran menores”. José Francisco Sánchez Lucerga trasladó lo que el fiscal superior, José Luis Díaz Manzanera, determinó tras las juntas que tuvieron lugar tras el escándalo que supuso para la opinión pública la posibilidad de que los condenados no entrasen al penal. Citó el Antiguo Testamento y a los clásicos para argumentar, con calma, su parecer. El más esperado. Y recordó que la suspensión de la pena de cárcel “al no ser un derecho, no se concede automáticamente”. “Hay que ir caso a caso, cada reo, cada condenado”, destacó. “A diferencia de lo que sucedía en la legislación anterior, en el año 2015 hubo una modificación que incluía una excepcionalidad: concretamente, en el artículo 80 podrá acordarse la suspensión de penas… habla de penas, cada pena”. “La única excepcionalidad es el lapso temporal desde que se cometieron los hechos”, sentenció Sánchez Lucerga. “La excepcionalidad ya ha sido tenida en cuenta en la rebaja de las penas”, remarcó. De momento, se muestra contrario a que Juan Castejón y Martín Galo Dorado se libren de pisar un penal: recurrirá al respecto. Clamor social Al grito de “violador”, “asqueroso”, “viejo verde” e incluso “asesino” eran recibidos por decenas de personas a las puertas del Palacio de Justicia de Murcia los hombres que admitieron haber pagado por tener sexo con menores. "Justicia patriarcal, impunidad total", coreaban las personas que se habían dado cita en la puerta. No tantas como el domingo, al ser este lunes día laboral. En sus carteles, cartulinas de colores, se leía: ‘No + impunidad’ y ‘eran menores’.
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