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» Diariopinion
Fecha: 16/09/2024 10:42
La oposición vació el recinto de Diputados durante la presentación presidencial del Presupuesto 2025: solo 120 de 257 diputados se sentaron en sus bancas en la noche del domingo, nueve menos que el quorum para abrir cualquier debate. Tras la disertación de poco más de 40 minutos de Javier Milei, acompañado por una tropa de militantes que festejaron cada uno de sus giros discursivos, los legisladores de la mayor parte de los espacio políticos calificaron su discurso de "político", para marcar la orfandad de cifras y proyecciones que hacen a cualquier presupuesto, y exigieron precisiones a la administración libertaria. Como si se tratara de una progresión hacia el disgusto, el recinto presentó una variación de su temperatura entre su ala derecha, donde se ubican los libertarios, hacia la izquierda, donde se sientan los kirchneristas. Eufóricos, los diputados oficialistas aplaudieron, gritaron y saludaron armando corazones con sus dedos a la enfervorecida militancia presente. Cerca de ellos, los legisladores de Pro mostraron signos de acompañamiento y muchos de ellos, como el diputado Damián Arabia, no dudaron en celebrar las palabras del Presidente. Otros de sus colegas fueron más cautos y parecieron desconcertados cuando Milei enfatizó con dureza a quienes lo critican por falta de gestión, en una clara alusión a los cuestionamientos del expresidente Mauricio Macri. Pese a esto, el jefe de la bancada Pro, Cristian Ritondo, agradeció en sus redes al Presidente por haberle regalado el documento con su discurso. Una buena parte del radicalismo decidió ausentarse para "no prestarse a una burla". Los presentes, entre los que se encontraban las autoridades del bloque y parte de los conversos, se mantuvieron a raya. Sin desbordes, escucharon las palabras del primer mandatario y evitaron los aplausos. Encuentro Federal, la Coalición Cívica y los referentes de Innovación Federal enviaron una "guardia mínima" que escuchó enmudecida a Milei. Según pudo saber este medio, Miguel Pichetto abandonó el Palacio Legislativo hecho una furia y evitó hacer declaraciones a la prensa. "Fue una vergüenza, no dio ninguna precisión presupuestaria", indicaron cerca del exsenador. Del kirchnerismo eran una veintena, principalmente los miembros de la Comisión de Presupuesto, entre los que se contaba a Germán Martínez. Incómodos y retorciéndose en sus bancas, los diputados de Unión por la Patria miraron más a sus celulares que al frente. No hubo ningún representante de la Izquierda. "Fue una presentación anómala, diferente a las que se conoce y por eso fue a trazo grueso, sin las precisiones que suelen tener las presentaciones presupuestarias por el ministro de Economía", consideró en diálogo con LA NACION el jefe de la UCR, Rodrigo de Loredo. "No profundizó en las aristas presupuestarias ni en las variables macro ni micro", agregó. Además, definió como un "acierto" la nitidez para comunicar que "no hay negociación" sobre el equilibrio fiscal. Su colega de bloque, Karina Banfi, fue menos diplomática al analizar la presentación del Presidente. "Lo que escuchamos fue un discurso político", dijo, mientras subrayó que "espera" que asistan todos los ministros al Congreso para explicar los detalles. "Sabemos muy bien que el déficit tiene que ser cero, pero ¿dónde van a estar las prioridades del presupuesto?", inquirió. Desde el radicalismo más duro, Pablo Juliano calificó el mensaje como "pobre, reiterativo y agotado". Maximiliano Ferraro, de la Coalición Cívica, señaló sobre el discurso de Milei: "Ni siquiera mencionó a los jubilados, la educación, el campo o las pymes, las clases medias y cómo reducir el gasto tributario eliminando regímenes fiscales de privilegio que favorecen a empresarios amigos". Y remató: "Sólo buscó seguir polarizando en una puesta en escena similar a la de tiempos del kirchnerismo". En la misma línea, el diputado de Encuentro Federal, Oscar Agost Carreño, consideró que el Presidente "se centró más en una visión personal de su gestión que en una explicación detallada sobre el contenido real del proyecto". "A partir de mañana, comenzaremos a trabajar en las comisiones, y esperamos que el ministro de Economía comparezca para intercambiar ideas en un diálogo constructivo", anticipó. Retomando su discurso, indicó que, al citar a Cicerón [la cita, en rigor, no es tal], Milei "no reparó en que este terminó proscripto y exiliado de Roma, entre otras cosas porque sus palabras se alejaban de la realidad. Por lo tanto, es esencial considerar toda la historia para comprender la verdadera dimensión de las decisiones que se enfrentan". Por último, el líder del kirchnerismo en Diputados indicó que "esperaba más". "Me llamó mucho la atención que en un proyecto de presupuesto no se hable de crecimiento de PBI, de inflación, de la situación comercial de la argentina, del tipo de cambio promedio. La única referencia a las provincias la hizo con dos señales: 60.000 millones de dólares adicionales de ajuste", señaló. Además, Martínez chicaneó a Milei y lo comparó con el expresidente de la Alianza, Fernando de la Rúa: "Prefirió un discurso generalista, parecido a lo que presentaba la Alianza. No le voy a decir nada al Presidente, solo le dije que hable sin leer. Vi párrafos enteros que ya se habían dicho en otra oportunidad". Y explicó: "Cuando dice cero de transferencias discrecionales es cero a las cajas jubilatorias de las provincias que no transfirieron sus sistemas previsionales a la Nación, cero política alimentaria, cero Fonid, cero fondos universitarios, cero fondos para la salud".
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