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» Diario Cordoba
Fecha: 07/09/2024 08:52
La Francia revolucionaria fue la auténtica y genuina cuna del nacionalismo´ como religión laica de la contemporaneidad occidental. En la actualidad su culto, extendido ya de manera global por todo el planeta, semeja conocer en la más reciente un fervor renovado y de eco impactante. España, naturalmente, con su indeficiente atracción por lo intenso y exagerado, no permanece al margen de tan poderosa onda. Sin duda en ello radica la principal causa de que se hayan seguido con exacerbado interés los Juegos Olímpicos acabados de celebrar en el Hexágono. Numerosas plumas peninsulares entre ellas, y con la modesta medida que le es propia, la del mismo anciano cronista, fiel francófilo desde su muy lejana mocedad. Ante su sorpresa y la de incontables de sus colegas periodistas e historiadores del tiempo presente, las muy negras perspectivas con las que se atisbaban su desarrollo a lo largo de los meses iniciales del año en curso, se trocaron en alabanzas sin fin a su trayectoria en los primeros días del urente agosto del 2024. En nuestros días la fuerza del poder informativo es tan ancha como granítica, hasta resultar, en la mayor parte de las ocasiones, como aplastante y decisoria en multitud de coyunturas. Una de ellas ha sido justamente la glosada. En el espacio de una semana, los comentarios tenebristas que anticipaban su realización en los medios galos y en todos los extranjeros (entre los cuales, por supuesto, los hispanos) se trocaron en apologetas cuando no enaltecedores de su desarrollo. Dado el todopoderoso y casi consustancial patriotismo de nuestros vecinos al norte de los Pirineos, el hecho ha sido incuestionablemente llamativo, pero en manera alguna descartable. Más de dos siglos de exaltación idolátrica de la nación no se echan al desván de lo caduco e inservible en unas semanas de postración y de ánimo. Un noble sentimiento de patriotismo y un decisivo y unánime impulso de los agentes y empresas informativas de mayor calado en Francia y en el ámbito de la «Francofonía» proyectaron en plazo de horas una imagen ad integrum distanciada de la patrocinada días atrás. Indudablemente, las escuelas de Periodismo y las Facultades de Ciencias Políticas y Sociales y aún más, si cabe, las de Económicas de Europa y del resto del universo tienen ya amplia materia para el análisis urgente y el estudio insoslayable en los cursos académicos que están a punto de comenzar, con inusual expectativa en varias de sus dimensiones. *Catedrático Suscríbete para seguir leyendo
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