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» La Nacion
Fecha: 16/06/2024 02:31
Escuchar La llaman la princesa aventurera, pero también podría ser la princesa fit. Amazona profesional y amante de la vida sana y el deporte, el cambio físico que Kalina de Bulgaria (52) consiguió en el último tiempo gracias a su metódico entrenamiento con pesas –tal como contó en una entrevista con LOC– quedó en evidencia esta semana, cuando circularon imágenes del entierro, tras repatriar su cuerpo 76 años después, de Fernando I de Bulgaria, primer zar de la dinastía tras la independencia del país del Imperio otomano. Los primeros días de junio trascendió esta foto, tomada el 29 de mayo, donde se la ve junto a su marido, Kitín Muñoz, en la ceremonia fúnebre del rey Fernando I de Bulgaria en el Palacio Vrana de Sofía. Los restos de quien fuera el primer rey de Bulgaria tras cinco siglos de dominio otomano fueron repatriados para ser enterrados 76 años después de su muerte. Getty Images 1989. En la boda de su hermano, el príncipe Kyril de Bulgaria, con Rosario Nadal en la catedral de Palma de Mallorca. Getty Images 1991. Un posado en su casa, con melena corta y desmechada. Getty Images 2003. En París, acompañando a Carolina de Mónaco cuando fue nombrada Embajadora de Buena Voluntad de la Unesco. Getty Images Del brazo de su marido, el navegante y explorador “Kitín” Muñoz, y junto a su padre, Simeón de Bulgaria, último rey búlgaro, Kalina dijo presente en la cripta familiar del Palacio de Vrana, en Sofía, y su imagen enseguida se volvió viral. Pero no es la primera vez que se habla de su apariencia. Ya en 2018, su marido, cansado de las especulaciones, aclaró en ¡HOLA! que el cambio de nariz de Kalina no fue estético, sino por un delicado tema de salud. 2004. Con melena con raya al costado y ondas suaves para una fiesta en París. Getty Images 2006. Pocas royals son más camaleónicas y audaces en sus looks que Kalina, que jamás dudó en cambiar su color de pelo, renovar sus peinados e incluso raparse. Acá se la ve con turbante y maquillaje exótico, en la gala celebrada en el ChÂteau De Berg por las bodas de plata del Gran Duque Enrique y la Gran Duquesa María Teresa de Luxemburgo. Getty Images 2009. Con trenzas en la presentación del libro Moussem Tan Tan, en Madrid. Getty Images 2013. Total black y boina de inspiración marine para un paseo por Madrid. Getty Images 2014. Una versión supersport: chaqueta, pantalones de cuero, botas y anteojos con marco a contratono. Getty Images 2018. Con velo, en la misa con motivo del 25° aniversario de la muerte del conde de Barcelona, padre del rey emérito Juan Carlos, en el monasterio de San Lorenzo de El Escorial. Getty Images 2020. Junto a su marido, Kitín Muñoz, en el funeral de Pilar de Borbón, en El Escorial. Getty Images Según contó, en 1999, la princesa fue a un dentista para ponerse fundas en dos dientes, pero le perforaron por demás la base del hueso, lo que derivó en una infección y una nueva intervención. Un año más tarde, mientras lo acompañaba en una de sus expediciones en altamar, se le reprodujo la infección, avanzó y afectó parte del ojo. “Tuvimos que evacuarla de urgencia y fue operada (…). La prioridad era limpiar la infección, pero la intervención causó daños de tipo estético, que no tenían importancia en ese momento, pues lo vital era salvar el ojo y la nariz de la infección”, sostuvo. La tapa de revista ¡Hola! de esta semana. FOTO: MATÍAS SALGADO LA NACION
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