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» El Ancasti
Fecha: 27/04/2024 12:04
El oficialismo logró ayer emitir dictamen de mayoría al proyecto de Ley de Bases y quedó lista para votarse en el recinto en la sesión programada para el lunes 29 y martes 30 de abril. Para lograrlo, debieron quitar el Banco Nación de la lista de empresas a privatizar y además acotaron la reforma laboral. La Libertad Avanza cosechó 61 firmas, entre los diputados propios, los del PRO, de Innovación Federal y un sector mayoritario de la UCR y Hacemos Coalición Federal (HCF). Los últimos tres firmaron con disidencias y buscarán aplicar cambios en el recinto, como por ejemplo la reposición del impuesto al tabaco. Para reunir la mayoría, el oficialismo debió hacer nuevas concesiones a la oposición dialoguista, como quitar al Banco Nación de la lista de empresas sujetas a privatización y acotar la reforma laboral. En el plenario de las comisiones de Legislación General, Presupuesto y Hacienda, y Asuntos Constitucionales, Unión por la Patria y el Frente de Izquierda presentaron dictámenes de rechazo. Dentro de HCF los cinco diputados de la Coalición Cívica firmaron su propio dictamen de minoría, al igual que los dos socialistas santafesinos (Mónica Fein y Esteban Paulón) y Margarita Stolbizer. Santiago Santurio, presidente de la comisión de Legislación General, cabecera del debate, expresó el optimismo del oficialismo por los avances logrados. A su vez, Marcelo Llanos (LLA) calificó la Ley Bases como “sumamente importante para el futuro de la Argentina” y destacó el diálogo “fructífero” que se logró entre el oficialismo y algunos bloques de la oposición para arribar a consensos. El radical Lisandro Nieri resaltó también “la importancia de darle a un Gobierno que comienza las herramientas necesarias para gobernar”, aunque marcó algunas diferencias y observaciones. El presidente del bloque de Unión por la Patria, Germán Martínez, calificó el estado de debate actual de la ley ómnibus como un "deja vu" del proceso de discusión en los meses de enero y febrero cuando se cayó el tratamiento del primer dictamen en el recinto de la Cámara baja y opinó que ese dictamen había sido negociado “mitad en el Hotel Savoy y mitad en un departamento de Recoleta con empresarios”. En esa línea, consideró que este proyecto “es igual de dañino y perverso para la democracia argentina que el que teníamos en el mes de febrero”.
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