Contacto

×
  • +54 343 4178845

  • bcuadra@examedia.com.ar

  • Entre Ríos, Argentina

  • Temporada: lista de espera en paradores, ocupación de hasta el 90% y aluvión de reservas anticipadas, las claves del verano en Pinamar

    » La Nacion

    Fecha: 31/12/2025 17:37

    Temporada: lista de espera en paradores, ocupación de hasta el 90% y aluvión de reservas anticipadas, las claves del verano en Pinamar PINAMAR (Enviada especial).- El calor aprieta desde temprano y la arena quema apenas se pisa la playa. En Cariló y Pinamar, diciembre se despide con temperaturas altas y una escena que se repite a lo largo de la costa: familias que caminan rápido buscando la sombra de sus carpas, parejas que acomodan reposeras mirando al mar, chicos que corren sin medir el sol. De pronto, una lluvia breve y desordenada corta la postal. Algunos alcanzan a cubrirse bajo los paradores, otros levantan a las apuradas bolsos y toallas. Minutos después, el cielo se abre y el sol vuelve con más fuerza. Mamá, esta es nuestra carpa, grita un chico de unos siete años mientras sale corriendo desde la orilla, descalzo, porque la arena le quema los pies. Es el último día del año y este destino ya funciona a ritmo pleno de temporada alta. Durante diciembre, las playas del partido de Pinamar muestran un movimiento intenso de visitantes, favorecido por condiciones climáticas mayormente estables y por reservas realizadas con antelación. El escenario refuerza las proyecciones del sector turístico local, que estima para enero niveles de ocupación hotelera e inmobiliaria superiores al 90%. En Cariló, los registros ya rozan esos valores: el último fin de semana alcanzó un 88% de ocupación, mientras que Ostende llegó al 70%, cifras elevadas para esta altura del año. Desde el municipio señalaron a este medio que los números son alrededor de un 20% superiores a los de la misma época del año pasado y aclararon que no solo se mide la ocupación efectiva, sino también la demanda espontánea, que sigue siendo alta. En ese contexto, los precios vuelven a ocupar el centro de la escena. En Pinamar, los paradores trabajan con ocupación completa desde hace semanas. En El Atlántico explicaron a LA NACION que, en comparación con el año pasado, los valores registraron incrementos de alrededor del 35%. Las carpas, en enero, rondan 1.600.000 pesos por el mes completo, detallaron. Las quincenas, en tanto, se dividen con un recargo y se ubican cerca de $1,2 millones. Según señalaron, la demanda se reparte de manera pareja entre alquileres mensuales y quincenales. Está todo tomado desde octubre. Tengo listas de espera, afirmaron, y destacaron que el nivel de consultas fue inédito. Desde septiembre empezaron a preguntar. Nunca me había pasado tener que estar con la oficina abierta en agosto o septiembre, agregaron. En gastronomía y sombra, indicaron que los aumentos rondan el 30% y el 35%, respectivamente. En el parador Negroni, el movimiento también es mayor al del año pasado. Allí explicaron que los aumentos se aplicaron de manera escalonada a lo largo de los últimos meses. En septiembre, con una preventa, los incrementos estuvieron entre el 20% y el 25%; en octubre subieron algunos puntos más y en noviembre llegaron a niveles del 30% al 32%. En diciembre, sin embargo, se produjo una suba fuerte vinculada al valor del módulo que impacta en el canon que pagan los concesionarios de playa. Hace unos diez días se terminó imponiendo un incremento que está casi en el orden del 66%, señalaron. Aun así, remarcaron que el clima favoreció la actividad: Estamos con un 40% más de gente en diciembre versus diciembre en el restaurante, y en carpas también estamos por encima. El clima lo explica todo. Otros balnearios de Pinamar Norte, como Marbella, detallaron valores diarios que oscilan entre los $70.000 y los $100.000 por carpa, según la ubicación y los servicios incluidos. El alquiler mensual ronda los $1.500.000 y varía de acuerdo con el punto específico de la playa y el abanico de prestaciones disponibles para los clientes. Desde el municipio remarcaron que el partido de Pinamar presenta realidades muy distintas según la localidad. Los precios son muy relativos porque Pinamar son cuatro localidades diferentes entre sí: Pinamar, Valeria del Mar, Ostende y Cariló, explicaron. En ese esquema, Cariló y Pinamar Norte concentran las propuestas más costosas, mientras que Valeria del Mar y Ostende ofrecen alternativas más accesibles, tanto en alojamiento como en servicios de playa. En la calle y en la playa, los turistas confirman esas diferencias. Una familia llegada desde Pilar cuenta que decidió acortar sus vacaciones. Antes veníamos veinte días, ahora nos quedamos una semana. Tratamos de organizarnos más, cocinar en el departamento y elegir algunos días para comer afuera, explica Marcela Carrere, la madre, mientras mira a sus hijos jugar cerca del mar. Una pareja joven, que alquila en Valeria del Mar, señala que buscó una zona más tranquila y económica. Cariló nos encanta, pero se nos iba del presupuesto. Acá estamos bien y nos movemos si queremos, dicen. Lucas Rivero junto a su grupo de amigos, coinciden en que los precios son altos, pero destaca la variedad de opciones: Hay de todo. Si querés gastar menos, se puede. Cariló En Cariló, la lógica es distinta. La oferta de sombra es limitada y eso acelera las reservas. En el parador Neruda explicaron a este medio que el inicio de la temporada es similar al del año pasado, aunque con expectativas de una leve mejora si el clima acompaña. La gente decide cada vez más a último momento. Muchas reservas son diarias, señalaron. Según detallaron, si bien cuentan con alquileres diarios, semanales, quincenales y mensuales, notan que el cliente define su estadía con menos anticipación que en años anteriores. Antes reservaban en octubre o noviembre; ahora te contratan el día anterior, indicaron. En cuanto a los precios, explicaron que los aumentos fueron moderados. La tarifa es muy similar a la del año pasado, el incremento no llega al 10%, afirmaron, y destacaron la relación precio-calidad como un factor clave para atraer público. Respecto de la ocupación, señalaron que el día puede arrancar en un 40% o 50% y terminar en niveles del 70% u 80%. En el bar del parador Neruda, la carta gastronómica también refleja subas. Según indicaron, los precios aumentaron cerca de un 30% respecto de la temporada pasada, aunque el movimiento acompaña. Llevamos unos 700 cubiertos más que el año pasado, señalaron, y volvieron a marcar al clima como variable central: Todo el trabajo que se ve depende de eso. La exclusividad de Cariló se refleja con claridad en otros paradores. En Hemingway, su encargado confirmó que los valores de salida al mercado se mantienen vigentes para este ciclo. Dentro de los restaurantes, la escena se completa con las cartas sobre la mesa. Hamburguesas, lomitos, milanesas, pastas caseras, pizzas, ensaladas y menú infantil aparecen uno detrás de otro en hojas plastificadas, largas, cargadas de precios. No hay sorpresas en los platos: son los clásicos del verano. La novedad está en los valores, que reflejan los aumentos ya asumidos por quienes eligieron pasar unos días al mar. En gastronomía, los propios paradores y restaurantes reconocen subas de alrededor del 30% respecto de la temporada pasada, con cartas que se mantendrán sin cambios durante enero. El cierre del año encuentra a Pinamar y Cariló con playas llenas, mesas ocupadas y expectativas altas. Entre la arena caliente, el sonido constante del mar y la carta abierta sobre la mesa, la temporada ya está en marcha. Enero asoma con ocupación récord y precios que marcan el pulso de un verano donde, pese a los ajustes, la gente eligió estar.

    Ver noticia original

    También te puede interesar

  • Examedia © 2024

    Desarrollado por