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Gualeguaychu » Reporte2820
Fecha: 31/12/2025 16:17
¿Quién es el gualeguaychuense que pone a la ciudad en el mapa científico mundial? En el laboratorio del Hospital Centenario se escribió una historia que traspasa las fronteras de la ciudad y del país. Ivan Pérez Duarte, un joven bioquímico que hace poco más de cuatro años abrió las puertas de ese hospital para comenzar su carrera profesional, acaba de ser elegido como el único representante de Argentina ante la Sociedad Americana de Microbiología (ASM), la organización científica más prestigiosa del mundo en su especialidad. La noticia llegó hace apenas una semana, pero el camino comenzó dos años atrás. En un congreso nacional de microbiología, Ivan y su equipo del Hospital Centenario presentaron un trabajo de investigación sobre candidiasis vaginal que llamó la atención de los representantes de la ASM, quienes patrocinaban el evento. El trabajo quedó seleccionado entre los tres mejores del congreso, y esa fue la puerta de entrada a un proceso que lo llevaría a competir con 300 jóvenes investigadores de todo el país. "Esto para mí es más que un premio, es una responsabilidad", confiesa Ivan con la humildad que lo caracteriza en una charla con Radio Nacional Gualeguaychú y R2820. Y tiene razón: de esos 300 postulantes iniciales, solo uno sería elegido para representar a Argentina entre los 100 referentes seleccionados a nivel mundial, uno por cada país donde la ASM tiene presencia. Investigación "a pulmón" con impacto internacional Lo que hace aún más notable este logro es el contexto en el que se produce. "Todas las investigaciones que realizamos son a pulmón, a fuerza de voluntad, a quedarse después de hora", explica Pérez Duarte. Sin grandes presupuestos ni equipamiento de última generación como el que tienen los centros de investigación de Buenos Aires o La Plata, el equipo de microbiología del Centenario compite de igual a igual con instituciones respaldadas por el CONICET, la Fundación Pasteur y otros organismos de renombre. "Había jóvenes investigadores apadrinados por gente muy importante, con mayor alcance en cuanto a instrumental y herramientas", reconoce. Pero la calidad del trabajo, la dedicación y el compromiso con la comunidad local pesaron más que los recursos materiales. El objetivo de estas investigaciones es claro: generar datos e información sobre lo que está pasando a nivel microbiológico con los pacientes locales, para que los médicos e infectólogos tengan mejores herramientas de diagnóstico y tratamiento. "Cada trabajo de investigación que presentamos sirve de base para otros trabajos, nunca tienen un punto final", explica. "Es para mejorar la calidad de vida de la gente de Gualeguaychú". Un equipo que hace la diferencia Ivan es el primero en aclarar que este logro no es solo suyo. "Somos un equipo y cada logro que obtenemos es de todos", insiste. Y nombra con gratitud a quienes lo acompañan: Josefina Juárez, su jefa y mentora; Georgina Raceto y Judith Brattner, bioquímicas; Sibina Leiva y Cecilia Bolsero, del equipo técnico; y también a Leticia Siri y Pamela Centurión, quienes desde la jefatura del laboratorio le abrieron las puertas y confiaron en él. Fue precisamente Leticia Siri quien lo convocó a mediados de 2020, apenas semanas después de que Ivan se recibiera en la Universidad Nacional de Rosario. El contexto no podía ser más desafiante: en plena pandemia, el hospital necesitaba gente dispuesta a estar en primera línea. "Debía sacar sangre de todos los pacientes que estaban internados en terapia intensiva", recuerda. "En ese momento había cuatro terapias funcionando en el hospital. Fue un golpe muy fuerte, iniciar de esa forma". La imagen de pacientes que un día estaban y al siguiente ya no, marcó profundamente al joven profesional. "Creo que me formó a mí como profesional el estar preparado, continuamente, estar instruyéndome, formándose", reflexiona. Una familia de valores y esfuerzo Cuando compartió la noticia con su familia, Ivan vio en los ojos de sus padres algo que ningún título puede dar: orgullo. "Soy una de las primeras generaciones universitarias en toda la familia, tanto materna como paterna", cuenta emocionado. De familias humildes, sus padres le transmitieron valores que hoy reconoce como pilares de su carrera. "Mi madre es una persona totalmente aplicada, ordenada, llena de energía. Mi padre es una persona resolutiva, nunca en mi vida lo vi ante algo que no pueda resolver", describe con cariño. "Traté de tomar de ambos lo mejor y aplicarlo a mi vida", sintetizó ante R2820. Mirando hacia adelante El rol que ahora asume Ivan como referente nacional ante la ASM implica nuevas responsabilidades: difundir las novedades de la microbiología mundial, generar vínculos con fundaciones e instituciones internacionales que quieran invertir en investigación local, y fomentar la formación de nuevos investigadores jóvenes. "Esto sirve para aquellos jóvenes que quieran saber un poquito más lo que es investigar o tienen ese sueño de formar un grupo de investigación", señala. Para la ciudad, significa que instituciones internacionales pondrán sus ojos en Gualeguaychú y en el Hospital Centenario, abriendo la posibilidad de conseguir soporte económico para las líneas de investigación que van surgiendo. En junio próximo, Ivan Pérez Duarte viajará a Washington para participar de un congreso internacional donde se encontrará con los demás referentes mundiales. Allí, una vez más, Gualeguaychú estará nombrada a nivel internacional. "Espero que toda la sociedad de Gualeguaychú se sienta orgullosa por lo que podemos alcanzar desde dentro del Hospital Centenario, desde dentro del Laboratorio de Microbiología", dice. Y agrega: "Con recursos quizás limitados, pero con energía, tenacidad y ganas de mejorar el sistema de salud". La ciencia argentina tiene rostro joven, tiene nombre propio y tiene un domicilio muy claro: el Hospital Centenario de Gualeguaychú, donde un equipo entero demuestra cada día que la excelencia no depende solo de los recursos, sino sobre todo de la pasión por lo que se hace.
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