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Concordia » Despertar Entrerriano
Fecha: 29/12/2025 20:02
No estamos luchando contra una empresa, estamos luchando por nuestra salud: Las Tejas reclama controles para saber qué es el polvillo que invade el barrio La preocupación por emisiones visibles, olores intensos y la falta de respuestas oficiales volvió a encender el reclamo vecinal en el barrio Las Tejas. Tras presentar una nota formal al Municipio, los vecinos exigen controles ambientales claros y saber con precisión qué se está liberando al aire. Además Marcelo Pérez Fernández, representante del grupo vecinal se puso en contacto con nuestro medio, Despertar Entrerriano, para contarnos de primera mano la situación. En sus palabras, desde hace años, vecinos de la zona vienen reclamando por la contaminación que, aseguran, genera la actividad de la empresa Egger, ubicada en el sector. Sin embargo, en los últimos días la situación se intensificó y el reclamo tomó mayor fuerza, impulsado por la presencia visible constante de fibras en el aire, sobre viviendas y vehículos, y por la falta de información clara sobre qué se está liberando desde la chimenea de la fábrica: Esto no viene de ahora, viene desde hace más de 20 años, desde que se impuso la fábrica, expresó Marcelo, vecino del barrio desde hace 21 años, quien se convirtió en una de las voces visibles del reclamo. Hoy estamos cansados. Decimos basta, sostuvo. Emisiones visibles y respuestas que no conforman a los vecinos Según relata, la preocupación principal de los vecinos pasa por el desconocimiento. Nosotros no sabemos qué es lo que se está liberando, si es tóxico o no. Se libera mucha fibra y nadie nos dice con exactitud qué estamos respirando, remarcó Pérez Fernández. En ese contexto, la comunidad presentó una nota formal al Municipio de Concordia solicitando la intervención del área de Ambiente. El escrito fue dirigido al director de Saneamiento Ambiental, ingeniero Carlos Pantaleone, y recibido por el licenciado Rubén Rivero, de la Dirección de Control del Ambiente, aseguró el vecino. El reclamo se intensificó luego de que recibieron un comunicado de la empresa, en el que reconoce la liberación de material, describiéndolo como fibra de madera, material orgánico sedimentable (no respirable) según explicó Marcelo. Quien constata que para los vecinos esa explicación no alcanza: Si ellos ponen eso, es alarmante. Entonces, ¿qué es lo que se está liberando? ¿Qué es lo que estamos respirando hoy?, cuestionó. Además, señaló que el informe fue enviado en formato PDF: no tiene ningún tipo de firma, nadie se responsabiliza, lo que les genera aún más desconfianza. El impacto cotidiano y el desgaste de convivir con la contaminación El problema, aseguran, no es solo ambiental sino también cotidiano. Esto se ve a simple vista. Está en el piso, en los techos de las casas, en los vidrios, en los autos. Es un polvillo que está todo el tiempo volando, describió Pérez Fernández. A eso se suma el olor: Hay días de humedad en los que se siente un olor fuerte, impresionante, de aserrín. No sabés qué estás respirando. El vecino asegura que la situación afecta la vida diaria. No podemos estar tranquilos en el patio, todos los días es lo mismo, explicaron, y señalaron que, además de lo que se libera por la chimenea, existe una enorme acumulación de aserrín dentro del predio que también se dispersa con el viento. Sobre la salud, si bien no cuentan con información oficial, Pérez Fernández mencionó que hubo vecinos que iniciaron acciones legales y, según comentarios, la empresa se habría hecho cargo de tratamientos, aunque aclaró que se trata de datos que circulan de manera informal y que justamente refuerzan la necesidad de controles claros. Reclamos históricos y una reunión clave El reclamo, aseguran, no es nuevo. Siempre estuvimos reclamando, siempre hubo reuniones, siempre las mismas promesas: que van a arreglar, que van a poner cortinas, que van a plantar árboles. Pero pasan los años y seguimos igual, sostuvo el vecino. A esto se suma otro punto sensible: el tránsito de camiones. Según explicó, la empresa figura dentro del parque industrial, pero el ingreso se realiza por el barrio. Los camiones pasan por acá, rompen el asfalto y es un peligro. No tienen un ingreso propio, todo pasa por el barrio, advirtió. En este marco, los vecinos convocaron a una reunión comunitaria para el próximo 6 de enero a las 21 horas en la parroquia del barrio, a la que fue invitado el intendente Francisco Azcué. La invitación está hecha, todavía no tenemos confirmación, pero queremos saber qué medidas van a tomar, indicaron. Mientras esperan una respuesta oficial, el reclamo se mantiene firme. Nosotros no estamos luchando contra una empresa, estamos luchando por nuestra vida y por nuestra salud. Queremos saber la verdad, que nos digan bien qué es lo que estamos respirando, si es o no tóxico y hasta dónde va a llegar esto, concluyó Pérez Fernández. Fuente: Despertar Entrerriano.
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