29/12/2025 06:58
29/12/2025 06:58
29/12/2025 06:58
29/12/2025 06:58
29/12/2025 06:57
29/12/2025 06:56
29/12/2025 06:55
29/12/2025 06:53
29/12/2025 06:52
29/12/2025 06:50
» DiarioWeb
Fecha: 29/12/2025 03:43
A partir de 2026, la FIA introducirá una fuerte suba en los depósitos obligatorios para presentar protestas o revisiones técnicas, en una decisión que apunta a reducir reclamos sin sustento y acelerar los procesos post-carrera. El cambio forma parte del nuevo reglamento deportivo aprobado por el Consejo Mundial del Deporte Motor en diciembre. El nuevo esquema económico eleva a 20.000 euros el monto mínimo para solicitar revisiones, y suma otras tarifas más altas para iniciar investigaciones técnicas o apelar sanciones. Además, ese gasto se descontará del límite presupuestario de cada escudería, lo que obligará a administrar con mayor cuidado los recursos anuales. El ajuste responde a un malestar generalizado entre los equipos por las demoras en la confirmación de resultados durante la temporada 2025, con especial foco en las protestas fallidas de Red Bull contra George Russell, en Miami y Canadá. En ambos casos, la FIA desestimó los reclamos, lo que expuso el uso excesivo de mecanismos de protesta sin pruebas contundentes. La decisión de la FIA también busca filtrar los reclamos más especulativos. Un depósito de 2.000 euros para equipos que ganan millones no es ni remotamente suficiente. Si fuera una suma de seis cifras, seguro lo pensarían dos veces, criticó George Russell, quien se mostró a favor del endurecimiento. La reunión de julio entre Stefano Domenicali y Nicolas Tombazis fue clave para impulsar esta reforma, que ahora establece consecuencias deportivas y financieras para cada reclamo. También se ajustó el procedimiento para apelar decisiones, que exigirá una inversión inicial más alta que antes. Otro punto relevante es que las revisiones técnicas a autos rivales también serán más caras, en línea con la intención de reforzar la transparencia y la seriedad del sistema sin entorpecer el desarrollo deportivo. Si bien la FIA podrá reembolsar el dinero si la queja prospera, el filtro económico ya será un obstáculo inicial. Todo este movimiento ocurre mientras crece la polémica por la ventaja de potencia en los nuevos motores Mercedes, que ya generan sospechas en la parrilla antes del arranque del 2026. El 2 de enero, los equipos reabrirán sus fábricas tras uno de los recesos más breves en la historia de la categoría, con los test privados programados entre el 26 y el 30 de enero en Barcelona.
Ver noticia original