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» Comercio y Justicia
Fecha: 26/12/2025 09:37
El ano que concluye tambien parece dar paso a otra etapa del Gobierno nacional, aunque no en coincidencia con el cierre del ano calendario. La fecha del punto de inflexion fue, sin dudas, la de las elecciones del 26 de octubre pasado. Hay un antes y un despues de ese dia, en el que el conteo de las urnas mostro un contundente triunfo de Javier Milei. Si, es que fue una victoria del propio Milei, mas alla de su circulo de hierro o el de alguno de sus ministros. Asi como el solo se cargo con el triunfo en 2023 que lo llego a la Presidencia, tambien ahora sigue siendo quien tracciona un resultado que parecia impensado horas antes. Pasaron cosas en el medio. La Libertad Avanza (LLA) cayo de manera contundente en las elecciones anticipadas 45 dias a las nacionales, por el gobernador Axel Kicillof en la Provincia de Buenos Aires. Ademas, en forma paralela, Milei comenzo a acumular una serie de reveses en el Congreso y debio pagar el costo politico de tener que vetar leyes como la emergencia en discapacidad o en minoridad que luego el propio Parlamento revirtio con los dos tercios de los votos. Los gobernadores, ninguneados y hasta insultados por el Presidente, incluso aquellos mismos que meses antes habian avalado, por ejemplo, buena parte de la ley Bases, ahora comenzaron a pasarle facturas al Gobierno, por medio de sus legisladores nacionales. Para completar el panorama, ya con un clima electoral efervescente, comenzaron a aparecer senales de alerta para el oficialismo en un ambito que era una de las banderas de Milei: la corrupcion. Primero el denominado Libragate que detono en febrero, dejo al Presidente en un lugar incomodo. Mas adelante, ya con las elecciones bonaerenses en el horizonte cercano, los audios que dejaban expuesta a Karina Milei y a una cadena de hechos de corrupcion en la Agencia de Discapacidad (Andis) comprometieron aun mas a la gestion libertaria. Pero no fue solo eso. Los mercados y los ahorristas comenzaron a presionar sobre el tipo de cambio, un clasico de los argentinos en la previa de un proceso electoral. Con reservas del Banco Central en caida libre y con el Tesoro tratando de arbitrar con alguna herramienta para evitar la sangria de dolares, Milei debio recurrir a su amigo Donald Trump, quien no solo le brindo un apoyo explicito sino que hasta le ordeno al Tesoro de Estados Unidos que interviniera vendiendo dolares en el mercado unico de cambios argentino, hecho inedito que hasta le valio al presidente estadounidense criticas y denuncias de referentes del Partido Democrata. Como fuera, esas intervenciones, antes de las elecciones de octubre, fueron claves para evitar una escalada del dolar por encima del techo de la banda. Fue Milei o fue el riesgo kuka? Con semejante panorama, nada hacia suponer que el Gobierno se fuera a alzar con una victoria tan contundente en las legislativas de medio termino. Ya en el pasado quedo si el triunfo libertario se debio mas a la expectativa que generaba Milei a futuro -es decir, que el esfuerzo por ordenar la macro y el ajuste que aun hoy soportan sectores no ya intra Estado, sino de la economia en general, desde el asalariado, el informal o las propias empresas, era un precio a pagar para un cambio estructural y necesario para sentar las bases de un crecimiento solido que aun no se avizora- o si en realidad se trato mas de un miedo a volver al pasado. Dicho en terminos del jefe de Estado, al denominado riesgo kuka, es decir, que el kirchnerismo vuelva al poder. Probablemente hubo un poco de todo. Tambien no fue menor un tema que Milei marco como uno de sus logros: bajar la inflacion a niveles tolerables para una Argentina en la que el costo de vida siempre fue un problema recurrente. El nuevo Milei Lo cierto es que, luego del triunfo en octubre y empoderado con un Congreso que desde el 10 de diciembre le permite moverse con otro musculo politico, Milei cambio su impronta de Gobierno. Ya antes de las elecciones, tanto Trump como desde el Fondo Monetario Internacional (FMI) le venian advirtiendo a Milei sobre la necesidad de cambiar su estrategia confrontativa por una mas dialoguista, mas aun ante los desafios de la segunda etapa de la gestion. Por lo pronto, el Gobierno no podia gestionar un ano mas, el tercero desde que asumio el libertario, sin Presupuesto votado por el Congreso. En paralelo, necesitaba generar consensos para votar leyes claves como la reforma laboral, tributaria, del Codigo Penal y, mas adelante, una reforma previsional. Milei tomo nota. Asi parecio desde el discurso que dio tras ganar de manera contundente el 26 de octubre. Lejos de aquel provocador y del revanchismo que hubiese supuesto ese discurso en modo viejo Milei, el Presidente llamo al dialogo, a buscar consensos y a ir hacia adelante en procura de las reformas necesarias para hacer la economia mas estable, competitiva y atraer las inversiones que no terminaban de llegar, para generar empleo y que los salarios comenzaran a recuperarse. Un Milei deconstruido aparecio entonces en escena. Sera el nuevo Milei o es solo un espejismo circunstancial de aquel que parece llevar dentro?. Por lo pronto, esta version del Presidente parece una con un giro mas a la politica tradicional que a la que combate a la casta como el siempre pregono en sus discursos. Sucede que, previo a votar el Presupuesto dias atras en Diputados, no trepido en comprar voluntades a traves de fondos frescos a gobernadores de diferente signo politico aunque proclives a negociar sin importar ideologias. Aun asi, no logro evitar que no pasara en la votacion en particular el articulo 75 que derogaba las leyes de financiamiento universitario y emergencia en discapacidad. Esta claro que, aun con la alianza con el PRO, los nuevos integrantes de LLA llegados de otros partidos y los votos propios del rinon mileista, el Gobierno no puede blindar temas claves. Una muestra de ello es que la nueva titular del bloque de LLA en el Senado, Patricia Bullrich, postergo hasta febrero el tratamiento en el recinto de la reforma laboral que originalmente estimaba votar antes de fin de ano. Los votos no estan, al menos en temas muy sensibles. Ni siquiera el de sus aliados como los legisladores del PRO que, en muchos casos se desmarcaron y votaron por sostener la emergencia en discapacidad y el financiamiento universitario. Luego de amagar con insistir en el Senado con el texto original del articulo 75, finalmente el oficialismo resolvio arriar banderas y priorizar la sancion del Presupuesto tal como quedo de Diputados. Necesita con urgencia de esa norma y los plazos son exiguos. Con todo, no esta claro si Milei tomo esa decision politica en acuerdo con el circulo de hierro -sus personas mas cercanas- o si bien fue la realidad la que hizo que los libertarios recalcularan la estrategia politica. No hay margen para gobernar otro ano mas sin Presupuesto y esta vez los mercados iban a acusar recibo en la previa de un vencimiento de deuda, en enero, de mas de 4.500 millones de dolares. Si fue asi, habra que esperar todavia un tiempo para ver hasta donde esta dispuesto llegar Milei y si realmente se trata de un libertario deconstruido, capaz de resignar el excel y la motosierra al menos para temas que ni los legisladores en general ni la sociedad estan dispuestos a sacrificar, aun a costa de entregar un innegociable superavit, o si aparecera el viejo Milei que uno supone siempre estara latente y dispuesto a reaparecer. Al fin y al cabo, fue ese el que lo llevo a ganar las presidenciales de 2023. Sin embargo, los tiempos cambian y las exigencias del electorado, tambien.
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