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» La Nacion
Fecha: 25/12/2025 15:39
Fue una de las artistas mas queridas y 25 anos despues revelaron sus ultimas palabras antes de su tragico final A un cuarto de siglo de la muerte de la talentosa cantante britanica Kirsty MacColl, su hijo menor compartio las desgarradoras frases que pronuncio antes de morir - 4 minutos de lectura' A 25 anos de su tragica muerte en un accidente nautico en Mexico, la memoria de la recordada Kirsty MacColl, figura emblematica de la musica britanica con exitos como Fairytale of New York, volvio a resonar a traves del conmovedor testimonio de su hijo menor, Louis Lillywhite. El joven, que tenia apenas 13 anos en aquel fatidico diciembre de 2000, revelo las ultimas palabras que su madre pronuncio, un grito desesperado que evidencio su instinto maternal en el momento final. Kirsty MacColl, de 41 anos, perdio la vida el 18 de diciembre de 2000, durante lo que debia ser un viaje familiar de buceo en las aguas de Cozumel, Mexico. La cantante se encontraba en el famoso arrecife de Chankanaab, un area donde el acceso de embarcaciones suele estar restringido, junto a sus hijos Jamie y Louis, y su pareja, James Knight. Fue Louis, ahora un adulto, quien rompio el silencio sobre el trauma que lo acompana desde entonces y compartio con el Daily Express los dolorosos flashbacks de aquel dia. De repente grito Cuidado! e intento apartarnos. El barco ya estaba sobre nosotros; podia ver las helices en el agua, recordo Louis sobre el momento exacto. Segun el desgarrador relato de su hijo, Kirsty no dudo en empujar valientemente a Jamie para sacarlo de la trayectoria de la lancha. Este acto de sacrificio permitio que Jamie sufriera solo heridas leves, ya que su tanque de oxigeno recibio la mayor parte del impacto de la helice, por lo que absorbio la fuerza del golpe. Sin embargo, Kirsty no corrio con la misma fortuna. La embarcacion la alcanzo de lleno, provocandole heridas catastroficas en la cabeza y el pecho que le causaron la muerte de forma casi instantanea. Louis, un nino entonces, presencio la terrible escena y describio que se nado en la sangre de mama y, en medio del caos y el panico, grito a su hermano que nadara hacia el otro lado y no mirara atras. El conductor de la lancha, Jose Cen Yam, rompio su silencio de un cuarto de siglo para ofrecer su version de los hechos. El exmarinero insistio al Daily Mail que siempre habia dicho la verdad sobre lo ocurrido. Afirmo que en ese momento viajaba a unas cinco millas por hora y que no vio a nadie en el agua mientras maniobraba su embarcacion. Pese a que el area de Chankanaab era conocida por tener el acceso de barcos restringido, Cen Yam insistio en que el incidente fue un accidente y concluyo: No siento que haya sido mi culpa. El exmarinero detallo el momento en que se percato del impacto: Escuche una helice hacer un ruido muy extrano. Fue realmente extrano, un zumbido como si algo lo hubiera golpeado. No hubo ningun golpe en el bote, solo el ruido de una helice haciendo algo extrano. Pense he pasado por algo. Tras reducir la velocidad y dirigirse a la popa de la embarcacion, la encontro: Estaba definitivamente muerta. No pude hacer nada para salvarle la vida. La tragedia dejo una profunda e indeleble cicatriz en Louis, quien, aunque gran parte de lo sucedido todavia esta borroso en su memoria, tuvo que someterse a mucha terapia para procesar el traumatico incidente. En su adolescencia, le resultaba extremadamente dificil hablar con un extrano sobre lo peor que le habia pasado, pero encontro consuelo y ayuda profesional en la terapia al alcanzar la adultez. Mas adelante, cuando tenia veintitantos, empece a observar patrones de comportamiento en mi mismo y decidi intentarlo. Desde entonces he recibido mucha terapia y me ha ayudado, explico Louis. La experiencia le genero un miedo profundo a nadar, bucear y a los barcos, pero, con gran esfuerzo, logro superarlo, con el objetivo de honrar la memoria de su madre. Incluso he vuelto a hacer snorkel y a conducir un barco, afirmo. Con una reflexion emotiva, concluyo: A mi madre le encantaba el mar y se habria sentido destrozada si me perdia algo tan bonito.
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