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Fecha: 22/12/2025 13:35
Dante Gebel: el pastor argentino al que algunos promueven como presidente El pastor argentino vive entre Miami y Los Ángeles, conduce una mega iglesia y abrió una puerta a una posible candidatura a presidente de Argentina. En un contexto de auge evangélico y mucha confusión, Gebel es un posible candidato a presidente; para otros, es el que bendijo a Nayib Bukele y la posible puerta de entrada de una nueva avanzada ultraconservadora de la iglesia norteamericana en la Argentina. Antiaborto, antimatrimonio igualitario y casi casi anti Estado y con millones de vistas en redes. El portal de Página12 realizó un informe, acerca del pastor que comenzó a sonar con insistencia en ámbitos políticos de la oposición para enfrentar a Milei en 2027. Rescatamos algunos puntos del informe: Familia muy normal “Los Gebel teníamos unos tíos que bebían demasiado”, dice. “La mayoría moría de cirrosis y la consigna era no beban ni fumen cerca del cajón, porque todo puede estallar por el aire”. Gebel se ríe. El acto tiene forma de parodia, la historia es verdadera y él es, además, un animador. Los Gebel, sigue, “teníamos un padrino de más de 70 años al que le gustaba andar con muchachas de 18. También teníamos un bisabuelo del que se rumorea que pudo haber sido nazi y una tía divertida a la que le gustaba coleccionar maridos”. "Ponele un ojo" Meses atrás, a comienzos de año, marzo de 2025, un puntero del PJ del Oeste del conurbano se le acercó al vocero de un intendente para decirle: “ojo con este Dante”. “Ponele un ojo”, le dijo. Dante Gebel alcanzó dos de los picos más altos en la ruidosa conversación pública. En octubre, cuando él mismo abrió la puerta a una posible candidatura durante una entrevista con su socio, Mario Pergolini. “Si me preguntabas hace dos años -dijo-, te decía que no. Vos sabés que estoy muy cómodo allá, cómodo financieramente, estable. Puedo ayudar, puedo hacer los programas desde allá. No tengo necesidad, no iría ni por el cobre, ni por el dinero, ni por el bronce. Por eso hace dos años, te decía no, ni loco… Hoy, no lo descarto". La conversación volvió a activarse esta semana, cuando después de aquella primera puerta, se disparó el operativo clamor en una ancha avenida del medio. Hubo afiches, mucha opinión en redes. “Estamos trabajando en un proyecto para tratar de convencerlo –dijo Juan Pablo Brey, de la Asociación Argentina de Aeronavegantes. Hay gente de todos lados, peronistas, kirchneristas, gente de La Libertad Avanza, gente del PRO. Hoy, la salida del país es muy difícil. Necesitamos alguien que abrace a todos. Hoy tenemos un Presidente que ejerce la violencia permanentemente y la gente está cansada”. “No importa si es un gobierno de izquierda o derecha”, dice Gebel. La iglesia está donde hay una necesidad". La familia Gebel fue siempre estricta. “Mamá Nélida y papá Federico, católica ella, protestante él, no eran religiosos, pero la ascendencia de ambos -inglesa, alemana- alcanzó para dar severidad a los retoños. No se veía televisión, no se decían malas palabras. Federico, el padre, fue carpintero toda la vida y fue, también, alcohólico y violento. Cuando los dos mayores se casaron y se fueron de la casa, Nélida parió a su último vástago, Dante”. Nélida tuvo un cáncer y un milagro. Diego la llevó a una iglesia con techo de chapa. “Pasé por el pasillo entre toda la gente y me caí de rodillas”, le dijo la mujer a Guerriero. “Sentí que me arrancaban algo”, continuó. “Al otro día apareció mi hijo mayor y me dijo: ‘Mamá, anoche Dios hizo una obra’”. Nélida se curó. Federico dejó de tomar. Diego y Dante iniciaron la carrera pastoral. En Vélez 1996 Gebel había alquilado el estadio sin campaña de prensa. Sin que nadie lo invite, apareció Palito Ortega, entonces gobernador tucumano. Gebel dudó, pero lo invitó al escenario y él cantó “Yo tengo fe”. Al otro día, Gebel fue tapa de todos los diarios como “El Pastor de los Jóvenes”. En el año 2017, Gebel vive en Estados Unidos y regresa al país. Aquí recibe el título de Ciudadano Ilustre de San Martín. En 2011 Scioli le prestó el estadio de La Plata, Carlos Menem en 1998 le dio espacio en ATC a pedido de otro amigo, el Puma Rodríguez. Fernando de la Rúa en 2001, le dio el Obelisco para un acto en el que congregó 100 mil personas. Alejandro Romay abrió las puertas de la tevé de EE.UU. Robert Schuller, la Catedral de Cristal en San Francisco, meca evangélica de Estados Unidos. En 2010, criticó la ley de matrimonio igualitario: “aberración” y “retroceso”. Dijo que los periodistas que la apoyaban tenían un “doble discurso” y que la mayoría “rompería en llanto si su propio hijo le confesara su homosexualidad”. Posturas similares expresó frente al aborto. En EE.UU. realiza donaciones millonarias. Asistió en África, Venezuela, viajó a Salvador, pero también envió donaciones a Bahía Blanca y a pastores de las iglesias. La opinión sobre su figura Gabriel Ballerini, gladiador de la batalla cultural de Milei, le “resulta llamativo que alguien que emigró hace casi 20 años tenga esas aspiraciones presidenciales”. Mientras que Gerardo Oberman dice: “Si hace cinco años pensábamos que Javier Milei podía ser presidente, decíamos que eso solo ocurriría en Narnia” y por eso dice que ahora “veo con muy buenos ojos la llegada de Dante”. La comunidad de pastores en realidad es muy reacia a meterse en política. Invierte tanto en su construcción que se resiste a cualquier turbulencia. Sí opinan, pero no se meten en política. Lo veo más parecido a una búsqueda desesperada de un sector tal vez peronista para construir su propio outsider y operar contra Milei. Mirta Campanella es la responsable del diálogo con las iglesias de San Martín, el territorio de origen de Gebel, " tiene que ver con un crecimiento muy fuerte del mundo evangélico en Argentina". “Socialmente estamos en momentos donde aparecen figuras nuevas, outsider –dice- y donde la política tradicional convive con fenómenos inéditos. Por eso cualquier proyección sigue siendo incierta y más material de análisis que de afirmaciones cerradas”.
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