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» Data Chaco
Fecha: 22/12/2025 00:09
La Argentina atraviesa una de las crisis más profundas en materia de salud mental desde que existen registros oficiales. En 2024, el país alcanzó el nivel más alto de muertes por suicidio de su historia reciente: 4.249 personas fallecieron por causas autoprovocadas, de acuerdo con datos del Sistema Nacional de Información Criminal (SNIC) del Ministerio de Seguridad de la Nación. La cifra marca un punto de alarma ya que, por primera vez, la tasa nacional supera el promedio global informado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). En términos estadísticos, el país registra alrededor de 9 muertes por cada 100 mil habitantes, mientras que la media mundial se ubica en 8,2. El fenómeno no solo crece de manera sostenida año tras año, sino que impacta con mayor fuerza en jóvenes y adultos jóvenes, donde el suicidio se consolidó como una problemática multicausal atravesada por factores sociales, económicos y sanitarios. Durante 2024, el suicidio se convirtió en la principal causa de muerte violenta en Argentina, con un promedio de un caso cada dos horas. De este modo, desplazó a los siniestros viales al segundo lugar y relegó a los homicidios al tercero. A este escenario se suma otro dato alarmante: según el Sistema Nacional de Vigilancia de la Salud (SNVS), del Ministerio de Salud, se registran unas 22 internaciones diarias por intentos de suicidio. La relación es contundente: por cada persona que muere, al menos otras dos intentaron quitarse la vida. Los factores estructurales y sociales detrás del aumento El crecimiento de los suicidios responde a una combinación de variables que se retroalimentan. En el plano estructural, la inestabilidad económica, la pérdida de poder adquisitivo, la precarización laboral y el deterioro de las condiciones de vida funcionan como detonantes de angustia, frustración y desesperanza, especialmente en contextos donde el acceso a la atención en salud mental es limitado o tardío, con el desmantelamiento de múltiples políticas públicas de salud mental. A ello se suma un clima social atravesado por la exigencia de éxito individual, amplificada por las redes sociales, que promueven modelos de vida inalcanzables, hiperexposición permanente y una lógica de meritocracia que deja poco margen para el error o la vulnerabilidad emocional. La OMS advierte que el suicidio es un fenómeno altamente prevenible si se interviene de manera temprana sobre los factores de riesgo. En el país, el propio Ministerio de Salud reconoce un aumento sostenido de consultas por depresión y trastornos de ansiedad. Sin embargo, los recursos destinados a prevención, atención y seguimiento continúan siendo insuficientes, en especial en el interior del país. Especialistas en psiquiatría y psicología señalan que el estigma asociado a los padecimientos mentales sigue siendo una de las principales barreras para la búsqueda de ayuda. El silencio, la negación y la falta de redes de contención dificultan la detección temprana y elevan el riesgo en personas en situación de vulnerabilidad. En este contexto, la implementación incompleta de la Ley Nacional de Salud Mental (26.657) aparece como un punto crítico. La falta de presupuesto, la resistencia a modificar el modelo hospitalario tradicional y las deficiencias en la formación profesional exponen una deuda pendiente del Estado y del sistema político en su conjunto. Qué hacer ante una situación de riesgo Los profesionales coinciden en que la prevención comienza en el entorno cercano. Hablar del suicidio no incita a cometerlo: por el contrario, preguntar, escuchar sin juzgar y acompañar puede marcar la diferencia. Evitar frases hechas, consejos simplistas o la minimización del dolor ajeno es clave. Ante señales de alarma: aislamiento, verbalizaciones de desesperanza, cambios bruscos de conducta, es fundamental derivar de inmediato a un profesional de la salud mental. Las guardias especializadas y las líneas de atención telefónica funcionan las 24 horas y son herramientas centrales para una intervención oportuna. Prevención del suicidio en Chaco La provincia cuenta con la guardia remota de salud mental que brinda atención las 24 horas, los 365 días del año. - Emergencia diurna (8 a 20): 3624618432. - Emergencia nocturna (20 a 8): 3624814825.
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