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» Data Chaco
Fecha: 22/12/2025 00:08
El fin de año es una época de celebraciones, reencuentros y festejos, pero también de riesgos para la salud cardiovascular. En una entrevista con Noelí Goujon, cardióloga, en El Garage de Data, se abordaron los principales factores que inciden en el aumento de enfermedades cardíacas durante esta temporada, y qué precauciones tomar para evitar complicaciones. Según la doctora Goujon, diciembre es uno de los meses más complicados para las personas con enfermedades cardiovasculares. "Es un mes en el que se observa un aumento significativo de casos de hipertensión arterial e infartos agudos de miocardio", afirmó la especialista. Los factores que predisponen a estas complicaciones son múltiples, pero la alimentación juega un rol fundamental. Las despedidas de fin de año, las cenas familiares y los encuentros sociales suelen ir acompañados de comidas ricas en sal, grasas y azúcares, lo que puede desestabilizar el equilibrio de aquellos que habitualmente siguen una dieta saludable. Otro factor clave es el consumo excesivo de alcohol. Las reuniones sociales de fin de año, con brindis y festejos, predisponen a las personas a ingerir más alcohol del habitual. "Si bien no se trata de evitarlo por completo, la moderación es clave", explica la doctora. "Es importante hidratarse, alternando una medida de alcohol con una de agua", agrega. Además de la alimentación y el alcohol, el estrés es un gran enemigo del corazón en esta época. Las fiestas generan un nivel alto de estrés tanto por la planificación como por las tensiones emocionales, especialmente en personas con antecedentes de ansiedad o depresión. "Las fiestas suelen generar estrés adicional por las discusiones familiares, y esto contribuye a la elevación de la presión arterial", comenta Goujon. Este tipo de estrés agudo puede desencadenar complicaciones cardiovasculares graves, en especial si no se manejan correctamente. Un problema frecuente que observa la especialista es el olvido o descuido de la medicación durante las fiestas. "Las personas que viajan o cambian su rutina de manera significativa suelen olvidarse de tomar los medicamentos que les han sido recetados, lo que puede poner en riesgo su salud", advierte. Síntomas que no se deben minimizar Un aspecto crucial es no subestimar los síntomas de alarma. "Las personas tienden a minimizar los síntomas durante las fiestas para no interrumpir las celebraciones, pero deben saber que cualquier síntoma relacionado con el corazón debe ser consultado de inmediato", afirma Goujon. Los síntomas que requieren atención urgente incluyen dolor en el pecho, en el brazo izquierdo o en el hombro, palpitaciones, sensación de falta de aire y mareos. La tardanza en consultar puede convertir un evento cardíaco en un infarto más complicado. La doctora también mencionó un estudio sueco que reveló que, durante 16 años, el día con mayor número de infartos agudos de miocardio en Suecia fue el 24 de diciembre a la noche. "Esto demuestra cómo las fiestas pueden afectar la salud cardiovascular", destaca. El síndrome del "corazón de vacaciones" Otro fenómeno que gana relevancia en estas épocas es el "síndrome del corazón de vacaciones". Este término hace referencia a una arritmia llamada fibrilación auricular, que afecta principalmente a personas jóvenes, sin antecedentes cardíacos, que tienen un consumo elevado de alcohol y alimentos salados. La fibrilación auricular se presenta como palpitaciones fuertes, pero, según Goujon, "es reversible si se detecta a tiempo". El calor también afecta el sistema cardiovascular. La deshidratación y la vasodilatación pueden poner presión sobre el corazón. "Por eso es esencial mantenerse bien hidratado, sobre todo en climas calurosos", sugiere la cardióloga. Consejos prácticos para cuidar el corazón durante las fiestas: - Alimentación moderada: Disfrutar de las comidas festivas, pero sin excederse. "Es preferible hacer un solo plato, que sea un poco más grande de lo habitual, pero evitar comer en exceso", aconseja Goujon. - Evitar el estrés: Organizarse con anticipación y tratar de evitar situaciones de estrés innecesario. - Hidratación: Alternar el consumo de alcohol con agua para evitar la deshidratación. - No olvidarse de la medicación: Ser disciplinado con los tratamientos médicos, especialmente si se viaja o se cambia la rutina. - Estar atentos a los síntomas: Cualquier dolor en el pecho o dificultad para respirar debe ser motivo de consulta médica urgente.
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