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Parana » Informe Digital
Fecha: 19/12/2025 06:00
La Cámara Federal porteña resolvió reabrir la querella por injurias que el presidente Javier Milei presentó contra la periodista Julia Mengolini, y dejó sin efecto el sobreseimiento dictado en primera instancia hace dos meses. La resolución lleva la firma del camarista Pablo Bertuzzi, quien rechazó el criterio aplicado por el juez Sebastián Casanello. Mientras el magistrado de primera instancia había cerrado la causa amparándose en la libertad de expresión y el “interés público” de los dichos, la instancia superior entendió que las afirmaciones de la periodista cruzaron el límite de la crítica política y se internaron, de forma indebida, en la esfera privada del mandatario. El núcleo del conflicto está en las declaraciones que Mengolini formuló en mayo de 2023 en el canal C5N, cuando sostuvo que el entonces candidato libertario estaba “enamorado de su hermana” y estableció un paralelismo con el “tabú del incesto”. En su fallo, Bertuzzi fue categórico al afirmar que esas expresiones no pueden escudarse bajo la protección del debate democrático. El camarista razonó que, aunque el escrutinio público sobre los candidatos es legítimo, no resulta admisible penetrar en la esfera de la “sexualidad o genitalidad” de las relaciones privadas alegando un supuesto interés colectivo. Parte del fallo contra Mengolini En su escrito, el camarista calificó de “arbitraria” la resolución previa de Casanello, sosteniendo que aquel fallo carecía de fundamentación suficiente porque no logró identificar qué asunto de interés general se debatía al referirse a la vida sexual de los involucrados. Bertuzzi advirtió que no puede invocarse la libertad de prensa “como pretexto para incentivar la discusión colectiva” con el fin de dañar la reputación de una persona mediante comentarios desconectados de su rol político. Otro eje central del fallo fue el rechazo al argumento del contexto. La defensa había alegado que el tono desinhibido del programa “Duro de Domar” y la exposición pública tanto de Milei como de su hermana Karina autorizaban ese tipo de afirmaciones. No obstante, Bertuzzi sostuvo que “el tono o dinámica de una emisión no puede convertir en lícito lo que es injurioso“. Además subrayó que la capacidad de la presunta víctima para defenderse públicamente no elimina la ofensa penal ni impide su reproche judicial. Mengolini, al borde de un juicio oral El fallo también distinguió este caso de la doctrina “Kimel vs. Argentina” de la Corte Interamericana, que suele amparar a periodistas. Si bien señaló que los funcionarios están sujetos a un mayor escrutinio público, el tribunal precisó que ello opera cuando sus actividades salen de la esfera privada para insertarse en el debate público. En el presente asunto, al focalizarse en supuestas conductas incestuosas, la Cámara concluyó que no se trató de una crítica política sino de “una difamación personal que no aporta nada al fortalecimiento del sistema democrático”. Con esta resolución, la causa retorna al juzgado de origen para que continúe su trámite, lo que deja a Mengolini al borde de un juicio oral (o debate) en el que deberá probar sus afirmaciones o encarar una eventual condena. El origen del conflicto y la escalada legal El episodio se remonta a declaraciones formuladas el 3 de mayo de 2023 en el canal C5N, en pleno año electoral. Allí Mengolini aseguró que Milei era “un señor que vive con 8 perros y está enamorado de su hermana”, y añadió que él mismo la mostraba como posible primera dama. La periodista fue más lejos al recurrir a sus estudios de antropología para referirse al “tabú del incesto”, insinuando que la relación quebraba esa norma universal. Esas expresiones, pronunciadas hace más de dos años, dieron origen a la querella que el Presidente inició recién en julio de este año, después de un intercambio de advertencias legales mutuas. La defensa de Mengolini sostuvo que sus dichos eran la descripción de hechos notoriamente públicos, alegando que el propio Milei hablaba con frecuencia de Karina como una figura relevante para su vida y su proyecto político. Sin embargo, la Cámara desarmó esa estrategia al considerar que la relevancia política de la hermana del Presidente no autoriza a terceros a calificar el vínculo de incestuoso, una imputación cuya connotación ilegítima y moralmente reprobable daña el honor. Javier y Karina Milei El artículo 110 del Código Penal, que regula las injurias, prevé multas para quien deshonre a otro, aunque contempla una excepción: no es delito si la expresión se refiere a un asunto de interés público. Precisamente esa excepción fue descartada por Bertuzzi. Al estimar que la “genitalidad” no constituye un asunto de Estado, la periodista perdió la cobertura legal que la protegía y queda expuesta a una sanción económica si no logra revertir el fallo ante Casación. Mengolini había denunciado antes haber sido víctima de hostigamiento en redes sociales que, según ella, fue amplificado por el Presidente, y había advertido que denunciaría a Milei por incitación al odio. La reactivación de la causa penal por parte de la Cámara Federal se interpreta como un triunfo judicial para Milei en su disputa cultural y legal contra el periodismo crítico, y establece un precedente restrictivo sobre los límites a la hora de abordar la vida privada de los mandatarios. TC
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