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» Clarin
Fecha: 18/12/2025 20:32
"Estaban a bordo de ese avión porque irían a pasar la tarde con nosotros. Estoy devastado". Con ese mensaje, Garrett Mitchell, piloto automovilístico de Estados Unidos, confirmó la muerte de su colega piloto y amigo Greg Biffle (55). El excorredor de NASCAR perdió la vida producto del desplome y posterior explosión del avión en el que viajaba hacia Carolina del Norte junto con su esposa y sus dos hijos menores. Los cuatro fallecieron en el lugar del accidente, un aeropuerto privado de Statesville. Otras tres personas murieron en el lugar: fueron identificados como Dennis Dutton, su hijo Jack Dutton y Craig Wadsworth. Mitchell esperaba a Biffle y su familia en Sarasota, Florida, en el sudeste de los Estados Unidos. Poco menos de 1.100 kilómetros los separaban, dado que los Biffle se encontraban en Statesville, una ciudad de Carolina del Norte, desde la que zarparían a bordo de un jet corporativo modelo Cessna C550. En efecto, el avión despegó a las 10.07 del Aeropuerto Regional de Statesville y en él viajaban tanto Greg Biffle como su mujer, Cristina Grossu Biffle, y los dos hijos de él, Emma (14, la tuvo con una pareja anterior) y Ryder (5, fruto de su relación con Cristina). El aeropuerto en cuestión es uno de los más frecuentados por compañías de la región que integran el circuito de la National Association for Stock Car Auto Racing (NASCAR), la compañía organizadora de campeonatos de autos de serie más renombrado de los Estados Unidos. Gregory Jack Biffle, nacido el 23 de diciembre de 1969 en Vancouver, estado de Washington, en el noroeste de Norteamérica, apodado "El Biff", logró entre mediados de los noventa y mediados de los 2000 seis campeonatos de distintas series o divisiones de NASCAR; entre ellas la serie Busch. Greg Biffle junto con Donald Trump en el Autódromo Internacional de Daytona, Florida, en febrero de 2025. Foto captura Instagram Su carrera, en rigor, se cimentaba más en la persistencia de Biffle en los distintos eventos de NASCAR que en el éxito en sí. Participó de cerca de 900 pruebas, entre autos y camionetas. Pero justamente por eso "El Biff" era tan querido: su pasión por los autos, su dedicación por la preparación de los mismos para la velocidad, lo hacía un número puesto en eventos de todo el territorio de los Estados Unidos. Este jueves, horas luego de que se conociera la noticia de la muerte del expiloto, NASCAR se pronunció al respecto, extendiendo en las redes sociales el pésame: "La familia de NASCAR está devastada por la pérdida de Greg Biffle, quien fue uno de nuestros 75 mejores pilotos y se hizo conocido por su incansable trabajo humanitario posterior a su carrera". The NASCAR family is devastated at the loss of Greg Biffle, who was one of our 75 greatest drivers and became known for his relentless post-career humanitarian work. We extend our deepest condolences. pic.twitter.com/Q7nh6ug1iW — NASCAR (@NASCAR) December 18, 2025 También le interesaron siempre los aviones y los helicópteros, y por ello se volvió piloto civil privado: era importante poder ser capaz de llegar allí donde hubiera carreras. Desde fines de los 2000 a Biffle comenzó a observárselo acudir en compañía a los eventos de NASCAR y otros del tipo. Primero con Nicole Lunders, con quien finalmente se casó el 17 de octubre de 2007 y con quien tuvo a Emma Elizabeth, nacida el 6 de julio de 2011. Cinco años más tarde, Biffle y Lunders se divorciaron. Cinco años después del divorcio, el 9 de septiembre de 2020, nació Ryder Jack Biffle, fruto de la relación con Cristina Grossu, por entonces su prometida, y desde enero de 2023 su esposa. Greg Biffle en el circuito NASCAR de Fort Worth, Texas, en abril de 2005. Foto AP/ LM Otero Tenía algunos otros pasatiempos: la pesca en aguas abiertas (le gustaban las aguas de México para tales fines), la administración de un autódromo y pista de carreras de otras disciplinas (tenía un establecimiento del tipo en Lebanon, Oregón) y, en su ciudad natal, Vancouver (WA), regenteó durante un tiempo un pub, el "Biffle's Pub and Grill", en el noreste de la localidad. Piloto por tierra, agua y aire: sus días como rescatistas en el huracán Helene Pero ante todo era piloto, oficio que podía más que él. En junio de 2013, la Asociación de Pilotos y Propietarios de Aeronaves de los EE. UU. (AOPA, por sus siglas en inglés) retrató a Biffle en su artículo "Los pilotos de NASCAR también vuelan" como propietario y piloto de tres jets corporativos (un Cessna 210, un Dassault Falcon 10 y un Dassault Falcon 50) y un helicóptero (un Bell 210). Autos, aviones y hasta barcos forman parte de sus publicaciones en las redes sociales. Había forjado otro tipo de carrera, como youtuber, con un canal propio en el que compartía la trastienda de pruebas automovilísticas en el interior de Estados Unidos. En septiembre y octubre de 2024 su nombre volvió a ser citado luego del paso del huracán Helene, con sus consecuentes tormentas tropicales. Biffle, que poseía para esa fecha una tienda en Mooresville, a pocos kilómetros de Charlotte, la capital de Carolina del Norte, colaboraba para ese entonces con la Operación Helidrop, un escuadrón de pilotos de helicópteros entrenados para volar hacia zonas remotas y de difícil acceso para entregar suministros en situaciones de devastación, como ocurrió durante el paso del huracán Helene. En un video que se viralizó durante las horas posteriores de las tormentas tropicales mostraba a Biffle pilotando un helicóptero sobre un monte de 1.200 metros y diciendo a la cámara: "Estamos en esa zona buscando gente, están poniendo X en sus patios o escribiendo SOS en el suelo con lo que puedan encontrar. Llevamos insulina, antialérgicos, fórmula, pañales, comida, agua, motosierra y gasolina". Biffle junto con un Ford Mustang en un evento NASCAR. Foto captura Instagram Este jueves a las 10.15 en Statesville, apenas ocho minutos después del despegue y en el marco de una neblina pronunciada y una suave llovizna, el Cessna C550 en el que viajaba Biffle, su esposa y sus dos hijos, y que originalmente se dirigía hacia el sur, a Sarasota (Florida), debió retornar de emergencia hacia el aeropuerto de Statesville debido a desperfectos técnicos.
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