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» Radiosudamericana
Fecha: 16/12/2025 17:42
Martes 16 de Diciembre de 2025 - Actualizada a las: 16:01hs. del 16-12-2025 SALUD La llegada de las festividades de fin de año y el uso masivo de pirotecnia reavivan el debate sobre su impacto en la salud de las personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA). Las explosiones, lejos de ser solo un ruido molesto, son descritas como un estímulo agresivo, impredecible y estridente que tiene consecuencias físicas y psicológicas severas. La llegada de las festividades de fin de año y el uso masivo de pirotecnia reavivan el debate sobre su impacto en la salud de las personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA). Las explosiones, lejos de ser solo un ruido molesto, son descritas como un estímulo agresivo, impredecible y estridente que tiene consecuencias físicas y psicológicas severas. Salomé Messa Torres, activista neurodivergente dialogó con Ahora Noticias Chaco y comentó que el uso de la pirotecnia en las fiestas es una cuestión de salud pública y que provoca dolor y sufrimiento en personas dentro del espectro autista, con o sin diagnóstico. “La pirotecnia es un estímulo que es impredecible y repentino y agresivo es sonoro, estridente y tiene un impacto grave en la salud de las personas del espectro autista porque no tenemos la capacidad de determinar si el peligro es inminente, si está lejos o cerca”, señaló. Salomé detalló que ante este estimulo “se activa esa respuesta primitiva que tiene que ver con la defensa”. “La persona empieza a tener sudoración, parálisis, taquicardia, ataques de epilepsia y entre en una crisis severa, porque el cuerpo quiere huir de una situación posiblemente peligrosa. Y para salir de esa situación puede durar días”, sostuvo. En ese sentido, la activista pide a la comunidad que se tome conciencia del sufrimiento que se provoca e hizo hincapié en la necesidad de que se aborde como una cuestión de salud pública. “Nosotros intentamos sensibilizar a la comunidad a cerca de la importancia del acompañamiento que se entienda que es una cuestión de salud pública la contaminación sonora y el sufrimiento que se ocasión a una parte importante de la sociedad”, expresó. Consecuencias físicas Salomé, detalló que “el impacto es grave para la salud de las personas del espectro autista". La característica sorpresiva y el volumen del estallido activan instintos primarios de supervivencia en las personas con TEA, ya que no pueden determinar si la fuente del ruido está lejos o si representa un peligro cercano e inmediato. "Se activa esa respuesta primitiva primera que tiene que ver con la defensa y hace que la persona empiece a tener una serie de sustancias que hace que el cuerpo responda de una manera real", explicó. Las consecuencias de esta respuesta no son solo psicológicas; se manifiestan físicamente, llevando al individuo a una crisis severa. Entre las reacciones reportadas se encuentran: Sudoración excesiva, parálisis o inmovilidad, taquicardia y en casos extremos, puede desencadenar epilepsia. “El cuerpo, al querer huir de una situación posiblemente peligrosa que percibe como real, entra en un estado de estrés máximo. La recuperación de estas crisis es un proceso largo y agotador. Para salir de esa situación puede durar días", advirtió.
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