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Parana » Radio Nacional
Fecha: 16/12/2025 16:24
La historia de un adolescente de 14 años que vive en Rosario generó una respuesta inédita en todo el país, luego de que un video difundido en redes sociales despertara una ola de solidaridad. Más de 500 familias se anotaron con la intención de adoptarlo, tras conocer su deseo de tener una familia para las fiestas de fin de año. Mali Paoletti, defensora de Niños, Niñas y Adolescentes de Rosario, dialogó en comunicación con Ramos generales y explicó que la repercusión del caso puso en evidencia tanto la enorme empatía social como la necesidad de seguir trabajando en los procesos de adopción de adolescentes, un grupo que históricamente enfrenta mayores dificultades para encontrar un hogar definitivo. "Hay que modernizar algunos protocolos que son del siglo XX y hay que tener una escucha activa hacia los adolescentes", expresó. El adolescente, conocido públicamente como Nata, atravesó una infancia marcada por situaciones de violencia, abuso y abandono. A los siete años fue separado de su familia de origen por episodios graves que derivaron en la intervención de la Justicia. Tras la detención de su madre y nuevas situaciones de maltrato bajo el cuidado de su padre, el niño pasó por distintos entornos familiares sin lograr una estabilidad sostenida. En 2021 se intentó una revinculación con su madre, luego de su liberación, pero el proceso no prosperó. Finalmente, en 2024, la propia madre manifestó ante la Justicia su decisión de que el adolescente sea dado en adopción. Desde entonces, el joven reside en un centro residencial de la ciudad de Rosario. "Como sociedad nos hace reflexionar que hay 130 convocatorias públicas vigentes en similares condiciones a las de Nata y posiblemente la gente no lo sabe", dijo Paoletti. Pese a la tristeza y la soledad que atraviesa, el adolescente decidió grabar un video en el que expresó su deseo de tener una familia, especialmente de cara a la Navidad. La publicación se viralizó rápidamente y generó una respuesta masiva de personas y familias dispuestas a ofrecerle un hogar. Desde la Defensoría de Niños, Niñas y Adolescentes aclararon que, si bien la cantidad de inscriptos es un hecho conmovedor, los procesos de adopción requieren evaluaciones profundas, tiempos judiciales y un acompañamiento profesional que garantice el interés superior del niño.
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