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» Clarin
Fecha: 16/12/2025 12:50
En un selecto desayuno con inversores, empresarios y banqueros en el tambien selecto Palacio Duhau, el fondo Black Toro, presentó sus proyecciones. Se trata de un fondo con sede en Miami, la Wall Street del Sur, como describió Gabriel Ruiz, presidente de Black Toro que nació en 2022 y que tiene en su staff a economistas como Fernando Marengo, entre sus consejeros a Ricardo Arriazu junto a celebridades de los mercados de EE.UU. y entre sus accionistas, a la tercera generación de la familia Pescarmona. Black Toro, además, piensa reforzar presencia en el país con la compra de la parte del Banco de Valores en la sociedad de inversión conjunta BT Valo. Otros de sus miembros son Yael Malick, Gloria Patrón Costa y Santiago Solanet, por nombrar algunos. En el que fue un clima casi íntimo, uno de los asistentes contó, “tengo empresa pero no tengo negocios”. Otro advirtió por el cierre de compañías y destrucción de empleo. Juan Bruchou, de Brubank, quiso saber qué puede pasar con el consumo. Y uno más hizo hincapié en lo que harán los gobernadores. Ricardo Arriazu, uno de los economistas más escuchados por el círculo rojo, soltó “los planetas se están alienando para que 2026 que sea un gran año, siempre que no choquemos la calesita, por errores de la política económica”. Se mostró crítico con las últimas medidas. “Son una tontera, pero moderada”, en obvia alusión a la indexación de la banda cambiaria como definió. “Hay buen clima, un resultado electoral contundente, cosecha con record histórico, subió el precio del oro, litio aumentó 17% su cotización en los últimos dos meses. Todo está alineado. Pero se puede chocar la calesita y que la gente salga corriendo a comprar dólares. Esa posibilidad es baja pero no es cero”. Ricardo Arriazu Respecto al cambio de la política monetaria señaló: “Soy enemigo de las bandas, cuando se mueve el dólar se mueve todo. Antes de las bandas con el ajuste (crawling) se compraron US$ 25.000 millones en reservas, la actividad creció al 11%, y con la la banda se duplicó el riesgo, hay más inflación, y no compraron un dólar de reservas”. En su visión, el nuevo esquema genera incertidumbre en el tipo de cambio. “ La incertidumbre tiene un costo”, insistió. Enfatizó en la importancia de la ayuda de EE.UU. al recordar una clásica leyenda de JP Morgan, el banquero de EE.UU. que salió a caminar junto a un colega en medio de una corrida y que cuando los vieron juntos, esa corrida se frenó. “Argentina estaba en el medio de la pulseada y llegó la caballería de EE.UU. nos dieron un swap de US$ 20.000 millones, en el Tequila de 1995 solo fueron US$ 1.000 millones. Y es un swap que no tiene nada que ver con el de China, que dibuja las reservas. Este es de libre disponibilidad, y lo tengo para cuando lo necesite. Para qué, para los problemas de liquidez como la apuesta contra el peso y el pago de la deuda”, amplió. “Las elecciones fueron una sorpresa para todos. Milei no solo consiguió un tercio en las dos cámaras, sino los suficientes votos. El presupuesto va a Extraordinarias, hace tres años que no había un presupuesto y se envió la reforma laboral y la ley de glaciares, clave para lo minería”, soltó. De paso, recordó que la deuda de mercado de la Argentina es baja respecto del PBI, apenas 19%. “Sin embargo, Argentina debe ser el único país que con buenos números macro tiene 10 veces el riesgo país que Uruguay y Paraguay, por nuestro prontuario. La gente quiere saber qué vamos a hacer, si vamos a pagar la deuda. Show me the money. Pero esta vez es distinto, por no tener déficit”. También analizó que desde el resultado de ganar las elecciones, las tasas cayeron y eso “es ganar la apuesta”. En la visión de estos economistas, el volumen de cosecha será record historico, de US$ 7.700 millones más que 2025, en energía, un sector que en 12 meses liquidó divisas por US$ 10 mil millones, hay buenos augurios. Incluso arriesgaron que en turismo el déficit será menor. “Si se llega a cero, se frena el deterioro de la cuenta corriente”, soltaron. Arriazu destacó que los argentinos compraron US$ 30 mil millones desde que ase abrió el cepo, y de esa cifra, 6.500 millones en octubre. “Cada dólar es un dólar menos de gasto agregado. Hace 15 años que no se invierte, hay capacidad ociosa. El problema es la confianza, que gaste e invierta dentro del país,”. En cuanto a las proyecciones, estima en $ 1.680 el techo de la banda en diciembre de 2026. 19% de inflación, 4,8% de crecimiento en 2025, 5,9% en 2026. Fernando Marengo En la previa, Fernando Marengo trazó un escenario de un mundo que crece menos, con precios de materias primas estables. En su proyección el mundo crece, 3,1%, Estados Unidos, 2,1%. “En cuanto a los metales, hay tendencia al alza con el oro por el escenario de incertidumbre y beneficiado por la diversificación de portafolios. La cotización del oro arrastra a otros minerales. Hay riesgos por la geopolítica y se puede terminar en un aterrizaje fuerte”, señaló. Eso sí resaltó el cambio de ciclo político en la región, con “gobiernos pro mercado”. Hacia el final Arriazu se refirió a la Argentina como el país de las oportunidades perdidas. Y confesó que antes de las bandas cambiarias asignaba un 70% de posibilidades de éxito al plan económico. -Y ahora, se le preguntó
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