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» Clarin
Fecha: 15/12/2025 00:42
Brand Studio para IPCVA ¿Existe algo más argentino que las milanesas? Ese aroma familiar que sale de la cocina y nos devuelve a la mesa de las abuelas, a la fuente humeante en el centro y a la pelea por “la más grande”. Pero imaginá ahora una versión distinta: rellena de quesillo salteño, rebozada en quinoa especiada y acompañada con papines dorados, mote y una mayonesa de ají que despierta todos los sentidos. Un clásico de siempre, sí, pero con un giro norteño que sorprende y se vuelve inolvidable. La autora de esta receta es Jimena Gómez, salteña de nacimiento y uno de los nombres más queridos de la cocina en redes sociales. Con más de 900 mil seguidores en Instagram y 778 mil en TikTok, Jimena construyó una comunidad enorme a partir de algo simple: cocinar como se cocina en casa. En su cuenta @made_in_casa, sus seguidores encuentran platos fáciles, accesibles, con pocos ingredientes y ese toque del norte que distingue su estilo. Su forma de enseñar —directa, cálida y sin vueltas— la convirtió en referente de quienes buscan recetas reales, posibles y con sabor a hogar. La autora de esta receta es Jimena Gómez, salteña de nacimiento y uno de los nombres más queridos de la cocina en redes sociales. En esta ocasión, la receta tiene un protagonista claro: la nalga, uno de los cortes más valorados para hacer milanesas. Magra, pareja y con fibras finas, es perfecta para lograr un rebozado parejo y una cocción pareja. Además, es un corte flexible, ideal para versiones rellenas como esta, donde se necesita una textura tierna y firme al mismo tiempo. La nalga es uno de los cortes más valorados para hacer milanesas. Magra, pareja y con fibras finas. Según estudios de mercado que lleva adelante el IPCVA (Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina), la milanesa es la forma de preparación preferida por los argentinos. Y esta versión rellena lo reafirma porque combina técnica, sabor y ese espíritu casero que vuelve a la carne argentina un ingrediente capaz de lucirse en cualquier mesa. Esta milanesa rellena es un ejemplo perfecto de ese ADN gastronómico que nos caracteriza. Y si creías que la magia estaba solo en el quesillo derretido o en la quinoa crocante, esperá a ver el acompañamiento. Los papines blanqueados y dorados suman textura y sabor, el mote aporta un guiño ancestral y la mayonesa de ají le da ese picor amable tan propio del norte. El resultado es un plato completo, generoso, bien argentino, pero con un twist regional que lo distingue del resto. Esta versión norteña demuestra por qué la milanesa sigue siendo uno de los platos más queridos del país Ingredientes Milanesas de nalga parejas Sal, pimienta y especias Ajo Quesillo salteño Huevos Pan rallado Quinoa cocida Pimentón Aceite Papines Mote cocido Romero Ají amarillo 1 taza de mayonesa Verdeo picado Preparación Elegí bifes de nalga lo más parejos posible y condimentalos con sal, pimienta, ajo y tus especias preferidas. Tomá los más grandes, colocá en el centro una buena cucharada de quesillo y cerralos como si fueran un libro. Presioná suavemente los bordes con un martillo de cocina para sellarlos y llevá las milanesas un rato al freezer para que tomen firmeza. En un bowl, mezclá huevos con especias. Pasá cada milanesa por la mezcla y luego por una combinación de pan rallado y quinoa cocida. Presioná bien para que se adhiera. Volvé a llevarlas al freezer: este paso asegura un rebozado mucho más crocante. Cocinalas en aceite caliente hasta dorar o, si preferís una opción más liviana, lleválas a un horno fuerte. Las dos alternativas funcionan muy bien. Para los acompañamientos, blanqueá los papines junto con el mote (que ya viene cocido). Luego pasalos a una sartén con aceite o manteca, sumá sal, pimienta y romero, y doralos hasta que queden bien crocantes. Sumá el mote y reservá. Para la mayonesa, hidratá el ají amarillo en agua caliente y procesalo con una taza de mayonesa hasta lograr una crema suave. El resultado es un plato completo, generoso, bien argentino, pero con un twist regional que lo distingue del resto. Serví la milanesa rellena en el centro del plato, rodeada de los papines y el mote, coroná con la mayonesa de ají y terminá con verdeo picado. Al final, esta versión norteña demuestra por qué la milanesa sigue siendo uno de los platos más queridos del país: es abundante, casera, adaptable y capaz de adoptar nuevos sabores sin perder su espíritu. Sobre la firma Brand Studio Bio completa
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