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» Elterritorio
Fecha: 08/12/2025 12:04
Gabriel Kobernick terminó segundo en la Clase N6 del rally, categoría donde se consagró campeón. Además, ganó el campeonato Absoluto en Aristóbulo del Valle. En el karting de tierra en Campo Grande, fue tercero en la última fecha de la Estándar y alcanzó el subcampeonato. “Fue impensado, si se planeaba no salía”, dijo entre risas. lunes 08 de diciembre de 2025 | 8:50hs. En el automovilismo hay miles de historias de pilotos apasionados, que hicieron cualquier cosa por correr, pero la de Gabriel Kobernick supera cualquier limite imaginado. El piloto de Hipólito Yrigoyen, hizo algo que en Misiones nunca había pasado. Hacer podio en el Campeonato Misionero de Rally y en el Campeonato Misionero de karting en circuito terrado en dos ciudades distintas y en menos de una hora. Sí, así como lee, de no creer. Gabriel Kobernick tuvo un año soñado y fue uno de los pocos pilotos que hizo todo el Campeonato Misionero de Rally y todo el calendario del Misionero de Karting en circuitos terrados. En los dos anduvo tan bien que en la mayoría de las carreras hizo podio y eso hizo que llegue con chances en ambos campeonatos a la última fecha. En el rally se consagró campeón de la N6 faltando una fecha, pero debía estar en la última fecha y correr un tramo para cumplir con el Reglamento Deportivo. Claro que sus buenas actuaciones lo llevaron a pelear por el título del campeonato Absoluto, que premia al piloto que más sume entre todas las categorías. Así que tenía que correr toda la fecha para que sus rivales no lo puedan alcanzar en el Absoluto. En el karting terrado, tuvo una gran regularidad y siempre estuvo entre los cinco primeros de la categoría Estándar –la más numerosa y la más competitiva - y llegó a la última fecha como escolta y el único rival que le podía quitar el título al apostoleño Benicio Tomasino. Pero, los calendarios se complicaron con las lluvias de noviembre que afectaron a Misiones y la definición del karting terrado coincidió con la finalización del Misionero de Rally. Las dos competencias se realizaron el fin de semana en dos localidades separadas por tan solo 20 kilómetros (el Rally en Aristóbulo del Valle y el karting terrado en Campo Grande). De la decepción a los festejos Kobernick, primero habló con ambas directivas para ver si se podían modificar los cronogramas, pero encontró negativas y tuvo que elegir. Así resolvió ir al rally para cumplir con el reglamento para ser coronado campeón en la N6 y pelear por el título del Absoluto. En la previa, hasta llegó a declarar el viernes previo a ambas carreras sentirse decepcionado por no ser escuchado por los directivos para buscar alternativas y que el pueda estar en ambas definiciones. Pero aquel clima que hizo coincidir los calendarios, le tenía preparado un guiño inesperado del destino, que hizo cambiar sus planes originales. Es que la intensa ola de calor del sábado hizo que las actividades del karting en Campo Grande se modifiquen. Así, la clasificación y todas las series se corrieron de noche aprovechando la iluminación del Kartódromo Mauro Nichueda. Así, Kobernick arrancó el sábado a las 6 de la mañana repasando la hoja de ruta del rally y desde las 10, corrió la primera etapa del Gran Premio Coronación del rally por los caminos de Aristóbulo del Valle y Salto Encantado, donde terminó segundo en la Clase N6. Pese al intenso calor y luego de entregar el auto en Parque Cerrado, cerca de las 16, se fue hasta el taller en Hipólito Yrigoyen, sobre la ruta nacional 12, buscó su karting, y se fue a correr a Campo Grande, en la zona centro, donde salió a pista sin entrenar y directamente a clasificar pasadas las 21. Fue tercero en la clasificación del Grupo A de la Estándar, detrás del campeón Tomas Alcaraz y del líder del campeonato Benicio Tomasino. Ya en la madrugada del domingo disputó la segunda serie de la Estándar y fue segundo detrás de Tomasino, quien se consagró campeón y le quitó la posibilidad a Kobernick de coronarse. Eran las 1.30 del domingo y recién terminaba un día cargado de adrenalina para el piloto de Hipólito Yrigoyen, que recién se fue a dormir cerca de las 3 en Aristóbulo del Valle. El domingo, a las 8.35 ya estaba en el Parque Cerrado para retirar su auto de rally y desde las 10 salió a correr la segunda etapa del rally. Pese al intenso calor y a los caminos muy sueltos, mantuvo el segundo lugar de la N6, sumando el primer podio del día. Con los puntos sumados alcanzó el título de la N6 y del Absoluto de Rally. A las 14, entregó el auto en Parque Cerrado, donde terminó la carrera de rally, salió corriendo, agarró su camioneta, sin sacarse el buzo, y media hora después estaba en Campo Grande saliendo a pista para correr la final de la Estándar, que se había atrasado en su inicio porque tuvieron que regar la pista terrada. Claro que entre tanto ida y vuelta algo se iba a olvidar y su navegante de rally Mathias Brettin tuvo que viajar de urgencia a Campo Grande ya que Kobernick se había olvidado del Pasaporte Técnico del Karting (documento obligatorio al ingresar a la revisión técnica posterior a la carrera). Kobernick largó la final desde la cuarta posición y en una pista muy suelta y ante un intenso calor logró avanzar una posición y terminó tercero en la categoría Estándar, logrando así, en menos de una hora dos podios en dos disciplinas distintas en dos ciudades distintas, algo único y que nunca había pasado en Misiones. Festejos en ambas ciudades Pero los viajes aún no habían terminado. Y llegó la hora de los festejos. Kobernick volvió a Aristóbulo del Valle y se subió al podio de la N6 para recibir su trofeo de a carrera junto a su navegante y a su familia y amigos del rally. Dejó el auto en la revisión técnica del rally y se volvió a Campo Grande. No pudo estar en la foto del podio de la carrera, pero llegó para recibir el trofeo por el subcampeonato de la Estándar, ya que la Federación Karting de tierra entregó los trofeos del campeonato en la tarde del domingo como cierre de sus actividades del año y los pilotos deben estar presentes para recibir sus trofeos de los tres primeros del campeonato o sino pierden el derecho a reclamar el trofeo según marca el reglamento deportivo. “Un fin de semana de locos, impensado que se podía dar porque coincidían los horarios de los dos eventos, pero que se fueron acomodando por razones del calor y del tiempo. Cuando me entero que se cambiaron los horarios del karting y que se corría de noche, me fui a buscar el karting a casa, llegue me anote, todos me miraban de que estaba haciendo ahí porque pensaban que no iba a correr. Salí a la pista sin entrenar sin saber cómo estaba el karting, clasifiqué, anduvimos bien corrí la serie, terminamos de madrugada, pero todo se dio a la perfección el sábado”, contó. “El domingo corrí el rally se cumplieron los horarios terminamos la carrera en hora y me bajo del auto y me avisan que se atrasó la final del karting, así que me fui corriendo, agarre la camioneta, como largada cuarto quería hacer podio, llegué con lo justo. Corrí la final, hicimos podio, no me pude quedar al podio de la carrera del karting, porque tenía que volver al rally para recibir el trofeo de la carrera del rally así que tuve que volver a Aristóbulo y después tuve que volver a Campo Grande para recibir el trofeo del subcampeonato del karting. Fue un fin de semana de locos, por suerte el físico aguantó bien, pese a que dormí poco. Por suerte mis mecánicos, mis amigos y la familia me hicieron el aguante en ambos lados. Fue Impensado, si se planeaba no salía –dijo entre risas - fue una locura, pero muy feliz de poder lograrlo”, agregó el piloto de Hipólito Yrigoyen. El último viaje de Kobernick empezó en Campo Grande con su karting y el trofeo en su camioneta, con una parada en Aristóbulo del Valle, donde enganchó su VW Gol Trend de rally, cargó su trofeo del rally y volvió a su casa en Hipólito Yrigoyen donde llegó pasadas las 22 del domingo. Kobernick durmió con una sonrisa y tres trofeos impensados antes de arrancar el fin de semana.
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