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Parana » 2 Florines
Fecha: 08/12/2025 00:37
Se trata de una nave industrial “futurista” con más de 6.000 metros cuadrados. Lautaro y Sebastián Bourdin, segunda generación de la empresa del Parque Industrial de Paraná, se pusieron al frente del proyecto, en el marco de un proceso de innovación y mejora de calidad sustentable con fuerte inversión en tecnología. Por Nahuel Amore Petropack, empresa de diseño y fabricación de envases flexibles, avanza aceleradamente con la construcción de su quinta planta productiva en el Parque Industrial de Paraná. Según destacan los jóvenes directivos Lautaro y Sebastián Bourdin, segunda generación de la compañía, se trata de una nave industrial “futurista”, que prevé incorporar tecnología de vanguardia para automatizar procesos y sumar 100 puestos de trabajo cuando se ponga operativa. La inversión inicial ronda los 10 millones de dólares y se fundamenta en la política empresaria de innovación continua para ser más competitivos y así consolidarse como líderes en el sector. “La transformación hacia menores costos y menor impacto ambiental merecen esa inversión constante, para tener tecnología de vanguardia y seguir haciendo envases de primer nivel internacional”, destacó Lautaro Bourdin, director de Sustentabilidad, en entrevista con DOS FLORINES. Al respecto, el joven –hijo de Gabriel Bourdin, socio fundador de Petropack–, valoró que la firma es capaz de realizar desde Paraná envases que se hacen en Europa y, en algunos casos, mejores en calidad. Para ello, destacó que el proyecto contempla la inversión en tecnología de punta, que permitirá avanzar incluso en mayor automatización. Incluso, en el mediano plazo, anticipan que permitirá “crear productos que antes se importaban y hacerlo de manera nacional, sumando competitividad“. Inversión Lautaro Bourdin, director de Sustentabilidad, y Sebastián Bourdin, director Comercial, son primos; hijos de Gabriel y Alcides Bourdin, los hermanos que fundaron Petropack en 1986. La nave industrial se levanta sobre calle Walter Grand, a metros de Avenida Almafuerte. En total serán 6.000 metros cuadrados cubiertos, de los cuales en una parte contará con más de 20 metros de altura para las extrusoras de blow y otra parte de 12 metros de altura donde prevén un end of the line con una “mirada futurista”. “A futuro pensamos en una gran automatización en algunos procesos, más allá de que somos una industria manufacturera que demanda necesariamente mucho personal”, valoró Sebastián Bourdin, director Comercial, hijo de Alcides Bourdin, quien detalló que la estructura de la planta implica U$S 2 millones, a lo que se suma la primera máquina por U$S 4 millones más y diferentes inversiones en tecnología y puesta a punto que ascienden la inversión inicial en U$S 10 millones. Consultado por los plazos previstos para ponerla en funcionamiento, anunció: “Arrancaríamos en enero a armar la primera máquina, con lo cual para principios del segundo trimestre de 2026 estaríamos produciendo y abasteciendo a las otras plantas de Petropack, con un material de última generación”. El joven industrial destacó la importancia de apostar por la industria nacional, desde una impronta de mayor eficiencia y producción de calidad para el mercado interno y externo de la región. “Para poder competir contra Brasil, Perú, Colombia, Paraguay o Chile, es clave ser eficientes y crear productos de calidad”, insistió, y añadió: “Lo mismo que hacemos con las máquinas para tener una producción de vanguardia y de punta, lo tenemos que hacer con el end of the line, que tiene que ver con la logística interna y con la capacitación profesional de nuestros colaboradores”. Importancia del capital humano Ambos directores también destacaron la importancia del capital humano. “Estimamos que cuando esté lista la planta, va a sumar 100 puestos de trabajo a los 660 que hoy tenemos”, sostuvo Lautaro, al tiempo que avizoró que “el nivel de conocimiento va a aumentar” entre los trabajadores que son parte de la firma. Por otro lado, valoró la impronta que tanto él como sus hermanos y sus primos están promoviendo a través de diferentes acciones propias de los tiempos actuales. “Tenemos un equipo profesional de excelencia, con lo cual la llegada de la segunda generación hace que la dirección cambie un poco y se sustente mucho más en el equipo. Resaltamos a los excelentes profesionales que hay”, expresó, y destacó que a los jóvenes los apasiona producir más, tecnificarse y “dar valor agregado a nuestros colaboradores, al país y a la economía de la región”. Asimismo, recordaron que la segunda generación ya había sido la que motivó la planta cuatro. De todos modos, destacó otros proyectos como la profesionalización del Directorio que están implementando o la transformación digital que impulsa Sebastián desde una lógica de “mayor eficiencia y menor error humano”. “No se suplantan los humanos, sino que se complementan y potencian para producir con menos errores y desvíos de calidad. Eso lo empezamos desde la mitad de este año”, indicaron. Desafíos a 10 años —Como jóvenes industriales, ¿qué los motiva a invertir en la industria nacional en momentos donde quizá otros prefieren guardarla, gastarla o especular? —SB: A la segunda generación nos motiva invertir en la industria nacional porque somos jugadores muy importantes dentro del rubro de envases flexibles. La planta cinco viene a redefinir varios de los envases que usamos hoy día a día para que sean mejores y más amigables con el medio ambiente, atendiendo a la reciclabilidad. —¿Desde una mirada sustentable que se impone como necesaria en el mundo? —SB: La planta cinco viene a cambiar estructuras de envases en pos de la reciclabilidad del envase. Desde ahí sacamos la motivación. No sólo cambiamos cómo vive la gente y los envases que usa, sino también la calidad de vida de la gente; que el producto que consumen llegue en las mejores condiciones a su heladera o alacena. Ser parte de ese cambio y liderar el futuro, es motivador para nosotros. —¿Cómo se ven hacia delante dentro de 10 años? —LB: Estamos constantemente preguntándonos si la misión y la visión deberían cambiarse. Hoy en tendencias europeas se habla también de propósitos. Como siempre remarcamos, las empresas que vemos el futuro, tenemos la responsabilidad de liderarlo. El compromiso de SBTI (Science Based Targets initiative) plantea metas a 10 años. A 10 años, nos vemos como la compañía productora de envases flexibles más sustentable de la región, más innovadora. De hecho, ya tenemos una primera patente que estamos internacionalizando. Buscamos también aumentar el índice de reciclado. El techo está muy alto porque en 2024 se recicló el 17% de los plásticos. En 10 años pensamos construir otra planta de reciclado, porque son máquinas muy grandes. Siempre apostamos al crecimiento y al desarrollo de innovaciones para darle calidad de vida a la gente con sus alimentos.
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