04/12/2025 03:37
04/12/2025 03:36
04/12/2025 03:36
04/12/2025 03:36
04/12/2025 03:36
04/12/2025 03:35
04/12/2025 03:35
04/12/2025 03:35
04/12/2025 03:34
04/12/2025 03:34
» Radio Sudamericana
Fecha: 04/12/2025 02:52
Miércoles 03 de Diciembre de 2025 - Actualizada a las: 18:47hs. del 03-12-2025 INFOGRAFÍA Los últimos movimientos legislativos dejaron a la Cámara de Diputados virtualmente partida en dos. Javier Milei logró hacerse de la primera minoría con un bloque libertario de 95 diputados, superando por dos escaños al PJ, que quedó con 93 integrantes. Entre ambos polos se ubican los bloques intermedios, que serán determinantes para inclinar la balanza en cada votación. El oficialismo, conducido por el presidente de la Cámara, Martín Menem, deberá reunir 34 voluntades para alcanzar el número necesario que le permita abrir el recinto e imponerse en las votaciones. El PJ, por su parte, necesitará 36 votos adicionales. Es un cambio drástico respecto del escenario previo a la renovación parlamentaria: La Libertad Avanza tenía entonces 37 diputados y el peronismo 98. El crecimiento libertario no sólo incrementó su volumen propio, sino que además profundizó la fragmentación del resto de las fuerzas. El PJ perdió ayer, durante su última reunión de bloque, a tres legisladores catamarqueños alineados con el gobernador Raúl Jalil, quien venía dando señales de distanciamiento. Su salida cristalizó el rechazo a la conducción de Cristina Kirchner, a la que varios gobernadores acusan de priorizar los intereses del AMBA por encima de los del interior. Los libertarios también ampliaron su fuerza a costa de sus aliados. A los 80 diputados que habían quedado tras las últimas elecciones, sumaron 14 más: nueve provenientes de Pro, tres radicales “peluca”, la santafesina Verónica Razzini y Francisco Morchio, de Encuentro Federal, aliado al gobernador entrerriano Rogelio Frigerio. La sangría de Pro, presidido por Cristian Ritondo, tampoco terminó ahí. Tras los pases de Sergio Capozzi (Río Negro) y José Núñez (Santa Fe) a Provincias Unidas, el bloque quedó reducido a 12 miembros. El radicalismo quedó reducido a seis legisladores, tras un proceso de desgranamiento progresivo. Inició la gestión de Milei con 34 diputados, pero se fracturó en cuatro espacios: la UCR, Democracia, la Liga del Interior -los llamados “pelucas”- y el monobloque Unidos, de Mario Barletta. En la antesala de la sesión preparatoria sufrió una última baja: Karina Banfi, que formará un bloque independiente. En una jugada de último minuto, Pro, la UCR, el MID, Banfi y el santacruceño aliado del gobernador Claudio Vidal, sellaron una alianza precaria. Sin siquiera un nombre que los congregue, anunciaron un interbloque de 22 diputados unidos por puro pragmatismo con la mira puesta en tener un lugar en las mesas de discusión. Provincias Unidas nuclea principalmente a legisladores que responden a los gobernadores Martín Llaryora (Córdoba), Ignacio Torres (Chubut), Carlos Sadir (Jujuy) y Maximiliano Pullaro (Santa Fe). Al filo del inicio de la sesión preparatoria, juntaron en total 22 diputados. Sumaron en un interbloque a Mónica Frade y Maximiliano Ferraro, de la Coalición Cívica, y a Miguel Pichetto y Nicolás Massot, de Encuentro Federal. Otro polo de poder clave serán los gobernadores peronistas distanciados del kirchnerismo. Los salteños de Gustavo Sáenz y los misioneros de Hugo Passalacqua permanecerán en el bloque Innovación Federal, con siete diputados. Actuarán coordinados con los tucumanos de Osvaldo Jaldo, los catamarqueños de Jalil y la neuquina de Rolando Figueroa. A ellos podrían sumarse dos legisladores que responden al sanjuanino Marcelo Orrego. En conjunto, reúnen 16 escaños. Resta aún un grupo disperso de cinco legisladores repartidos en bloques minoritarios. Se trata de los exlibertarios de Coherencia -ahora con tres diputados tras la salida de Arrieta-, un diputado referenciado con el exgobernador puntano Alberto Rodríguez Saá que rechazó sumarse al PJ, y la cordobesa Natalia de la Sota, que conservará su sello propio.
Ver noticia original