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» Elterritorio
Fecha: 01/12/2025 07:06
Se trata de la primera anidada en esa reserva de esta pareja de aves, que dio además dos pichones. Fue el investigador Martjan Lammertink quien hizo el hallazgo. domingo 30 de noviembre de 2025 | 1:00hs. La foto, producto de la paciencia. //Foto: Martjan Lammertink. El Parque Provincial Araucaria marca un hito en más de 34 años de conservación del bosque como área protegida, lugar en el que habitan cientos de aves junto a las copas de las araucarias y otros árboles de gran porte. Se trata de un acontecimiento que genera orgullo: registraron que por primera vez anidó una pareja de carpintero cara canela dentro del parque. El investigador holandés Martjan Lammertink compartió con El Territorio que de exitoso nido volaron dos pichones. Lammertink, biólogo e investigador en el Instituto de Biología Subtropical (Unam-Conicet) de Puerto Iguazú, desde 2011 realiza investigaciones sobre esta ave en Misiones con hallazgos sorprendentes y favorables para ayudar a la especie que se encuentra en peligro de extinción. Sus trabajos son específicamente en San Pedro y el departamento de Guaraní. Entre los distintos sitios en donde casi de manera permanente observa con mucha paciencia, sutileza y profesionalismo el comportamiento del cara canela, está el Parque Provincial Araucaria, donde en julio de este año por primera vez se vio a un macho y una hembra de carpintero cara canela en época de formación de parejas. “Estos dos hicieron pareja y tuvieron un nido exitoso del cual volaron dos pichones hembras el 11 de noviembre de 2025”, confirmó Lammertink. “Vivimos pegados al parque, pero nunca con la esperanza de que íbamos a tener al cara canela detrás de la casa porque es una reserva chiquita y un poco aislada”, contó el biólogo en catorce años muy pocas veces escucho vocalizar a dicha ave. De las pocas veces que lograron registrarlo ocurrió fuera de la época de reproducción, en verano, otoño o principio de invierno, pero nunca entre julio y noviembre. Por lo que contó con detalles cómo fue el avistaje que se da de forma inédita: “Fui ese domingo al parque a la mañana para realizar un conteo de pájaros y a lo lejos oí un cara canela cantar, corrí en esa dirección y al final lo pude ver”, expresó. Avistaje y monitoreo El pájaro estaba en un árbol casi sin hojas con la luna de fondo y eso lo captó en una fotografía, que además le permitió identificar que se trataba de un macho. “Me puse contento, me pareció curioso que ande perdido un cara canela cuando es tiempo que busquen pareja, en la época de reproducción. Pero dos días después lo vi nuevamente y estaba con una hembra, lo que se puso muy interesante”. Desde ese momento comenzó una nueva aventura para investigar: si efectivamente se trataba de la primera vez que anidarían en el parque. Invirtió mucho tiempo en seguirlos, buscando en qué zonas iban a anidar. “Fui 71 mañanas tempranito para buscarlos, algunas veces pasaban tres semanas sin verlos y volvían a aparecer. Cerca de la fecha que volaron los pichones recién pude confirmar que tenían el nido con dos pichones”, precisó. Sobre la importancia de esta ave, señaló que “es muy alentador ver que en una reserva tan chiquita y perturbada como estaba el parque y luego de 34 años, con todas esas chances que le dieron al monte para recuperarse llegó a las condiciones para que el cara canela pueda anidar. Es muy lindo, es un ejemplo de que se puede lograr”. El carpintero cara canela (Celeus galeatus) es una especie de pájaro carpintero amenazada porque depende de áreas de Bosque Atlántico en buen estado de conservación, donde encuentra árboles viejos como laureles con ramas y troncos podridos para excavar sus nidos, o de árboles como la grapia, guatambú y rabo itá con huecos formados por decaimiento en donde pernoctar. La selva misionera alberga áreas de Bosque Atlántico importantes y las mayores poblaciones de carpintero cara canela están en la sierra central de la provincia en los departamentos San Pedro y Guaraní. El Parque Provincial Araucaria es una reserva urbana de 92 hectáreas, lindante a la zona urbana de San Pedro. Fue creado en 1991, con araucarias y con áreas de bosque en recuperación, y crece sobre antiguas rozados de chacras.
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