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  • Gemini 3 ya está aquí: la inteligencia artificial de Google que todo lo puede cambiar

    Buenos Aires » Infobae

    Fecha: 23/11/2025 12:41

    La integración con servicios populares y el avance en autonomía de agentes convierte a Gemini 3 en un motor de cambio tecnológico que impacta desde la programación hasta la gestión empresarial La velocidad a la que avanzan las tecnologías de inteligencia artificial resulta abrumadora incluso para quienes siguen de cerca esta industria. El lanzamiento de Gemini 3 es buen ejemplo: en un solo día, escaló todas las clasificaciones de IA de terceros, y la avalancha de mejoras que incorpora representa mucho más que un incremento incremental en velocidad o capacidades. Estamos presenciando un cambio de paradigma, un salto que redefine lo posible en cada ámbito donde la IA interviene. A diferencia de mejoras graduales del pasado, Gemini 3 reúne avances en multimodalidad, interacción y razonamiento. Ahora, es posible dialogar con la máquina para desarrollar software, administrar tareas empresariales o diseñar simulaciones interactivas, sin necesidad de escribir una sola línea de código tradicional. El umbral para crear, ejecutar y personalizar soluciones se ha reducido de forma inédita, acercando capacidades de “superinteligencia” a cualquier persona integrada al ecosistema Google. Sundar Pichai, CEO de Google, presenta Gemini 3 como un hito en inteligencia artificial que transforma la interacción diaria con servicios y herramientas digitales. REUTERS/Gonzalo Fuentes/File Photo Además, la integración vertical de Gemini con servicios como Gmail, Calendar o YouTube ofrece un nivel de automatización y personalización nunca antes visto. Esta capacidad de orquestar actividades complejas de forma fluida, desde una única interfaz, augura una transformación no solo para usuarios empresariales, sino para el día a día de millones. La frontera entre tareas manuales y gestión inteligente automatizada se está desvaneciendo. Uno de los aspectos más impresionantes surge en el plano de los benchmarks: Gemini 3 se ha posicionado como el modelo más avanzado en pruebas como ARC AGI 2.0 y Humanity’s Last Exam, duplicando el desempeño de otros modelos líderes. Esto significa que la inteligencia artificial ya puede resolver problemas de nivel doctoral en matemáticas y ciencia, con aplicaciones directas en investigación, medicina, ingeniería y muchos otros campos. Esta aceleración genera, sin embargo, nuevas preguntas sobre distribución de beneficios y posibles riesgos. El desarrollo de agentes autónomos capaces de gestionar negocios enteramente digitales —como ocurre en simulaciones tipo Vending Bench— anticipa la emergencia de empresas sin empleados humanos y la rápida expansión de una economía no-humana, ya valorada en más de un billón de dólares. La pregunta sobre el acceso equitativo a estas capacidades y el riesgo de concentración de riqueza es más importante que nunca. El nuevo modelo de Google supera todos los benchmarks, integra multimodalidad y automatiza tareas complejas, abriendo una era donde la superinteligencia y la personalización transforman el trabajo y la vida diaria. (Imagen Ilustrativa Infobae) En paralelo, los retos de seguridad y bioética se amplifican. La capacidad de las IAs para potencialmente diseñar armas biológicas ha llevado a que iniciativas como Red Queen Bio, apoyadas por OpenAI, busquen escalar defensas al ritmo de las nuevas amenazas. El equilibrio entre privacidad, vigilancia y seguridad colectiva será uno de los debates centrales de la próxima década. El fenómeno de competencia entre gigantes, con empresas como Google, OpenAI, xAI y Cursor peleando semana a semana por la supremacía en benchmarks, promueve una innovación constante como pocas veces se ha visto. La dinámica competitiva entre compañías grandes y startups garantiza que nadie puede dormirse en los laureles: cada avance fuerza a los otros a moverse y libera desarrollos previamente retenidos. El último modelo de Google impone nuevas preguntas sobre seguridad, equidad y adaptación social, mientras redefine las posibilidades de la innovación diaria En términos sociales, la reducción drástica del costo por unidad de inteligencia revoluciona la economía global, con efectos tangibles en vivienda, transporte, salud, educación y alimentación. Las oportunidades de democratización real dependen ahora, sobre todo, de regulaciones flexibles y una adecuada adaptación del contrato social para que los beneficios de la IA lleguen a todos los sectores. Si se mantiene esta tendencia, la era de la abundancia podría materializarse más pronto de lo pensado. Por último, el impacto en las carreras profesionales y la manera en que trabajamos es profundo. El sector de desarrollo de software, por ejemplo, ya está siendo automatizado; la pregunta sobre el “vintage” de los nuevos ingenieros —si se formaron antes o después de la aparición de la IA agente— muestra cuán rápido está rotando el paradigma laboral tecnológico. En conclusión, el avance de modelos como Gemini 3 no solo significa mayor poder de cálculo. Implica una nueva arquitectura para la vida cotidiana, la economía, el trabajo y la propia creatividad humana. Nos enfrentamos a un futuro en el que el ritmo de cambio desafía nuestra capacidad de comprender las implicaciones a mediano y largo plazo. Sin embargo, si algo queda claro, es que nos hemos adentrado irreversiblemente en la era de la inteligencia abundante, con todo lo que ello implica para nuestra generación y las que siguen.

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