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» Elterritorio
Fecha: 20/11/2025 19:15
El hombre (35), detenido desde octubre pasado, está acusado de abusar durante tres años a su hijastra, hoy de 12 años, en la localidad de Garuhapé. También está imputado por desobediencia judicial por el Juzgado de instrucción de Puerto Rico. jueves 20 de noviembre de 2025 | 17:14hs. El Juzgado de Instrucción de Puerto Rico dictó la prisión preventiva para un jornalero de 35 años que, desde mediados de octubre, permanece detenido por abusar de su hijastra de 12 años. Según pudo saber El Territorio con fuentes del caso, la ampliación del periodo de detención para el acusado se conoció a principios de noviembre, luego de conocerse los resultados de la entrevista en cámara gesell con la víctima, una menor de 12 años que dijo haber sido abusada desde los 9 por su padrastro, identificado como A. A. L. (35). El caso se conoció luego de que la madre de la niña denunciara los distintos hechos ante la Policía. Y, según precisó un vocero del caso, se tuvieron presentes en el expediente para el dictado de la preventiva distintas actuaciones hechas en el caso, como ser informes del Juzgado de Familia y Violencia de Puerto Rico, como así también certificados médicos, pericias psicológicas al acusado y socioambiental de la trabajadora social. Años de abusos Los hechos que se denunciaron ocurrieron en la vivienda en la que la víctima compartía con el detenido, y en el que vivían también la madre de la niña y una hermana más grande, como en un arroyo de Garuhapé. E iniciaron años atrás cuando la víctima tenía 9 años. En base a lo que se tiene en la pesquisa, con el pretexto de ayudar a la víctima a bañarse, el implicado ingresó en varias oportunidades al baño de la vivienda, en donde aprovechó la situación para tocar las partes íntimas de su hijastra. Además, se exponen situaciones similares ocurridas durante las noches en donde el acusado ingresó a la habitación de la víctima con la escusa de repeler a los mosquitos. Circunstancias en las que nuevamente se aprovechaba para abusar de la criatura. Por si fuera poco, en otra oportunidad que aún no se ha podido establecer con fecha exacta, el acusado habría llevado a la menor hasta el arroyo San Miguel de la localidad en donde tras despojarla de sus prendas de vestir volvió a realizar actos de tocamiento, para finalmente pedirle a la niña que no contara nada a su mamá. Y que mojara sus ropas en el arroyo para ocultar su accionar. Desobediencia judicial Por otro lado, tiempo atrás la Justicia de Familia había dispuesto una prohibición de acercamiento para el acusado para que no se acercara a la menor y a su entorno. Que se originó por hechos de violencia denunciados por la madre de la criatura y que no fue respetada por el detenido, ya que en una de las tantas notificaciones formales hechas por autoridades policiales se tomó conocimiento que el hombre aún vivía en casa de la madre de la pequeña. Por otro lado, otro punto que resultó clave para resolver la ampliación del periodo de detención para el denunciado fueron los dichos de la victima en entrevista en cámara Gesell. Allí, la criatura contó que el acusado convivía con ella y su madre, desde hacía siete años. Ante la consulta de las profesionales en psicología, la menor narró que el acusado aprovechó distintas oportunidades que su madre salía de la casa para realizar compras, y así, consumar los distintos hechos. Por si fuera poco, agregó que el acusado, además, agredía verbal y físicamente a su mamá, y que por ello pedía de inmediato que el jornalero se vaya de la vivienda. Además, en el caso se tomó relevancia al aporte testimonial de la hermana de la víctima, también menor de edad, y quien tomó conocimiento de los graves hechos por el propio relato de su hermanita menor. Por todo esto, luego de concretarse la detención y posterior audiencia indagatoria al sospechoso, desde el Juzgado de Instrucción de Puerto Rico, a cargo del juez Manuel Balanda Gómez, se ordenaron distintas medias para avanzar en el caso. Y en el que también fue actor principal el fiscal de instrucción Héctor Simón, quien evaluó el material probatorio y realizó distintos requerimientos al juez interviniente. Actualmente, a la espera de que se avance en la causa, el sospechoso permanece detenido y acusado de abuso sexual simple, agravado por la condición de guardador, en varios hechos indeterminados y desobediencia judicial en concurso real.
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