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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 18/11/2025 22:49
La noche en que Escocia selló su regreso a la Copa del Mundo tras 28 años de ausencia quedará grabada en la memoria colectiva del fútbol europeo. En un Hampden Park colmado por 50 mil aficionados, el seleccionado local superó a Dinamarca por 4-2 en un duelo que combinó goles espectaculares, giros dramáticos y una definición que mantuvo en vilo a todo el estadio hasta el último instante. El equipo dirigido por Steve Clark necesitaba la victoria para obtener el pase directo al Mundial de 2026, objetivo que alcanzó con una actuación que rozó la épica y que puso fin a una espera de casi tres décadas. El desarrollo del partido estuvo marcado por una sucesión de emociones y momentos de alta calidad técnica. Apenas iniciado el encuentro, Scott McTominay abrió el marcador a los tres minutos con un gol de chilena, una acción que desató la euforia en las tribunas y colocó a Escocia en ventaja desde el inicio. El tanto llegó tras un centro desde la derecha y fue ejecutado en medio de tres defensores daneses, lo que realzó la dificultad de la jugada. La superioridad escocesa se mantuvo hasta el descanso, lo que hacía presagiar un desenlace favorable para los locales, que solo se conformaban con la victoria. El golazo de chilena de Scott McTominay para Escocia ante Dinamarca (REUTERS/Russell Cheyne) La segunda mitad, sin embargo, trajo consigo un giro inesperado. Rasmus Hojlund igualó el marcador para Dinamarca mediante un penal sancionado tras la intervención del VAR, que obligó al árbitro a revisar una falta cometida sobre la línea del área. Con el empate, los daneses se encontraban en posición de clasificación directa, mientras que Escocia quedaba momentáneamente relegada al repechaje. La situación se complicó aún más para los visitantes cuando Rasmus Nissen Kristensen fue expulsado por doble amonestación, lo que permitió a los escoceses recuperar la iniciativa. La reacción local no se hizo esperar. A los 78 minutos, Lawrence Shankland, quien había ingresado desde el banco, aprovechó un tiro de esquina para empujar el balón a la red y devolverle la ventaja a Escocia. Sin embargo, la respuesta danesa fue inmediata: Patrick Dorgu igualó el marcador apenas tres minutos después, resultado que volvía a favorecer a Dinamarca y mantenía la tensión en el estadio. En los minutos finales, la definición adquirió tintes de leyenda. Cuando el tiempo reglamentario se agotaba, Kieran Tierney apareció en el área rival y, tras un remate desde fuera del área, colocó el balón en el ángulo para establecer el 3-2 en el tercer minuto de descuento. La euforia se desató en Glasgow, pero aún quedaba espacio para una última obra maestra. En la jugada final, con Dinamarca volcada al ataque, Kenny McLean recibió el balón en el círculo central y, tras eludir al último defensor, disparó desde la mitad de la cancha para sentenciar el 4-2 definitivo y asegurar el boleto a Estados Unidos, Canadá y México 2026. Fue un gol descomunal que selló una noche inolvidable para el fútbol escocés. Kenny McLean desata la locura en Escocia luego de convertir tras un disparo desde mitad de cancha y sellar la clasificación de su selección al Mundial 2026 (REUTERS/Russell Cheyne) La clasificación de Escocia representa su novena participación en la máxima cita del fútbol. El seleccionado británico no disputaba un Mundial desde Francia 1998 y, a lo largo de su historia, nunca logró superar la fase de grupos. Su mejor desempeño se remonta a la edición de 1974, cuando sumó cuatro puntos y finalizó tercero en su grupo. En 1978, en Argentina, quedó eliminado por diferencia de gol ante Países Bajos, equipo que luego alcanzó la final. El Grupo C de las Eliminatorias europeas, donde Escocia y Dinamarca se disputaron el primer puesto, estuvo marcado por el dominio de ambos equipos sobre Grecia y Bielorrusia, los otros integrantes de la zona. Solo el líder obtenía el pase directo, mientras que el segundo debía buscar la clasificación a través del repechaje. La victoria escocesa, con goles de McTominay, Shankland, Tierney y McLean, relegó a Dinamarca a la ruta más larga para intentar llegar al Mundial. En paralelo, la jornada de Eliminatorias dejó otros resultados destacados. Bélgica aseguró su clasificación en el Grupo J al golear a Liechtenstein por 7-0, con un doblete de Jeremy Doku y un tanto de Hans Vanaken. El segundo gol de Doku fue especialmente celebrado por su calidad técnica, tras una bicicleta que descolocó al defensor rival. Por su parte, Gales venció a Macedonia del Norte por 7-1, con una actuación sobresaliente de Harry Wilson, autor de tres goles, y un tanto de Brennan Johnson que destacó por su definición al ángulo. En otro encuentro, Rumania superó a San Marino por 7-1, revirtiendo un marcador adverso y asegurando su presencia en el repechaje gracias a su desempeño en la Nations League. Finalmente, Austria empató 1-1 ante Bosnia y Herzegovina y, con ese resultado, logró su regreso al Mundial tras 28 años, igualando la hazaña de Escocia. La noche de Glasgow no solo significó el fin de una larga espera para Escocia, sino que también ofreció una de las clasificaciones más emocionantes de la historia reciente de las Eliminatorias europeas, marcada por goles de antología y una definición que mantuvo en vilo a todo un país.
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