18/11/2025 19:05
18/11/2025 19:04
18/11/2025 19:04
18/11/2025 19:04
18/11/2025 19:04
18/11/2025 19:04
18/11/2025 19:04
18/11/2025 19:04
18/11/2025 19:04
18/11/2025 19:04
» Diario Cordoba
Fecha: 18/11/2025 17:41
Los erizos terrestresson seres realmente entrañables. Su aspecto rollizo, de apariencia indefensa y simpático rostro los hace unos animales cautivadores a ojos humanos. Ahora bien, no son un elemento decorativo de la naturaleza, sino que juegan un papel ecológico importante en el medio y ayudan a mantener el equilibrio de los ecosistemas. Y, sin embargo, cada vez vemos menos erizos. No es de extrañar, porque sus poblaciones están en declive. En España hay dos especies autóctonas: el erizo común o erizo europeo (Erinaceus europaeus), relativamente abundante en casi toda la Península, y el erizo moruno (Atelerix algirus), muy parecidos, aunque con ciertas diferencias. El primero habita en casi toda la Península y el segundo, únicamente en los dos archipiélagos y la mayor parte del Levante. Erizo europeo, el más común en la Península El erizo europeo mide entre 20 y 30 centímetros de longitud y suele pesar entre 500 gramos y 1,2 milos. Se alimenta de insectos, pequeños invertebrados y frutas, es decir tiene una dieta bastante variada que le permite adaptarse a numerosos entornos. Por este hecho, es fácil verlo en gran diversidad de ambientes, incluyendo los grandes jardines urbanos. Erizo europeo o común / Julius Kramer Sin embargo, su preferencia por ambientes relativamente húmedos hace que su presencia no sea tan visible en las zonas más áridas o en altitudes superiores a los 1.600 metros. Distribución el erizo europeo / Miteco Su capacidad para adaptarse a una alimentación muy variada hace del erizo un agente de control de plagas muy importante, pues ayuda a regular las poblaciones de insectos y pequeños invertebrados que pueden dañar el equilibrio ecológico e incluso perjudicar a los cultivos. Entre sus presas más frecuentes figuran lombrices de tierra e insectos, pero también babosas, caracoles e incluso pequeños roedores. El erizo común se reproduce desde primavera hasta verano. Tras un periodo de gestación de unos 35 días, las hembras dan a luz entre dos y seis crías, que hacen ciegas y totalmente desprovistas de púas, que empezarán a aparecer en las primeras semanas, aunque todavía son blancas y blandas en esos momentos. En general, este animal tiene una sola camada por temporada, aunque veces se produce una segunda. Erizo moruno: en las islas y en el Levante El erizo moruno, por su parte, típico del Mediterráneo y Canarias, es más pequeño que el europeo y mide entre 20 y 25 centímetros de largo, con un peso que va de los 300 a los 700 gramos. Las diferencias observables con el otro erizo español es que en el moruno las púas son más cortas, no son dobles como en el europeo. El pelo que recubre su cara es más claro en el moruno, casi blanco. Además, las patas del erizo moruno son algo más largas que las del europeo. Ejemplar de erizo moruno / Agencias Este animal prefiere áreas a bajas alturas, preferiblemente por debajo de los 600 metros por debajo del nivel del mar y suele encontrarse en zonas con vegetación densa y variada. Sin embargo, puede observase también en otro tipo de terrenos, como cultivos, campos de matorral y cerca de viviendas, pues también tiene una gran capacidad de adaptación. Distribución del erizo moruno / Miteco Su alimentación consiste fundamentalmente en insectos, isópodos terrestres, miriápodos y pequeños caracoles. También puede llegar a consumir las salamanquesas que abundan en las islas Baleares o en otras partes de la costa mediterránea. Es una especie de animal nocturno, por lo que su actividad de búsqueda de alimento se desarrolla durante la noche. En Baleares, las crías nacen entre junio y octubre, sobre todo en pleno verano, aunque ello varía según las islas. El número de crías por camada oscila entre una y tres, es decir, menos que en el caso del erizo europeo. Amenazados por los atropellos Las amenazas que se ciernen sobre ambas especies son las mismas: atropellos por parte de vehículos en las carreteras que cruzan continuamente durante la noche. Además, la presión urbana y la agricultura intensiva de monocultivos está destruyendo sus hábitats y fuentes de alimento. Los parásitos y enfermedades que transporta tanto en su interior como en su exterior amenazan también la salud de los erizos. Los plaguicidas en áreas agrícolas pueden intoxicarlos, y también se ven afectados por el cambio climático, que altera su disponibilidad de alimento y refugio. No son mascotas Los erizos no son mascotas. Pese a su aspecto simpático y adorable, capturar estos animales y tenerlos en cautividad equivale a mantenerlos en situación de sufrimiento. Además, pueden transmitir enfermedades a sus propietarios, por los parásitos que transportan. Debido a todas estas amenazas, el erizo común o europeo pasó en 2024 a estar considerado ‘casi amenazado de extinción’, después de estar en situación favorable de manera habitual. En España, funciona una ONG centrada específicamente en la conservación y estudio de los erizos autóctonos, EriSOS, en cuya web puede encontrarse amplia información sobre ambas especies y sobre las amenazas que se ciernen sobre ellas.
Ver noticia original