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Parana » Valor Local
Fecha: 18/11/2025 01:20
Economistas y referentes del sector empresario advierten que a pesar de la caída de la inflación y cierta estabilidad cambiaria, las pequeñas y medianas empresas enfrentan un mercado deprimido, altos costos y escaso acceso al crédito. Publicidad La dinámica que toma la economía hacia fin de año coloca a las pymes y a las economías regionales ante un escenario de señales mixtas. Algunos sectores encuentran alivio por la desaceleración de la inflación -en particular respecto del año anterior- y mayor calma financiera, mientras la mayoría enfrenta un nivel de actividad deprimido, dificultades en el acceso al financiamiento y dudas sobre el rumbo del tipo de cambio. Aunque sus realidades difieren, la economía regional, la industria manufacturera, los servicios y la producción exportadora comparten una cerrteza: la recuperación del consumo, las ventas y el financiamiento será determinante para definir los próximos meses. Desde el sector industrial pyme, Daniel Rosato, presidente de Industriales Pymes Argentinos (IPA), coincide en que la estabilidad cambiaria e inflacionaria redujo la incertidumbre, pero no activó la recuperación. “El mercado está más tranquilo en el sentido de que no está el fantasma inflacionario”, señala. Sin embargo, aclara Rosato que “post elecciones se frenaron las ventas y no hay señales de que vayan a recuperarse en el corto plazo”. La baja de tasas de interés ayudó parcialmente, pero no reactivó el crédito productivo. “Fue muy importante, pero no significa que las empresas hayan salido a tomar crédito. Las firmas tratan de mantener cierta austeridad”, dijo el dirigente fabril. Sí se movió el segmento de cheques y giros, pero la actividad no cambió de tendencia. En el interior del país, especialmente en el norte, “sigue todo muy tranquilo”. La única señal más concreta de dinamismo aparece en el petróleo. “Se estima que recién en enero o febrero va a haber una reactivación fuerte, pero solo en el sector petrolero”, afirmo Rosato. También menciona que el software es de los pocos rubros con repunte. La industria manufacturera, en cambio, permanece en niveles “muy bajos”. Frente a ese escenario, muchas empresas están bajando precios para sostener volumen. “Las empresas no quieren perder espacio y están yendo a pérdida. Es mejor eso y no frenar”, explicó Daniel Rosato. Sobre el impacto del acuerdo marco comercial con Estados Unidos, el industrial pyme diferenció entre sectores. “Esto beneficiará al agro por la baja de aranceles, pero todo lo que tiene valor agregado no se verá beneficiado”, sostiene. “Para algunas actividades, como la automotriz, el golpe podría ser significativo porque compiten con productos estadounidenses con costos más bajos”, estimó Rosato. Ante este escenario, el pequeño industrial insiste en que la estructura impositiva es determinante. “Si no se bajan los Ingresos Brutos, el Impuesto al Cheque y si no se toman medidas para bajar los costos laborales, la industria no va a crecer”, advierte. En ese sentido, propone la creación de un régimen específico: “Planteamos un RIPI, que sea lo mismo que el RIGI, pero para las pyme industriales”. El dirigente también alerta por el cierre de empresas. “Están cerrando muchas empresas. Con esos datos tienen que tomar medidas, porque el mismo gobierno está perdiendo recaudación”, afirmó. Las pymes llegan al final del año con una combinación de oportunidades acotadas, desafíos urgentes y un horizonte que todavía no despeja las dudas centrales: el nivel de actividad, el tipo de cambio y el financiamiento. La posible recuperación se percibe en sectores puntuales -hidrocarburos y economía del conocimiento- mientras que la mayoría enfrenta ventas deprimidas, costos altos y un consumo que no repunta. La expectativa de nuevas medidas para aliviar impuestos, mejorar la competitividad y fortalecer la demanda convive con el temor a que la apreciación cambiaria, la competencia importada y la falta de crédito profundicen las dificultades. En ese equilibrio inestable se juega “lo que viene para las pyme” en la economía que arranca: un escenario donde la resistencia, más que la expansión, sigue siendo el punto de partida. (Fuente: Infobae)
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