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Fecha: 15/11/2025 22:27
Incendio en Caballito: Una tarde de angustia y desesperación La tarde del miércoles se convirtió en una pesadilla para los vecinos de Formosa y Riglos, en Caballito, cuando un caño de gas estalló en una cochera mientras un equipo técnico de Edesur arreglaba cables. La llamarada de varios metros invadió la calle, desatando el pánico y la confusión entre los presentes. En cuestión de segundos, la escena se tornó caótica: la gente corría, gritaba, lloraba, sin comprender lo que estaba sucediendo. Los bomberos llegaron rápidamente y, tras más de tres horas de arduo trabajo, lograron controlar el fuego que dejó como saldo un edificio destruido, decenas de vecinos afectados y una profunda angustia. Afortunadamente, no hubo víctimas fatales en este trágico suceso. Vecinos afectados y heridos Los únicos dos heridos permanecen internados en el Hospital del Quemado, fuera de peligro. Mientras tanto, los nueve vecinos evacuados esperan ansiosos poder regresar a sus hogares, temiendo los daños que el fuego y el agua hayan causado en sus propiedades. El día después del incendio, la conmoción en la zona de Caballito todavía se siente con fuerza. Las calles aledañas permanecen cortadas por el operativo policial, y muchos vecinos se acercan a observar los restos del edificio ennegrecido, aún impactados por lo ocurrido. Relatos de desesperación y angustia Sentados en un café cercano al lugar del incendio, Marcelo y Mariana observan impotentes los destrozos causados por el fuego. Marcelo relata con gestos de preocupación: “Fue una odisea. Cuando llegué del trabajo vi cómo el edificio al lado de mi casa estaba en llamas. Es devastador, no sabemos nada. Estamos evacuados y nadie nos dice cuándo podremos volver a entrar”. Mariana, que también tuvo que abandonar su departamento, recuerda los momentos de pánico: “No sentí ninguna explosión. Estaba en el patio y empecé a ver como papelitos que caían. Cuando me asomé, vi una llamarada naranja frente al edificio. Ahí entraron los bomberos y nos evacuaron. Tuvimos que dormir en casas de familiares”. Impacto en la comunidad Los vecinos del edificio contiguo a la cochera incendiada permanecen evacuados, preocupados por los daños sufridos en sus viviendas. “No sabemos los daños que hay, ni cómo seguirá todo a partir de ahora. La gente corría, gritaba, lloraba. No podíamos hacer nada”, relata Marcelo con tristeza en su voz. En medio de la conmoción, Pablo, un vecino a media cuadra del lugar, cuenta su experiencia: “Estaba trabajando en mi casa cuando empecé a escuchar bocinazos y gritos. Miré por la ventana y vi mucha gente mirando hacia acá. Después escuché un ruido raro, como de agua a presión. Me asomé y vi la llamarada desde mi casa. Al principio no sabía dónde era, pero después me enteré de que el fuego estaba en la cochera, donde tengo el auto guardado”. Esperanza y miedo ante el futuro Mientras los peritos investigan las causas del incendio, los vecinos anhelan poder regresar a sus hogares. “Nos angustia no saber cuándo podremos volver, pero también nos da miedo ver cómo quedaron nuestras viviendas”, expresa Marcelo, reflejando la incertidumbre que embarga a toda la comunidad afectada por esta tragedia. En medio del caos y la destrucción, la solidaridad y el apoyo mutuo entre vecinos se hacen presentes, demostrando que juntos podrán superar esta difícil situación y reconstruir lo que el fuego se llevó. La esperanza de un futuro mejor se abre paso, mientras el miedo y la angustia se desvanecen lentamente en el horizonte de Caballito.
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