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  • Intrigas – Página Judicial

    Parana » Paginajudicial

    Fecha: 12/11/2025 19:13

    La publicación de conversaciones de WhatsApp en las que mencionado el ex gobernador Gustavo Bordet como supuesto beneficiario de coimas por la prestación del servicio de seguridad en Enersa en un medio porteño generó suspicacias hacia el interior del peronismo. Un mapa de las sospechas. Federico Malvasio De la Redacción de Página Judicial “¿De dónde viene esto?”. Con ese interrogante llegó el link con la nota de La Nación que revela conversaciones de WhatsApp donde aparece mencionado Gustavo Bordet como supuesto beneficiario en el cobro de coimas por la prestación del servicio de seguridad en Enersa por parte de la empresa multinacional Securitas. Con el correr de las horas se fueron acrecentando en el mundo peronista la incógnita y las sospechas sobre la procedencia de la información publicada por la prensa. Interesante: nadie hizo hincapié en la veracidad del hecho, sino que el acertijo de los muchachos propuso dilucidar la autoría de la acción por la que ese material llegó al matutino porteño. La causa Securitras explotó en los inicios de la gestión de Rogelio Frigerio, cuando una serie de allanamientos derivó en la detención de los empresarios Claudio Raúl Tortul y Marcelo Javier Tortul, dueños de firmas del rubro que operan en la provincia, bajo la sospecha de haber pagado coimas millonarias para retener contratos, emisión de facturas truchas, evasión y lavado de activos con distintas reparticiones nacionales y provinciales. El caso recayó en el Juzgado Federal de San Isidro, a cargo de Sandra Arroyo Salgado, a partir de una autodenuncia de la propia empresa global en esa jurisdicción. La causa no tiene como imputado a Bordet, con quien el periodista de La Nación Nicolás Pizzi se contactó para el informe. El diputado nacional insistió con que no formó parte de “ningún sistema de coimas o maniobras ilícitas vinculadas a la relación comercial entre la empresa de seguridad Securitas y Enersa” y que “nunca tuvo ningún tipo de contacto personal ni vínculo con los hermanos Tortul ni con los responsables de la empresa”. Sostuvo además que “no será la primera ni la última vez que se invoque el nombre de un gobernador o de una figura de poder como excusa para intentar facilitar negociaciones, acortar caminos o cometer actos ilegítimos”. La pregunta que se suscita por estas horas en el microclima del peronismo es sobre el momento en que surgió esa información, que no ha motivado un avance en el proceso. La novedad es la publicación periodística. Se sabe, hace un tiempo, que en el ámbito penal cuando se trata de un funcionario público, la condena no es la pena sino el proceso por el que se transita. Para que se entienda: el escrache. En el círculo de la política no hubo señalamientos al Gobierno provincial de estar detrás de la publicación. El primero a quien se puso en la lista de sospechosos fue Edgardo Kueider, detenido en Paraguay con una parva de delitos imputados, entre ellos los que se investigan en la causa Securitas. Como se ha dicho en Página Judicial, si hay un proceso en el que parece no tener nada que ver el ex senador es precisamente en este. Pero la pregunta que debería hacerse es si Kueider tiene realmente capacidad operativa desde el lugar en el que está. Pareciera que no. La doctora Arroyo Salgado, que lo involucró en la trama judicial, estuvo en Paraná meses después de los allanamientos que ordenó. Fue el 29 de noviembre de 2024, en carácter de panelista, para disertar sobre “el poder político, la Justicia y la corrupción”. La presentación estuvo a cargo de la procuradora adjunta restituida, Cecilia Goyeneche. La jornada tuvo lugar en el Howard Johnson Mayorazgo. Dato de color. Los canales por los que se comenzó a diseminar la noticia este lunes, ni bien se publicó, dejaron marcas de los intereses en el seno de la interna peronista. En el entorno del senador nacional electo, Adán Bahl, debería sobreponerse la prudencia. Que la interna peronista entrerriana escale, ahora, al fuero federal de San Isidro, habla de otra magnitud. En este caso, con la ex esposa de Alberto Nisman al timón. Una jueza que ha sabido aportar a la política.

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