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» AgenciaFe
Fecha: 24/10/2025 13:33
Un grave hecho de violencia ocurrió en la Liga Paranaense de Fútbol cuando un jugador agredió al árbitro del encuentro tomándolo del cuello tras ser expulsado. Por este motivo, el cotejo fue suspendido a los 35 minutos del primer tiempo. El hecho ocurrió en el encuentro que disputaron Palermo y Neuquen, cuando Cristián Gómez recibió la roja tras una fuerte discusión con un defensor rival. Luego de retirarse, volvió a ingresar al campo de juego y tomó del cuello al árbitro Rodrigo Aldana. Luego de la intervención policial, el juez decidió suspender el encuentro ya que no estaban dadas las garantías para continuar. Pasó dos horas en el vestuario con custodia policial y, una vez que logró retirarse del recinto, radicó la denuncia en la policia. “Yo estaba anotando las expulsiones cuando el asistente me dice que el 9 se volvió. No alcancé a reaccionar y me agarró con las dos manos del cuello. Me apretó tan fuerte que me faltó el aire. Cuando logré zafarme, en el impulso, me pegó en el cachete”, relató Aldana en UNO Entre Ríos. En la continuidad, detalló: “Por suerte había una ambulancia en cancha. Me revisaron y me dijeron que tuve un hundimiento de la tráquea. Me explicaron que se acomodó, pero en el momento me faltaba el aire y me sentí muy mal”. “Todavía tengo el cuello rojo y me quedó la sensación de los dedos marcados, pero estoy mejor. Fue algo inesperado, porque el partido estaba parejo y sin conflictos serios”, mencionó horas posteriores a la agresión y luego de radicar la denuncia y elevar el informe correspondiente al Tribunal de Disciplina de la Liga Paranaense. Es la asegunda agresión a un árbitro en el mes: “espero una sanción ejemplificadora” Esta es la segunda agresión en dos semanas en el ámbito liguista de Primera División: también fue agredido recientemente Mariano Nadalín, explicó Analisis Digital, denotando que la violencia volvió a ser propia en la LPF. Rodrigo Aldana confía en la actuación del Tribunal de Disciplina: “Viene trabajando muy bien. Hace poco otro jugador fue suspendido tres años por una agresión similar, además de recibir una multa de cien entradas, lo que equivale a más de medio millón de pesos, una cosa así. Creo que el castigo tiene que ser ejemplar”. En el final, también pidió por cambios y que las sanciones no solo recaígan en los futbolistas: “Cuando se toca el bolsillo de una institución, duele. Porque el jugador puede cumplir 10 o 20 fechas, pero si el club tiene que pagar una multa importante, empieza a controlar más a sus jugadores. Es una forma de generar conciencia”.
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