21/10/2025 17:01
21/10/2025 17:00
21/10/2025 17:00
21/10/2025 16:59
21/10/2025 16:58
21/10/2025 16:58
21/10/2025 16:57
21/10/2025 16:57
21/10/2025 16:57
21/10/2025 16:57
Parana » NSA
Fecha: 21/10/2025 07:55
«Compraríamos algo de carne de Argentina»: el impacto en la industria local tras los dichos de Donald Trump La industria frigorífica argentina recibió de buena manera las declaraciones del presidente estadounidense Donald Trump, quien este domingo deslizó la posibilidad de incrementar las importaciones de carne desde Argentina. “Compraríamos algo de carne de Argentina. Si hacemos eso, nuestros precios de la carne de res bajarán”, comentó el mandatario a periodistas a bordo del Air Force One. El comentario llega mientras se aguarda la confirmación del nuevo acuerdo comercial entre Estados Unidos y Argentina, ya anticipado por funcionarios del Gobierno argentino, aunque aún sin detalles concretos. Donald Trump habló de un acuerdo por carnes con Argentina Actualmente, Argentina cuenta con una cuota de exportación de 20.000 toneladas anuales hacia Estados Unidos, que tributa un arancel del 10%. Fuera de esa cuota, el país envía entre 16.000 y 18.000 toneladas adicionales, con un arancel del 36,4%. Cerca del 80% de las exportaciones argentinas a Estados Unidos corresponden a carne magra (sin grasa) utilizada para mezclas en la elaboración de hamburguesas. El resto son cortes rojos y algo de carne de calidad premium, aunque en volúmenes reducidos. Según el analista ganadero Víctor Tonelli, la mejora en las condiciones de acceso representaría una ventaja competitiva: “A un promedio total que supera ligeramente los 6.000 dólares por tonelada, si la exportación adicional entra dentro de la cuota, te estarías ahorrando unos 1.000 dólares por tonelada en arancel. Es un número muy interesante. De todas maneras, obviamente ese extra no es todo para Argentina, sino que también los importadores van a querer quedarse con parte del negocio”, explicó. Sin embargo, advirtió que el impacto global sería acotado: “Si fueran 20.000 toneladas más, son unos 20 millones de dólares al año. Ayuda, sí, pero no mueve la aguja para el total de las exportaciones argentinas”. Para tener en cuenta, Argentina exportó en 2024 por más de 900.000 toneladas. Y yendo a este año, según los datos del analista Ignacio Iriarte, Argentina, después de la baja de exportaciones de los primeros meses del 2025 (que en algún momento llegaron a caer 35% interanual), presentó en los últimos meses una marcada recuperación, siendo probable que culmine este año con embarques del orden de las 830 mil toneladas, un 10% menos que el año pasado. Las exportaciones de carne bovina en 2024 superaron las 900.000 toneladas. Tonelli consideró que el efecto más relevante será simbólico y de estímulo: “Es un mensaje extraordinario. No va a cambiar el negocio ni el precio de la carne que comen los argentinos. Pero es una gran señal para producir más, recriar mejor y meter más kilos por animal”. Estados Unidos atraviesa un faltante de carne inédito en 75 años, consecuencia de una sequía prolongada. “Del 2024 al 2025 las importaciones estadounidenses crecerán en 500.000 toneladas para mantener la oferta. Y cuando empiece el ciclo de retención, la producción caerá aún más”, indicó el analista. Por su parte, Daniel Urcía, presidente de la Federación de Industrias Frigoríficas Regionales Argentinas (FIFRA), recordó que el tema de ampliar la cuota “siempre estuvo en agenda”. “Con este gobierno se trabajó activamente en ese punto», afirmó. En cuanto al impacto en el mercado interno, Urcía descartó aumentos de precios: “Los valores de la hacienda son los más altos de la historia. No hay margen para subas. Sí consolida el negocio y ratifica los precios actuales, pero no genera incrementos inmediatos”. A lo que agregó: «Pagar más caro la hacienda implicaría que algún frigorífico desaparezca, porque no es rentable el negocio ya». Para tener en cuenta, históricamente el 70% de carne que se produce en el país va al mercado interno, mientras el 30% restante se destina a los mercados externos. El empresario también vinculó la oportunidad con la necesidad de recuperar el stock ganadero nacional, estancado desde hace décadas: “Mientras Brasil cuadruplicó su rodeo en los últimos 45 años, Argentina tiene hoy el mismo stock o incluso algo menor. Estos acuerdos mejoran la competitividad y pueden despertar inversiones privadas”. Finalmente, subrayó la importancia de mirar el proceso a largo plazo: “Es una noticia buenísima. Pero los resultados se verán recién hacia 2030. Lo importante es crear un ambiente de negocios estable, porque la ganadería, como la minería, necesita horizonte y previsibilidad”.
Ver noticia original