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  • Davoo Xeneize: del chico hipoacúsico que soñaba con enseñar literatura al streamer que hizo historia hablando de Boca

    Buenos Aires » Infobae

    Fecha: 14/10/2025 04:43

    Davoo Xeneize, cuyo nombre real es David Quint, se ha consolidado como una figura relevante en el streaming futbolero argentino y hasta en el periodismo deportivo. Con un enfoque centrado en Boca Juniors, sus contenidos incluyen análisis tácticos, críticas a la dirigencia, comentarios sobre partidos decisivos y opinión sin filtros, que le ha valido de una gran repercusión mediática. Su comunidad crece constantemente, con más de 5 millones de seguidores combinados en plataformas como YouTube, Twitch, Instagram, TikTok y Kick, Davoo emerge como uno de los representantes del hincha digital. Es que no solo reacciona al fútbol, sino que participa activamente en el debate público sobre el club, la dirigencia y los jugadores, e incluso reconoce errores o resultados adversos, lo que multiplica su influencia entre quienes consumen contenido futbolístico por redes. Davoo Xeneize: "Mi fanatismo por Boca siempre fue lineal y extremista". (Maximiliano Luna) Leo: — Contaste públicamente que el fanatismo por Boca te lo inculcó tu abuelo y toda tu familia, pero ¿cuándo te descubrís ese grado de enfermedad por el club y por guardar toda esa información y estadísticas en tu memoria? Davoo: — Nunca viví con conciencia sin ser fanático y enfermo de Boca. O sea, mi primer recuerdo de vida, capaz es algo puntual de Boca. Me acuerdo, por ejemplo, en 2008, en diciembre, yo tenía 6 años recién cumplidos y festejé con mi abuelo como loco la apertura 2008. El triangular, que perdimos con Tigre, pero salimos campeones por diferencia de gol... Leo: — Yo te voy a decir que sí a todo, haciéndome el que me acuerdo como vos (risas). Davoo: — ¿No te acordás? Le ganamos a San Lorenzo, perdimos con Tigre en cancha de Racing, que expulsan a Palacio. Yo me acuerdo de tener 6 años y festejar como loco ese título. Y de ahí en adelante, la intensidad por el fanatismo de Boca fue lo único que se mantuvo, porque de los 6 años hasta los 22 hubo cosas que me gustaron más, menos, que cambié o que no cambié. Pero el fanatismo por Boca siempre fue lineal y extremista. Entonces, es como parte de mi ser el ser bostero. A veces la gente dice: “Davoo es muy fanático de Boca. Mirá cómo sabe todos los resultados”. Eso no es ser fanático de Boca. El fanatismo se mide por lo que uno siente por el club. Leo: — Lo otro es una virtud tuya… Davoo: — Claro, yo estoy fanático de Boca por lo mal que me pongo cuando pierde y por lo feliz que me pone que cuando gana. Si vos cumplís con eso, sos igual de fanático que yo. Después, saber de datos y de resultados depende cuánto tiempo al ped* tengas, está claro (risas). También la realidad es que trabajo de esto, vivo de esto y es más fácil para mí saber de Boca, sabiendo que después tengo que exponer delante de mucha gente, pero es algo que me gusta. Leo: — Contame locuras que hayas hecho por tu fanatismo con Boca. Davoo: — Y... tengo muchas. Por ejemplo, 30 de noviembre de 2021 era el cumple de mi vieja. Y ese día jugaba Boca-Newell’s en La Bombonera. Era un martes, porque Boca-Newell’s en realidad jugó el 28, pero se suspendió por lluvia. Se jugó un martes un torneo que Boca ya no había salido campeón. Era la anteúltima fecha. River había salido campeón, de hecho. Leo: — O sea, un partido que no importaba. Davoo: — No le importaba a nadie. Y mi vieja me dijo: “Yo voy a festejar el cumpleaños, pero sé que a vos te hace más feliz ir a la cancha. Si vos sentís que tenés que ir a la cancha, andá, yo no me voy a enojar nunca con vos”. Y fui a la cancha, empatamos cero a cero. Cuando volví ya eran las doce de la noche. Y así tengo miles de historias. Pero mi vieja siempre me bancó... Leo: — Bueno, pero tu familia ya sabe. Davoo: — Es que yo me doy cuenta lo importante que es Boca en mi vida cuando veo que mi novia, mi mamá o parte de mi familia, nunca me reclaman el hecho de priorizar, por ejemplo, un partido. Eso es increíble. Leo: — ¿Cómo se llama tu novia? Davoo: — Milena. Leo: — ¿Y hace cuánto que están juntos? Davoo: — Dos años y medio, casi tres. Leo: — ¿Hubo situaciones donde Milena pudo haber dicho: “Che, Davoo. No da”? Davoo: — Te juro que no pasó. Es como que me respetan mucho lo que es Boca en mi vida. Aniversario, cumpleaños de ella ha caído un Boca en el medio de todo eso... Pasó 14 de febrero de este año que jugaba contra Banfield, y 14 de febrero del año pasado que jugaba contra Córdoba en La Bombonera y con Banfield allá en el sur. Yo le tiro la frase que el día de los enamorados con ella son todos los días. Entonces, ahí zafo (risas). Lo mismo mi vieja, en el Día de la Madre: “Con vos el día de la madre todos los días...” Leo: — Tirás esa que es verdad. Pero zafás. ¿Y con Mile planeas todo? ¿Tipo tradicional: casamiento, hijos? ¿Planean esas cosas o siendo tan jóvenes ni existe esa conversación? Davoo: — Si no tenemos nada por ahora, no es por mí. Yo, de hecho, fantaseo mucho y lo hemos hablamos. Yo quiero ser padre, en lo posible, cuanto antes. La verdad es que es mi mayor sueño. Siento que todo lo que hago en esta vida es para el día de mañana tener un hijo y poder dedicarle mi vida a él o a ella. Pero también entiendo la posición de Mile porque tenemos vidas diferentes. Yo siento que, por así decirlo, me pasó todo muy rápido. Tengo 22 años, pero la verdad que con todo lo que logré me imaginaba llegar a los 30 recién con esto. Leo: — Claro, tu explosión de fama, intuyo también dinero, exposición y todo, fue en los últimos tres o cuatro años... Davoo: — Fue furioso. Pensá que ya, por ejemplo, hace unos meses me compré una casa y la estoy armando. Entonces, no sé cuántos pasos más me quedan. Y del otro lado está ella, que está estudiando, que le quedan dos años. Que al fin y al cabo, tiene toda la razón. Yo quiero tener un hijo, pero nueve meses en la panza lo tiene ella, no yo. Entonces, me pongo en su lugar, tiene razón y la entiendo y la voy a esperar lo que haga falta. Pero obviamente uno fantasea y yo sueño mucho con casarme con ella, con tener hijos... En lo posible me gustaría que no falte mucho para eso. La decisión la tomé, pero me pongo en su lugar y la entiendo, la respeto. Hay que esperar y que decida ella. "Siento que tener un hijo va a ser tan fuerte para mí que capaz por primera vez en mi vida a Boca no sea mi mayor prioridad", confesó Davoo. (Maximiliano Luna) Leo: — ¿Ella es jovencita también? Davoo: — Tiene mi edad. Tenemos los dos 22. Pero yo quiero ser padre joven. Leo: — ¿Te ves llevando a tu hijo o hija a la cancha? ¿Qué preferís? Davoo: — La verdad, hay días y días. Hay días donde prefiero una nena, otro día donde prefiero una nene. Leo: — Pero va a estar el trip de ir a la cancha y vas a tener que explicarle que papá Davoo tal vez no esté en su cumpleaños... Davoo: — Toda mi vida prioricé a Boca. Yo siento que el deseo de ser padre, el deseo de tener un hijo es tan grande y es un sueño mío desde muy chico. Yo con 10 años ya fantaseaba con formar una familia cuando sea grande. Y siento que tener un hijo va a ser tan fuerte para mí que capaz por primera vez en mi vida a Boca no sea mi mayor prioridad. Si el día de mañana mi hijo se siente mal y juega a Boca, mi prioridad va a ser mi hijo, eso lo tengo claro. Y tampoco voy a proyectar en mi hijo. Yo, obviamente, quiero que sea fanático de Boca, pero si a él no le gusta el fútbol y le gusta otra cosa, lo que sea, tendrá la libertad de elegir. Yo no voy a insistir mucho tampoco. Quiero que sea como quiera. Leo: — Y si te dice: “Mirá, papá la verdad que me gusta River”. Davoo: — No, ahí eso es un límite. Ahí ya es otra cosa. Yo le diría: “Mirá, si no te gusta el fútbol, te entiendo. Yo no quiero que seas como yo. Si te gusta el fútbol, tenés que ser de Boca”. Si va a ser de River, ahí sí que verdaderamente no me haría cargo (risas). No me haría cargo porque es lo único... Te juro que le diría a mi hijo: “Lo único que te pido. Vos podés ser lo que quieras, pero si soy de River, es como que no voy a poder quererte como quisiera quererte (risas). Y si tengo otro hijo que va a ser de Boca, no te voy a querer tanto a vos como a él”. Pero a la vez pienso ¿cuántas probabilidades hay? Milena es de Boca, yo soy de Boca, va a crecer con un mural de La Bombonera, con la gente que le dice: “¡Ey! Tu papá, el Xeneize”. Son nulas las chances de que sea de River, no existe. Leo: — Para cerrar ese combo, ¿si es varón se va a llamar Román? Davoo: — No te voy a mentir. Tema nombre y esas cuestiones en la negociación, estoy abajo. Yo le dije a Mile: “Bostero”. Pero no sé si ella está a favor de que sea tan fanático de Boca, tan enfermo. Leo: — No te digo ponerle Juan Román, pero ponerle a Román a tu hijo tendría sentido. Davoo: — A mí me gustaría, me encantaría. Pero la verdad es que el negocio con ella fue hincha de Boca. Y tengo entendido que va a elegir nombre, el colegio y los padrinos. Leo: — ¿Y si es una nena? Davoo: — A mí me encanta el nombre Román si es varón. Y si es nena a mí me gustaría ponerle Azul Oro. Sería un lindo nombre para mí. Leo: — ¿Azuloro, todo junto? Davoo: — No, Azul primer nombre. Oro, segundo nombre. Que le digan Azul, pero que en el DNI aparezca Azul Oro (risas). Pero no depende de mí. Te soy sincero. Siento que la mujer al tener un hijo debería tener más prioridad que el hombre. Es una opinión que siempre tuve. Si vos querés elegir el nombre, el colegio, todo, te lo merecés. Yo no me imagino nueve meses con la panza hinchada, aguantándome esos dolores… Leo: — Sé de tu amor por Román, Messi y hablaste de Cristiano. ¿Tenés tu top 3 o top 5 de la historia de futbolistas que a vos te gustan o que te parecen los mejores? Davoo: — Son dos cosas diferentes: ídolos míos con mejores jugadores de la historia. Ídolo es Román. Es el uno, indiscutido. Estoy hablando de lo futbolístico. Después, obviamente, como dirigente, la realidad es que yo primero soy hincha de Boca y después soy todo lo demás. Y como hincha de Boca, es cierto que he sido muy crítico con la dirigencia, que hace no mucho tiempo se me viralizaron varios clips donde critico mucho la gestión de Román. Pero yo te juro que cuando critico esta gestión, la critico con dolor, no disfrutando pegarle a Riquelme como sí disfrutan algunos. Hay que saber separar. Hay gente que está ensobrada, que critica a Riquelme porque políticamente le conviene. Sí, es verdad que eso existe. Hay gente que defiende a Riquelme a más no poder porque políticamente le conviene también. Ahora, en el medio, hay un montón de hinchas de Boca que amamos a Riquelme, pero amamos más a Boca y vemos que la dirigencia no está a la altura en estos últimos años. Y criticamos a Román. Y lo criticamos no porque estamos ensobrados, como algunos me acusan, o porque queremos pegarle a Riquelme. Criticamos porque somos bosteros y sabemos que Riquelme está para más y Boca está para más. Riquelme es mi ídolo, es mi máximo ídolo. Yo a Riquelme lo amo. Y alguno dice cómo lo vas a amar, si después lo criticás o cómo lo vas a amar si el tipo está arruinando a Boca. La realidad es que yo crecí con él. Es el mejor jugador de la historia de Boca. Para mí fue el jugador más importante de todos los tiempos del club. Parte de las libertadores que tiene Boca, las ganó por Riquelme. Boca le debe mucho a Riquelme como futbolista. Y después, bueno, es cierto que se lo puede criticar, pero como ídolo Riquelme, en mi corazón, está por encima de Messi, de Maradona, de todos. .. Leo: — Lo entiendo fácilmente, es tu ídolo y lo amás como futbolista, solamente que criticás con dolor porque desearías que a él le fuera bien en la diligencia. Pero no estás tan de acuerdo con algunas cosas. Davoo: — No hay nada que desearía más que a Boca le vaya bien de la mano de Román. Si esto no pasa, yo no me puedo hacer el bolud* porque yo soy más hincha de Boca que de Riquelme. Pero Riquelme es mi ídolo no solo por lo futbolístico, como persona también. Yo admiro mucho a él. La gente cuando lo critica como persona, yo no entro en esa. Yo conozco muchos casos que no salen a la luz porque no los hace público, pero conozco hospitales, gente que me escribe, que me dice: “¿Sabés que Riquelme en 2012 vino acá y se sacó una foto con mi primo que lo necesitaba y lo salvó”. Cosas que no salieron en ningún lado. Riquelme demostró ser una excelente persona. Después, como dirigente, lamentablemente me toca criticarlo con dolor, pero lo critico. Pero nunca va a ser malintencionado y nunca va a ser porque juegue para la contra de Riquelme. En diálogo con Leo Montero, Davoo compartió su experiencia como hipoacúsico y relató los desafíos que enfrentó en la infancia y la adolescencia. (Maximiliano Luna) Leo: — Hace poco contaste un problema de salud que enfrentás desde chico. ¿Te preguntaste alguna vez por qué te pasó a vos? Davoo: — ¿Por qué me pasó lo que me pasó? Porque Dios lo quiso así. Esa es la respuesta que yo encuentro. La verdad es que durante muchos momentos de mi vida yo tenía miedo de mi futuro, de no saber qué hacer, porque la verdad es que capaz mucha gente lo sabe, otra gente no. Yo soy hipoacúsico de nacimiento, escucho menos, lo heredé de mi padre. Y ser hipoacúsico, quieras o no, te limita muchas cosas. Cuando era chico me gustaba mucho la literatura, de hecho fui abanderado cuando tenía 8, 9 y 10 años. Pero sabía que no podía ser profesor porque no iba a poder estar en un aula con 30 chicos, no iba a entender, no iba a diferenciar lo que me decían. Me ha pasado de estar en reuniones, de no escuchar lo que me decían. Cuando fui creciendo, la audición se va perdiendo, entonces los últimos años de secundaria, con barbijo, encima, salía de la clase llorando porque verdaderamente quería escuchar, quería aprender, pero no podía. Y eso me fue limitando mucho y llegué a los 20 años y decía: “Tengo la capacidad para aprender, me considero una persona inteligente, siempre confió mucho en mí, pero no sé si con la limitación de la hipoacusia voy a poder ser abogado, contador, ir a una facultad o ser profesor... No me va a dar”. Entonces, el streaming me salvó porque yo sé mucho del fútbol, amo el fútbol, sé de los deportes, tengo una personalidad que a la gente le divierte y poder trabajar desde mi casa con auriculares sin la necesidad de tener que estar escuchando a la gente, sin necesidad de tener que colaborar con otras personas hizo que pueda sentirme cómodo y cuando me sentí cómodo, para mí eso hizo que me vaya muy bien. Pero se lo debo a Dios, porque siento que fue él que hizo que yo sea hipoacúsico, fue el que hizo que yo tenga que pasar por estos momentos de la vida, pero fue él que me dijo también: “Mira, con 22 años, vas a tener la vida no sé si solucionada, pero vas a poder cumplir todo lo que querías”. Y eso, la verdad es que no hubiese sido posible si me lo hubiese propuesto yo solo. Leo: — Que historia fuerte. No la había escuchado así. Davoo: — Es que nunca lo conté así. Leo: — Te agradezco entonces que lo cuentes acá. Pero fijate lo que es la vida. Vos tenías miedo de que no te escucharan cuando eras chico y hoy en día todo el mundo escucha lo que vos decís y estás con tus auriculares en tu casa siendo el put* amo. Es un rulo extraordinario. Davoo: — Es que yo durante mucho tiempo no contaba que era hipoacúsico porque es un tema. No es como usar anteojos. Vos te ponés a pensar la cantidad de defectos que me tocaron a mí... Yo no veo bien, no escucho bien, tengo escoliosis, soy muy blanco, no tengo vitamina D, tengo la piel muy sensible, me estreso y me salen cosas en la cara... El año pasado me estaba por quedar pelado. Muchas cosas que capaz la gente no ve. Y no es fácil. Nunca tuve inseguridades, siempre me acepté tal cual soy, pero sí me pasaron varias cuestiones. Tenés 12, 13, 14 años, yo fui a un colegio técnico, todo de hombres, y soy el único del colegio, el único del aula que tiene algo en las orejas. Es inevitable que no te hagan un chiste y se burlen. Leo: — Los auriculares tuyos son invisibles, pero son permanentes... Davoo: — Sí. Antes se veían mucho más. Leo: — Si no los usas, no podrías escuchar al nivel que te estoy hablando. Davoo: — No te escucharía. Yo tengo una hipoacusia muy fuerte. Mi hermano es hipoacúsico y escucha mucho mejor que yo. Yo sin audífonos no puedo, Leo. No llego a la sordera, gracias a Dios. Estoy lejos de la sordera, pero si me saco los audífonos, no me siento cómodo en la realidad. Y me pasó de bancarme muchas cosas por este tema. No me olvido más, en 2017, voy al lugar donde me arreglaban los audífonos y estaban todos muy preocupados, tristes. Y pregunté qué pasó. Y me contaron que un chico de 12 años se había suicidado porque no toleraba ser hipacúsico y que todos lo carguen por eso. Y a mí me quedó grabado eso. Pasaron los años y cuando arranqué a ser conocido, yo evitaba que se note. A mí me sacaban fotos en 2021 y cuando pedían una foto, me sacaba rápido los audífonos para que no se vean. Yo no quería que la gente se entere porque la había pasado muy mal, me cargaban mucho con eso. Hasta que lo conté en una nota y me di cuenta que a la gente le chupó un huev* y eso fue lo que más me gustó. Y arranqué a contarlo porque quiero que la gente que es hipoacúsica vean a una persona que tuvo la misma dificultad y logró lo que quería lograr. Yo quería ser esto y lo soy. Nada es imposible. Obviamente, la hipoacúsia tiene dos problemas: te limita muchas cosas y nadie entiende lo que te pasa. El 80 por ciento de los hipoacúsicos son a partir de los 70 años, es gente grande. Es muy difícil ser hipoacúsico a los 10 años. Entonces, por más que vos digas: “Sí te entiendo”. No me entendés. Vos no sabés lo que es estar en un aula y no escuchar, no sabés lo que es que alguien cuente un chiste y se rían todos y no escuchar. No te das una idea de lo que es ser hipoacúsico. Es mucho peor de lo que la gente cree. Entonces, a los hipoacúsicos que, si bien somos la minoría, quiero decirles que si confiás en vos mismo, vas a poder lograrlo igual. Yo soy hipoacúsico, confié siempre en mí y acá me ves. La limitación te la ponés vos. Quién y por qué Leo invitó a Davoo a enfrentarse a una situación hipotética y decidir a quién elegiría entre dos de sus grandes pasiones: Juan Román Riquelme y Andrés Ciro Martínez, líder de Ciro y los Persas, en las preguntas de Random. Leo: — Vos contaste que tu mamá te acompaña al médico al día de hoy. Si tu mamá no pudiera acompañarte, ¿a quién elegirías para que lo hiciera con vos y por qué? ¿A Román o a Ciro? Davoo: — Riquelme. La realidad es que... me imagino ahí a Román negociando con el médico para que no me cobre cara la consulta (risas). Hablando en serio porque... Ya de por sí, el plan de ir al médico tampoco es guau, pero en ese plan voy a hablar con él y a conocerlo. Y con todo respeto, prefiero tener una charla con Román y hablar de la final de Real Madrid. Con Ciro me encantaría charlar, debe ser de las tres personas que más quiero charlar, pero Riquelme es la primera opción. Leo: — Segunda situación. Si tuvieras que elegir a uno de ellos para jugar un torneo de Play, ¿a quién elegirías y por qué? Davoo: — Riquelme. Porque me cag*ría de risa jugando un Boca contra Villarreal contra Riquelme. Encima, yo soy horrible jugando a la Play, pero seguramente sea mejor que él. Leo: — ¿No lo ves a Ciro jugando a la Play? Davoo: — Ciro, perdón, pero prefiero jugar con Román. Es un juego de FIFA,es fútbol. Si fuese algo de Los Piojos, sí... Leo: — Tercera y última situación del quién y por qué. Sí o sí, tenés que tatuarte la cara de uno de ellos dos. ¿Te tatúas a Román o a Ciro? Davoo: — No tengo tatuajes. Me podría hacer un tatuaje de los dos. Pero creo que más un tatuaje de ellos, me haría un tatuaje de Boca y uno de Los Piojos porque soy más de Los Piojos que de Ciro y soy más de Boca que de Román. Pero si tengo que sí o sí elegir a uno tatuarme... Román. Leo: — Sino podemos ir con un artista que haga las caras mitad y mitad. Sería muy único para vos. La mitad de Román y la mitad de Ciro. Davoo: Puede ser. Bueno, te lo firmo ahí, si querés...

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