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Colon » El Entre Rios
Fecha: 22/09/2025 12:31
Luego de más de un año de reclamos y acciones legales, vecinos de la zona de Boulevard Yrigoyen al 1070 de Concepción del Uruguay han conseguido un fallo judicial que determina la clausura del boliche bailable Ferrugem. La decisión se basa en la reiterada violación de la normativa vigente sobre niveles de sonido, lo que ha generado un ambiente insostenible para los residentes. El conflicto se inició en 2023, cuando los habitantes del barrio comenzaron a quejarse por el volumen de la música que, cada fin de semana, les impedía descansar. A pesar de las múltiples denuncias y de que la municipalidad verificó las infracciones mediante mediciones de decibeles, el local continuó operando. Aunque recibió sanciones económicas, nunca se le retiró la habilitación. El 19 de agosto de 2025, la Cámara en lo Contencioso Administrativo Nº 2 de Concepción del Uruguay resolvió a favor de una medida autosatisfactiva presentada por vecinos, ordenando el cese provisional de las actividades de la sociedad de hecho Ferrugem. Esta decisión se basó en un informe de evaluación de impacto acústico que indicaba la necesidad de adecuar las instalaciones del local. Sin embargo, el 12 de septiembre pasado el director de Legislación y Asuntos Jurídicos de la municipalidad, Gerardo Robin, presentó una denuncia ante la Policía, indicando que el personal de la Dirección de Seguridad Ciudadana había constatado que los propietarios de Ferrugem habían removido la faja de clausura colocada el 10 de septiembre, en cumplimiento de la resolución judicial. A pesar de que el personal municipal intentó persuadir a los propietarios para que respetaran la clausura, estos alegaron tener una resolución judicial que les permitía actuar de esa manera. Tras la llegada de Robin, se produjo una discusión con el abogado de los propietarios, pero finalmente las autoridades decidieron desalojar el local y colocar una nueva faja de clausura, dejando constancia en el acta de constatación Nº 0000204001. No obstante, tras la retirada de las autoridades, se recibió información de que la faja había sido removida nuevamente y que el local había reabierto sus puertas, continuando con la actividad comercial. Esto llevó al Estado municipal a reiterar su compromiso de hacer cumplir la medida, resaltando que la clausura se fundamenta en una sentencia judicial que responsabiliza a la municipalidad por cualquier daño resultante de la falta de cumplimiento. Fuente: La Pirámide / UD
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