Contacto

×
  • +54 343 4178845

  • bcuadra@examedia.com.ar

  • Entre Ríos, Argentina

  • Descubren que los guacamayos aprenden imitando a terceros, primer caso en la fauna silvestre

    » Diario Cordoba

    Fecha: 08/09/2025 19:33

    Una de las maneras más efectivas de aprender es mediante la imitación de terceros, procedimiento con el que observamos y luego copiamos las acciones de otros. Hasta hace poco, se creía que esto era un rasgo exclusivo de los humanos, pero un nuevo estudio publicado en Scientific Reports revela que los guacamayos también poseen esta capacidad. La imitación es un fenómeno conocido en el reino animal. Los loros son famosos por su capacidad para imitar el habla y las acciones humanas, y primates como los chimpancés han aprendido a abrir una caja de rompecabezas observando a un humano hacerlo. Ahora bien, la imitación de terceros es diferente, ya que implica aprender observando la interacción de dos o más individuos entre sí, en lugar de hacerlo mediante instrucciones recibidas directamente. El guacamayo, animal de gran inteligencia / Agencias Los científicos eligieron a los guacamayos barbazules para este estudio porque viven en grupos sociales complejos en la naturaleza, donde necesitan aprender nuevos comportamientos para integrarse rápidamente. Experimentando en dos situaciones distintas Para determinar si los guacamayos podían aprender mediante la imitación de terceros, los investigadores trabajaron con dos grupos de guacamayos, realizando más de 4.600 ensayos. En el primer grupo, estas aves observaron a otro guacamayo realizar diversas acciones en respuesta a las señales manuales hechas por un humano. Estas acciones consistían en erizar las plumas, girar el cuerpo, vocalizar, levantar una pata o batir las alas. En el segundo grupo, los guacamayos recibieron las mismas señales manuales, pero sin haber visto nunca a otra ave realizarlas, solo al humano. Los resultados fueron claros. El primer grupo (el que imitó a otro guacamayo interactuando con un humano) aprendió más acciones que el segundo, lo que significa que las interacciones entre el guacamayo y el experimentador humano les ayudaron a aprender comportamientos específicos. También aprendieron estas acciones más rápido y las realizaron con mayor precisión que el grupo que vio las indicaciones directamente desde el humano. Los autores del estudio sugieren que esta capacidad de aprender mediante la observación pasiva de dos o más individuos ayuda a los guacamayos a adaptarse a nuevas situaciones sociales e incluso podría contribuir a sus propias tradiciones culturales. "Nuestros hallazgos muestran que la imitación de terceros, incluso para acciones intransitivas, existe fuera de los humanos, lo que permite una rápida adaptación a comportamientos específicos del grupo y posiblemente a convenciones culturales en los loros", señalan los investigadores. ¿Una habilidad generalizada? La investigación muestra que los guacamayos no son solo imitadores inteligentes. También podrían tener sus propias vidas sociales complejas y normas culturales, similares a las de los humanos. Si bien esta fue la primera vez que se observó la imitación de terceros en una especie no domesticada, podría estar más extendida en el reino animal. Futuras investigaciones podrían incluir grupos más grandes de animales y otras especies, así como evaluar más comportamientos.

    Ver noticia original

    También te puede interesar

  • Examedia © 2024

    Desarrollado por