Contacto

×
  • +54 343 4178845

  • bcuadra@examedia.com.ar

  • Entre Ríos, Argentina

  • Conciencia ambiental desde el aula

    » Elterritorio

    Fecha: 07/09/2025 09:43

    En localidades de Misiones, escuelas y colegios desarrollan proyectos que van del reciclaje y la hidroponia a las huertas y la reutilización de materiales, iniciativas que promueven hábitos sostenibles y refuerzan el vínculo con la comunidad domingo 07 de septiembre de 2025 | 6:08hs. La separación de residuos está aceitada en algunas ciudades y las iniciativas en otras dependerán de un fino trabajo de concientización. En la 960 de Itaembé Miní se da un paso importante en esa dirección. Foto: Guadalupe de Sousa Escuelas de Misiones impulsan proyectos de reciclaje, huertas, hidroponia y reutilización de materiales que involucran a docentes, alumnos y familias. En las aulas de Misiones, el compromiso ambiental se multiplica en iniciativas que combinan creatividad, aprendizaje y conciencia social. Algunas instituciones reciclan plásticos, cartones y tapitas; otras cultivan alimentos con hidroponia o huertas libres de agrotóxicos; también están las que reutilizan telas y maderas en desuso para confeccionar objetos útiles. Cada proyecto tiene su sello propio, pero todos coinciden en un mismo propósito: mostrar que la educación puede ser el motor de un futuro sustentable. Lejos de ser una moda pasajera, estas experiencias se consolidaron en los últimos años como parte de la vida escolar. Docentes y estudiantes encontraron en el cuidado del ambiente una forma de transformar la teoría en práctica y, al mismo tiempo, de tender puentes con la comunidad. En este sentido, la licenciada en Gestión Educativa y especialista en Políticas Sociales Noelia Giménez, referente de Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Subsecretaría de Educación, destacó que este cambio responde a la necesidad de involucrar a toda la sociedad. Camino a egresar del secundario, en la Epet 36 reutilizan ropa, tubos de cartón y otros materiales. Trabajo, beneficio para la sociedad, un ingreso económico y sentido ecológico. “Este es el segundo año consecutivo del proyecto Mi Escuela Recicla, el año pasado se inscribieron 1.200 docentes y este año estamos cerca de 1.400 entre nuevos y los que continúan. La idea es que desde las instituciones educativas podamos generar un cambio en cuanto al hábito de dónde desechar y que esa economía circular genere puestos de trabajo y reduzca el volumen de basura”, expresó. Asimismo, explicó que los residuos que más se acopian son plásticos, latas, cartón y tapitas. En la práctica, los materiales recolectados terminan en el Centro Verde de Posadas o, en otras localidades, son retirados por los municipios, donde se clasifican y en ocasiones se intercambian por insumos para las propias escuelas. Más allá de los números, Giménez subrayó la fuerza de la participación juvenil. “Los chicos se preocupan mucho por el medioambiente, se nota que están atentos, sugieren propuestas y cuidan los espacios. Lo primero que surge de ellos es la cuestión ambiental, desde la economía circular hasta la huerta y la plantación de árboles”, resaltó. Esa sensibilidad se refleja en cada rincón de la provincia, donde los estudiantes se convierten en protagonistas de proyectos que no solo enseñan, sino que también inspiran. En este informe, El Territorio reunió historias de distintas instituciones que, con sus propuestas y experiencias, ponen su granito de arena para construir un planeta más sustentable. Desde la Escuela N°960 de Itaembé Guazú, que forma a los más pequeños en gestión de residuos reciclables y vio surgir al alumno que representó al país en un certamen internacional, hasta el CEP N°13 de Colonia Aparecida, que cultiva hortalizas sin agrotóxicos en una región dominada por el monocultivo, pasando por la Epet N°36, donde los jóvenes transforman telas y maderas en productos para mascotas, cada caso refleja que la conciencia ambiental crece desde las aulas y se proyecta hacia la comunidad. También se destacan propuestas como la del Instituto de Enseñanza Especial Nº 0907 de Puerto Iguazú, que desde hace ocho años desarrolla ‘Nutrir para crecer’, una huerta escolar destinada a promover la alimentación saludable con talleres prácticos y el acompañamiento de la comunidad. O la Escuela de Frontera N° 613 de Tobuna, en San Pedro, donde alumnos de todos los grados cultivan hortalizas y plantas medicinales que abastecen el comedor escolar, reducen costos y garantizan alimentos frescos para las familias. Compartí esta nota:

    Ver noticia original

    También te puede interesar

  • Examedia © 2024

    Desarrollado por