Contacto

×
  • +54 343 4178845

  • bcuadra@examedia.com.ar

  • Entre Ríos, Argentina

  • No hay buena economía con mala política

    » Primerochaco

    Fecha: 06/09/2025 13:41

    “Sire haced buena política y os daré buenas finanzas”, este consejo del estadista francés Guizot al rey Luis Felipe de Orleáns al asumir el ministerio de Hacienda siempre tiene actualidad y en parte explica los problemas económicos argentinos. Tampoco se registran avances en cubrir cargos, como la designación del Procurador, el Defensor del Pueblo y una propuesta razonable para las vacantes de la Corte luego del fracaso de postular a un controvertido juez federal como lo es Alfredo Lijo, famoso por su complicidad con los corruptos, a un sitial en ese tribunal La oficina anticorrupción y la UIF han seguido el deterioro a las que fueron sometidas por el gobierno de Alberto y Cristina Fernández y hacen sospechar desde la misma designación del ministro de justicia que el gobierno busco desde el primer día impunidad. Los ilícitos en el gobierno y en áreas tan sensibles como las relacionadas con la salud pública y la discapacidad se intentan desviar buscando quienes son y que intereses representan los que los difunden en vez de concentrarse en la veracidad de los hechos, que se iniciaron desde antes de que asumiera este gobierno. Este escándalo muestra también el doble discurso de algunos personajes que ganaron cierta fama y obtuvieron bancas legislativas como supuestos “fiscales de la república” y ahora buscan disimular, defender, justificar las falencias institucionales del oficialismo y los ilícitos que tendrían relación con el entorno de la hermana del presidente que, aunque no la votó nadie, ejerce el gobierno. Nos interpela como sociedad esto de que, si coincidimos con una política económica por ello aceptamos las tropelías políticas, las corruptelas y corrupciones, reaccionando contra esas falencias solo cuando no coincidimos con la orientación de la economía, sin entender que la economía y la política están vinculadas y que la política debe estar basada en valores y principios que son esenciales para la convivencia civilizada. El populismo gobernante, como el que gobernó hasta 2023 y otros del pasado, se caracterizan por promover la división en la sociedad. Los buenos y los malos; los dueños del patriotismo y los entreguistas; los nacionales y lo antinacionales. Les molesta el debate de ideas, la apertura y el pluralismo. Se aferran a sus certezas y excluyen como el mal a los otros. Por eso se vinculan con dictadores y aprendices de autócratas, se llamen Maduro, Castro, Franco o Bukele, Castro o Orban. Es que son inseguros, acomplejados y resentidos, por eso se rodean de cortesanos adulones que les permiten aislarse de la realidad, esa realidad que tarde o a veces muy temprano, los interpela y los deja de lado como un descarte molesto.

    Ver noticia original

    También te puede interesar

  • Examedia © 2024

    Desarrollado por